Cómo funciona la radio de Tinelli
Quizá lo más importante para destacar de Radio Show, la radio que Marcelo Tinelli inauguró en la frecuencia modulada 100.7 (ex Feeling), es que tiene un perfil que responde exactamente a lo que señaló en más de una oportunidad el exitoso conductor, animador empresario. Es decir, una programación donde el humor que lleva su sello y la música se disputan el protagonismo.
"Todo el día al mango, te estoy escuchando", dice el estribillo que interpreta Adrián Otero con Memphis La Blusera, en el tema que sirve de cortina de la emisora, compuesto especialmente para Radio Show. Esta letra define de alguna manera el "espíritu de grupo" que estuvo en el aire, al menos en estos primeros días, en cada uno de los entusiastas conductores y columnistas de los ciclos.
Hay que destacar de qué manera armó Tinelli esta FM. No lo hizo siguiendo el esquema de casi todas las restantes (con excepción de la Rock&Pop); es decir, no son locutores-animadores que se remiten a liderar diferentes espacios musicales, sino que la segmentó al mejor estilo AM (generando más puestos de trabajo) y si bien todos siguen la línea humorístico-musical, pueden poner de relieve sus diferentes estilos a la hora de encarar el micrófono.
No es hora de juzgar las bondades del idioma ni las buenas o malas palabras que se usan. El público que sigue a Tinelli en la TV, sabe de qué se trata. Lo que sucede es que en la radio, en general, existe un mayor cuidado del lenguaje.
De todas maneras, la audiencia que se comunica, y mucho, mediante el teléfono y los e-mails, revela un perfil mayoritariamente juvenil.
Nombres muy conocidos
Luis Majul reaparece con el periodístico "La cornisa" -de 6 a 9-, donde surge la contundente y febril labor de producción de Hugo Ferrer (los temas de las armas y de Aerolíneas recibieron un riguroso tratamiento), con el agregado de profesionales de la talla de Pablo Sirven para el exhaustivo análisis de la TV y los medios.
En la continuación programática, están los hermanos Vergara (Los Korol), de 9 a 10. El plato más esperado, "Radiomatch", se instala de 10 a 13, con la conducción del propio Tinelli, que luce su habitual solvencia, abriendo el juego a sus compañeros y con muy buen manejo de los tiempos. Y esto viene a cuento porque si bien Tinelli tiene gran experiencia radial, hacía algunos años que no estaba frente a un micrófono.
De su troupe, lo más logrado son las imitaciones. Sobre todo en el caso de Freddy, que recrea de manera impecable en tono y modismos al ministro Cavallo.
Fabián Gianola y Anita Martínez siguen a Tinelli en la grilla, de 13 16, con "Feos, pero limpitos", donde el humor transita por un fluctuante camino que va desde lo naif hasta lo vulgar. El Pato Galván anima con su equipo "Vamos todavía", hasta las 19, cuando llegan Pachu y Pablo, con "Asistencia perfecta", haciendo gala del desenfado ya acuñado en la pantalla chica. A partir de las 20, y hasta la medianoche, se instala Mariano Alvarez, quizás el profesional con mayor experiencia radial de este conjunto.
Productores, musicalizadores, operadores técnicos, movileros y coordinadores -con la batuta de su director artístico, Eduardo López Grey- son excelentes profesionales, y la radio posee la tecnología necesaria para que todo luzca de la mejor manera.
Si a todo esto agregamos que la publicidad que respalda en la radio a Tinelli también es muy importante, pinta el inicio de Radio Show de una manera más que promisoria. Habrá que esperar qué sucede de aquí en adelante. Los tiempos de la radio son muy distintos de los de la pantalla chica, pero en esta época en la que precisamente la radio sufrió despidos masivos y recortes salvajes, y cuando en muchas emisoras se vive el futuro con gran incertidumbre, la inversión y la propuesta de Tinelli surgen como una quijotada a la que hay que darle un voto de confianza y desearle la mejor de las suertes.