El arte de saber escuchar

Si bien el tango dice "que veinte años no es nada", para Rolando Hanglin estos 20 años de radio son muchos y valiosísimos.

"RH positivo", que se emite de lunes a viernes, de 9 a 13, por Continental (AM 590), dice Lany Hanglin, "es un milagro de Dios. Cuando después de diferentes experiencias en radio El Mundo y en América, Oscar "Cholo" Gómez Castañón -a quien nunca terminaré de agradecer- me convocó para conducir este ciclo en Continental (AM 590), me sentí muy feliz, porque no hubo presiones, confiaron en mí y siempre me dejaron hacer. Ese regreso a Continental me permitió reencontrarme con las cosas más queridas: el barrio, mi casa" y hasta este ámbito donde ahora está dialogando con LA NACION (El Tortoni), el tradicional bar ubicado frente a la emisora, en Rivadavia al 800. Pero esta frase no es sólo una expresión; es la más contundente realidad, porque Hanglin vive en un edificio frente a la radio y al lado del bar.

""RH positivo" -continúa Hanglin- pasó por varias etapas. Comenzamos en el 91, por la tarde, con el formato de magazine, y tuvimos la suerte de convocar rápidamente a la audiencia, nos colocamos primeros y prácticamente nos convertimos en un boom. En esos años teníamos de columnista a Adolfo Castelo y ya causaba furor con "El gato y el zorro". A partir de 2002 pasamos a la mañana y debimos insertarnos en uno de los horarios más competitivos, con otros profesionales que ya estaban asentados en esa franja: debimos introducir algunos cambios, con más espacio para la actualidad, sin perder la esencia. Y creo que después de ciertas dudas, ensayos y algunos barquinazos "RH positivo" volvió a ser nuestro programa."

En la actualidad el ciclo cuenta con la participación de los periodistas Diego Valenzuela, a cargo de los comentarios económicos; Sergio Kanevsky en deportes; Mario Mactas, con todo lo relacionado con lo social y la vida cotidiana y el espectáculo, que Hanglin denomina "El toque Mactas" (y a las 11.45 ambos protagonizan uno de los momentos más creativos y divertidos del ciclo, "El gato y el zorro"). También colabora José Luis Alvarez Fermosel ("El caballero español"), que pone a diario el toque castizo y burbujeante en la mañana, en especial con sus comentarios de "El macho posmo", y tres veces por semana Luisa Delfino aparece con micros de cinco minutos donde habla de vivencias y sentimientos.

-¿Cuál es la fórmula que pone en práctica en su programa?

-Fundamentalmente ponerme en el lugar del oyente y no perder de vista ese objetivo. Quiero destacar especialmente el papel de Florencia Ibáñez dentro del programa, que no sólo es la locutora: es coanimadora, dueña de casa y su presencia es muy importante dentro del mismo. Ella crea climas y pone tonos que resultan un fantástico condimento. Y por otra parte la fórmula es siempre la misma: preguntar, escuchar, saber repreguntar y no opinar. Lo importante es abrir el juego, brindar el espacio para que los demás se explayen y estar atento, porque a cada columnista le interesa poder realizar y terminar bien su comentario, a los productores poner en el aire esa nota buenísima, porque además es una primicia, y yo cuido el timing, determino dónde hacer una pausa, una aclaración, un punto final o colocar una música adecuada para evitar que el oyente se aburra y cambie el dial. De vez en cuando poner un pensamiento chiquito para no abrumar. Pero trato de ser transparente, no predicar ni pontificar. Eso sí, cuido el humor, porque es lo mío. Claro, en los últimos tiempos y con la crisis la realidad circundante en la que todos quieren llorar a gritos, el humor no se puede dar en la medida necesaria y esa actualidad es la que manda. De todas maneras siento que en la vida hay que ser más light para que todo resulte más digerible.

-¿Es decir que los oyentes son casi coprotagonistas en su programa?

-Por supuesto, la gente común es genial, completamente liberada, madura y desprejuiciada. No tiene nada que ver con los políticos, con los periodistas: está para el Primer Mundo, y si no, sirva como ejemplo observar cómo sobrellevó la crisis de estos últimos tiempos: con ingenio, talento y dignidad. También aparecieron cartoneros y piqueteros, pero los más afectados fueron redescubriendo oficios y siempre con un gran señorío. Y quizás esta relación con la audiencia, después de haber ejercido otras profesiones -desde los 17 fue periodista, posteriormente escritor, director de revistas, traductor y productor de radio-, la conducción radial fue la que me permitió reconocer que ésta es mi verdadera vocación, mi pasión y el medio donde mejor me encuentro. Siento que hago radio de autor con personajes y estilos de vida. Soy tan fanático de la radio que me encanta coleccionar radios portátiles bien pequeñitas para escuchar en todo momento; pese a que estoy seis horas frente al micrófono y duermo la siesta escucho radio todo el tiempo y siempre tengo una debajo de la almohada.

