Tori Spelling recordó el impactante accidente que sufrió y traumatizó a sus hijos: “Me caí sobre una parrilla encendida”
La actriz de Beverly Hills 90210 rememoró el incidente por el que debió ser hospitalizada y operada de urgencia, en 2015
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Tori Spelling es de esas celebridades que, desde hace décadas, genera una sonrisa en el público cada vez que aparece. Sin embargo, más allá de su innegable simpatía, la actriz de Beverly Hills 90210 no tiene ningún empeño en mostrarse perfecta e impoluta y suele compartir sus momentos más complicados y tristes. Esta semana, por ejemplo, rememoró uno de los hechos más extraños y dolorosos que le tocó atravesar: el día en el que cayó sobre una parrilla encendida.
El hecho ocurrió en pleno festejo de Pascuas de 2015. Ese día, en medio del fragor de la celebración familiar, en una conocida cadena de restaurantes, estaba tomándole una fotografía a uno de sus hijos cuando tropezó y terminó cayendo sobre el artefacto encendido.
A nueve años del accidente, Tori rememoró la experiencia en el podcast 9021OMG, que conduce junto a su amiga y colega Jennie Garth. “Me quemé muchísimo al caer sobre una parrilla hibachi caliente en Pascua, delante de toda mi familia”, relató la actriz y reveló que debido a las quemaduras, debió someterse aún injerto de piel.
“Sí. Tuvieron que sacarme piel de la pierna e injertármelo en el brazo. No mucha gente puede decir: ‘Mirá, tengo el muslo en el brazo’”, bromeo primero. Y agregó: “Estaba tratando de tomar una foto a uno de mis hijos, que estaba posando con el sombrero de chef. Di un paso hacia atrás, volé sobre el aceite y el resto es historia”.
Según su relato, cuando se cayó su brazo quedó literalmente pegado a la parrilla. “Mis familiares me contaron que empezaron a sentir olor a quemado, y ni siquiera habían comenzado a traer la comida”, indicó.
“¿Viste que cuando te caés frente a mucha gente, sentís vergüenza y te levantás como si nada hubiese pasado? Bueno, eso fue lo que hice, pero en realidad pensaba: ‘No sé si estoy bien’”, recordó. También, explicó que la reacción de los otros comensales que se encontraban en el local fue bastante extraña: “Asumieron que estaba borracha. Seguramente pensaron: ‘Bueno, es una celebridad’, como dando por sentado que estas sos cosas que nos pasan todo el tiempo”, indicó.
Sin embargo, aquella reunión estaba muy lejos de ser una salida descontrolada. “Era un brunch de Pascua con familiares y amigos... Y yo ni siquiera había bebido”, aseguró.
A pesar de la gravedad de la quemadura, Spelling siguió con la farsa de que nada había pasado. “Como la perra ruda que soy, seguí con mi comida, porque era Pascua. Después, llegamos a casa, escondí como todos los años los huevos para que los chicos los busquen y horneé galletas”, repasó.
Recién tomó conciencia de la gravedad de lo ocurrido recién al día siguiente. “Fui a la sala de emergencias y me dijeron que la piel estaba muriendo y que tenía que ir con urgencia a una clínica especializada en quemaduras”, contó.
Una vez curada, la actriz decidió demandar a la cadena de restaurantes por “lesiones por quemaduras profundas de segundo y tercer grado que requirieron hospitalización y cirugía”, pero finalmente llegó a un acuerdo extrajudicial.
“Realmente lamento no poder volver a pisar ese lugar, porque era uno de mis favoritos”, se quejó. Y explicó que sus hijos Stella y Liam recuerdan aquel día. “Fue traumático para ellos”, afirmó.
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