Pichón Baldinu, un hombre inquieto en la búsqueda de la economía del gesto
Con Lejos de la bestia, el espectáculo en el que cruza la danza contemporánea con las animaciones, el ex De La Guarda quiere concientizar sobre la violencia de género y admite que, en esta apuesta, lo aéreo es algo más
Pichón Baldinu es un artista de cruce. Cuando habla de sus obras se expresa con sinestesias: las "texturas" de un video. La "temperatura" de una escena. El "tono" de una acción física. Y, si bien las dimensiones de sus producciones siempre involucran las alturas, en esta etapa está explorando la economía del gesto.
Esta semana volverá a presentar su última creación, Lejos de la bestia, en el marco de la segunda edición del Festival Provincia Emergente, desde el viernes y hasta el domingo, en el Estadio Único de La Plata, con 4 funciones diarias y de forma gratuita.
En veinte minutos, la obra trata la problemática de la violencia de género, en un cruce de lenguajes que incluye la danza contemporánea, el montaje aéreo, las animaciones. Y el agua, un recurso que desde Hombre vertiente es una marca registrada de Ojalá, la compañía en la que actualmente Baldinu trabaja junto con Gabriela Baldini.
El show que presentará en La Plata surgió como un pedido de la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia y durante el verano pasó por diferentes ciudades de la costa bonaerense. Ahora espera conmover al público de un festival dedicado a los artistas emergentes. Muchos años atrás, él fue uno de ellos. Mientras cursaba en el Conservatorio Nacional de Arte Dramático, Baldinu creó con sus compañeros un grupo de teatro de guerrilla: La Organización Negra. Acciones callejeras, estética punk y el obelisco como escenario de vuelo.
"En la costa nos presentamos en espacios públicos y ahí recuperé el gustito de hacer algo callejero. Me recordó mi etapa en la Organización Negra. Pero la estética es muy diferente: en los años 80 la escena tenía que ver con el exterminio que podía ser representado en un mundo apocalíptico. La violencia de género es algo cotidiano. Lejos de la bestia te hace entrar casi sin darte cuenta."
Cada vez que le encargan un trabajo. Baldinu se "empapa" del tema. Algunas semanas atrás comandó el show de reapertura del Teatro San Martin que cortó la avenida Corrientes. Junto a los técnicos, bailarines y titiriteros del teatro recreó la historia de la sala, con un montaje aéreo y la banda Poncho en vivo. Los libros sobre la historia del San Martín y sus elencos estables todavía se apilan sobre su mesa de trabajo. Para hablar sobre violencia de género, había que tener muy clara la perspectiva. "Hablamos mucho con Santiago Cantón, el Secretario de DD.HH. de la provincia, que fue quien nos comisionó este trabajo. La violencia de género atraviesa a la sociedad transversalmente: no es un problema de clases sociales -explica-. Una pauta que nos dieron era que teníamos que hablarles a todos los jóvenes, sin quedarnos en un nicho. Así que fuimos hacia la historia de dos chicos que salen de una burbuja después haber sido criados con diferencias sexistas de rosa y celeste."
El elenco fue recibiendo testimonios de los espectadores movilizados por el relato. Víctimas de noviazgos violentos. Jóvenes que se sintieron identificados con el rol del maltratador y reflexionaron sobre las formas de violencia que están naturalizadas. La respuesta del público puso en palabras lo que en escena se enuncia desde todos los lenguajes.
"Me gusta poder trabajar con esa economía de palabras. Es un lenguaje multidisciplinario: con música original, de Juan Pablo Alcaro, coreografía de Verónica Pecollo y animaciones de NOS. Lo aéreo es algo más. La tecnología forma parte del lenguaje teatral de una manera poderosa. Hay tinta negra. Y mucha agua -enumera-. Además la pantalla de LED no es un elemento ni decorativo ni simplemente de amplificación: transmite la angustia de la protagonista desde un lenguaje animado. La coreografía es muy cruda, he visto gestos de dolor en el público aunque no haya ningún golpe. Algo muy intenso para las bailarinas, que muchas veces terminan llorando."
Pichón Baldinu trabaja con los bailarines en su capacidad de interpretación. "Más allá de lo acrobático o lo tecnológico, siempre fui un director de actores. En De La Guarda y La Organización Negra, los roles que creaba para mí eran muy actorales -recuerda-. Tenían una impronta trágica y de actuación física, sin texto. Por eso estoy disfrutando de poder contar una historia. Con La Organización Negra no lo hacíamos jamás; buscábamos el impacto. Y con De La Guarda queríamos que el espectador se sensibilizara con las emociones. En Hombre Vertiente empezamos a contar algo. Aunque no es muy lineal, tiene un relato que se puede seguir."
Y a propósito de seguir, espera que el camino de Lejos de la Bestia también tenga más recorrido. "Creemos que es un espectáculo que podría transitar todo el país por cómo está pensado el dispositivo escénico. El escenario se monta en un container cortado a la mitad, una de las paredes baja y queda un frente de 14 metros por 5. Esa fue una idea de Gabriela Baldini, mi socia, para poder llevar la obra a distintas ciudades y nunca perder la impronta propia. No queremos depender de lo que pueda montar cada municipalidad. Tenemos un gran consumo de electricidad, así que llevamos nuestro generador, y empleamos muchos litros de agua, que no desperdiciamos, reciclándola. Pero podríamos mejorar la propuesta -admite Baldinu-. Estaría bueno que el Estado pensara en esto más estratégicamente, porque podríamos llegar a un pueblo y trabajar con los colegios secundarios, que haya debates, que haya conversaciones con especialistas."
Si el público se siente interpelado, no es porque desde el escenario se los convoque para la acción física. Ni porque sean salpicados, ni envueltos en humaredas. Pero hay un final que lo involucra de algún modo. "Esta es una obra con cuarta pared -advierte el director-. Pero la rompemos al final."
Los imperdibles del provincia emergente
Muestras
El festival que tendrá su segunda edición provincial (en la Capital Federal se realiza desde 2008) se llevará a cabo el viernes, sábado y domingo y contará con dos grandes muestras dedicadas a los 50 años del rock argentino: Superficies de placer (dedicada a la moda) e Íconos del rock (con fotografías de Guido Adler y Aspix).
Cruce
El Combinado Argentino de Danza y el GPS de Santiago Vázquez presentarán un show de danza y percusión antes y después de los recitales programados para los tres días.
Rockumentales
En una carpa dedicada al cine, se proyectarán documentales del rock de acá como Más allá de Valle de Muñecas, Cosquín Rock XV, Sucio y desprolijo: el heavy metal en la Argentina y El mago de los vagos (sobre Pajarito Zaguri), entre otras.
Música
Más allá de los shows principales (chequear la programación completa en www.gba.gob.ar/provinciaemergente), habrá propuestas en formato redux: Eric Mandarina, Mariana Päraway y Teo Caminos, entre otros.
Lejos de la bestia
Espectáculo de Pichón Baldinu sobre la violencia de género
Festival Provincia Emergente.
Desde el viernes hasta el domingo, cuatro funciones diarias, cada una hora, a partir de las 17.30. En el Estadio Único de La Plata. Gratis.