-¿"Cartas y encuentros" es una experiencia muy diferente?

-"Cartas y encuentros" (lunes a viernes, de 22 a 0, también por Continental) constituye un espacio que tiene tres vértices fundamentales: las labores de Florencia Ibáñez y Fabiana Segovia, la productora, y lo que aportan los oyentes. La gente que se comunica con nosotros encuentra en este espacio confianza y contención. Nosotros escuchamos, sin escandalizarnos, con el solo objetivo de que se entretengan, diviertan y sean felices, porque con esta temática en general lo que más temen es que les tomen el pelo o que hagan bromas guarangas con algunos de sus relatos. No nos burlamos ni nos reímos de nada, sino que todo lo escuchamos con mucho respeto.

-¿Cómo definiría su rol en este ciclo?

-Una suerte de psicólogo, de viejo sabio que ha vivido y viajado mucho y que tiene gran experiencia de vida. Aquí también desarrollamos una tarea de distribución de llamadas y mails con todos los que quieren contar sus disyuntivas sentimentales y sexuales. Es decir, matizar esas llamadas soft como la del señor que busca una novia o la mujer que busca un novio con otras más hot o fuertes. Porque no todos son heterosexuales: hay gays, lesbianas y sobre todo swingers. Aparecen desde el hombre a quien su ex mujer no le deja ver a sus hijos, la señora que no consigue una relación estable, dos lesbianas que buscan una tercera, hasta el hombre que cuenta que se acuesta con su suegra y el transexual que pide una mujer de cola grande. Yo escucho, sugiero o propongo algún consejo o comentario, pero inmediatamente agrego: "Nuevamente ganamos la medalla al consejo inútil". Pero el resultado es altamente satisfactorio y la convocatoria es enorme.

-¿Qué sorpresas o satisfacciones ha obtenido en estos dos programas?

-Lo más importante es haberme hecho amigo de muchos ciudadanos desconocidos, además de las personas que trabajan conmigo en la radio. Soy de los que piensan que el afecto no hay que esconderlo. Hoy puedo decir que me considero amigo de Darío Grandinetti, Rodolfo Terragno, Felipe Solá, Daniel Scioli y también de Carlos Menem (a todos los conocí en este ámbito). Y en cuanto a las sorpresas, una fue comprobar en una nota que le hice a Mercedes Sosa en la mañana que ella escuchaba el programa de la noche. Le parecía muy audaz, sorprendente, y en verdad le gustaba mucho.

-Además de la radio están sus presentaciones en vivo...

-Sí, "El hippie viejo habla de sexo", un talk show de humor picante que desde hace varios años presento junto a Florencia Ibáñez. El próximo 2, 3 y 4 de mayo lo haremos en Coronel Suárez, Pehuajó y Trenque Lauquen, y a partir del 11 de mayo, en el Chacarerean Theatre en Palermo Viejo, los domingos, a las 19, y luego veremos qué pasa...

Quizá la mejor manera de resumir el estilo radial de Hanglin es repasar esa suerte de saludo y consigna con que inicia cada mañana su "RH Positivo": "No haga un tango de todas las cosas. El día ya está planteado: como cayó quedó. Usted dese una buena vida hoy, haciendo exclusivamente lo que le gusta. Lo único que nos falta es plata. Pero seremos riquísimos, no en esta vida. En este momento está más joven y más sexy que nunca. De manera que hoy sí, ¿eh?"

Por adentro

La producción. María González Bergez, una profesional de eficaz trayectoria en el medio, es su productora general, secundada por otro muy destacado productor, Silvio Ferrer. Junto a ellos están Hernán Valles y Carla Mitrani. Todos realizan su labor en concordancia con el área informativa, dirigida por Esteban Jacyna.

Operación técnica. Hugo Kralicek, un profesional probado que colabora además en otras áreas. Ricardo Trípoli es el encargado de la puesta en el aire de los oyentes y generador de diferentes producciones.

La Osa. Organización del sufrimiento argentino. Una sección donde la audiencia pone en el aire los diferentes sufrimientos cotidianos.

EL rebusque genial. Relatos sobre el ingenio de la gente para afrontar la crisis.

El personaje de la vida. Testimonios de aquellos que un buen día deciden emprender una aventura o profesión nueva.

Historias de animales. Historias y anécdotas relacionadas con las mascotas no domésticas: águilas, lagartos, monos, etc.

Una vida en otro lugar. Las experiencias del exilio, forzado o elegido (argentinos en el exterior).

El viaje a los abuelos. Los relatos en torno de los viajes hacia los países y regiones de donde llegaron o residen los abuelos.

Llamadas y mails. Más de 400 llamadas y 250 mails diarios en "RH Positivo". 500 llamadas y 600 mails diarios en "Cartas y encuentros".

Informativo. En este horario están a cargo Verónica Vasallo y Fabio Junco.

Target. De 25 a 70 años.

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