La princesa Carolina comienza a preparar la boda de su hijo, Andrea Casiraghi
Cuando en 1976, la princesa Carolina de Mónaco (55) se mudó a París para estudiar filosofía, pasó muy poco tiempo hasta que Philippe Junot (72), uno de los playboys más cotizados de la época, empezó a cortejarla. En cuanto la noticia llegó a palacio, su madre, la princesa Grace –una mujer que acató magistralmente las estrictas reglas de la nobleza–, puso el grito en el cielo. Pero no hubo manera de persuadir a la hija mayor de Rainiero III para que reconsiderara su relación. El 28 de junio de 1978, Carolina se casó en presencia de todas las casas reales y se convirtió en una enamorada Madame Junot.
Pareciera que treinta y cuatro años después, la historia vuelve a repetirse. Charlotte Casiraghi (26) decidió seguir lo que su corazón le dice y se mudó a París para vivir junto a su nuevo amor, Gad Elmaleh (41), un actor marroquí quince años mayor que ella. Su madre, al parecer, decidió no intervenir. Aunque, algunos amigos, afirman que su distanciamiento se debe a que no estaría de acuerdo con la relación.
De cualquier forma, este es un verano distinto para la familia Casiraghi-Grimaldi. Los primeros días de julio, Andrea (28) anunció su compromiso con Tatiana Santo Domingo (28), la millonaria heredera de origen colombiano con la que se casará el año próximo. Mientras, Pierre (24), el hijo menor de Carolina, disfruta del amor de su novia, la aristócrata italiana Beatrice Borromeo (27).
UNA MADRE REFLEXIVa
Carolina de Mónaco se muestra pensativa mientras mira al horizonte desde la cubierta del Pacha III. Este año, decidió embarcarse con un par de amigos y para sorpresa de muchos, no asistió al tradicional Baile de la Cruz Roja, ni festejó, como cada 3 de agosto, el cumpleaños de su hija Charlotte. Sus hijos varones y sus
respectivas parejas pasaron casi todo el verano haciendo planes por su lado. Sin embargo, Carolina quiso acercase a Pierre y lo invitó junto con su novia, la bellísima Beatrice, a pasar unos días con ella en Cerdeña. Según fuentes allegadas al Palacio de Montecarlo, la hija de Rainiero III se encontraría algo preocupada por la relación que Charlotte mantiene con el actor franco-marroquí Gad Elmaleh, divorciado y quince años mayor que ella. La travesía por el Mediterráneo serviría a la hermana de Alberto II para organizar la segunda mitad del año, que estará ocupada con los planes de boda de su hijo mayor con Tatiana Santo Domingo. También deberá ocuparse de los homenajes a su madre, Grace Kelly, ya que el próximo 12 de septiembre se cumplirán treinta años de su muerte.
ANDREA Y TATIANA: ADIOS A LA SOLTERIA
Aunque aún no hubo confirmación oficial, parece que Tatiana Santo Domingo estaría embarazada de su novio Andrea Casiraghi. Y no pararon de celebrarlo estas vacaciones: inauguraron la temporada a bordo del Pacha III, el barco familiar en el que se comprometieron y luego visitaron Mykonos. Actualmente, en el exclusivo balneario de Saint-Tropez, ella lució outfits bien holgados y playeros, muchas veces creados por la etiqueta que comanda junto con su amiga Dana Alikhani, Muzungu Sisters, y que ya se convirtió en un símbolo de moda étnico-ética. La firma trabaja con organizaciones de todo el mundo para elegir y comercializar productos creados con técnicas milenarias en condiciones de trabajo justas. Con su perro, un bulldog francés, la hija del colombiano Julio Santo Domingo y el mayor de los Casiraghi pasearon mientras planean su idílica boda luego de siete años de noviazgo.
PIERRE Y BEATRICE, PURO VERTIGO
En República Checa, el menor de los Casiraghi decidió inyectarle un poco de adrenalina a su verano. Pierre arribó inesperadamente a Praga con su novia, Beatrice Borromeo, para darle rienda suelta a una de sus pasiones: el paracaidismo. Después de pasar unos días en Ponza –la isla más grande del mar Tirreno, donde se conocieron hace ya casi cinco años–, se instalaron en la capital checa para una escapada romántica. Se acercaron a la Skydive Arena –ubicada en la ciudad de Letnany, el único lugar en el mundo que cuenta con un túnel de viento ubicado dentro de una cámara circular de vidrio– para entrenarse en la técnica de lanzamiento desde el aire. Así estuvo una de las parejas más chic del momento: volando y controlando la fuerza de la gravedad. "Es la primera vez que viven esta experiencia, pero quedaron tan contentos que la próxima vez dijeron que traerían a toda la familia", declaró uno de los empleados del lugar.
FELIZ Y ENAMORADA
Charlotte, una de las mujeres más bellas del mundo, disfruta cada momento de su apasionado noviazgo. La hija de la princesa de Hannover –hasta ahora inseparable de su madre– eligió vivir su vida con mayor independencia. Mientras mamá Carolina navega por el Mediterráneo, ella volvió a demostrar en Los Angeles que es una mujer enamorada y que el romance que comenzó a principios de este año es verdadero. Esta vez, Charlotte cambió las travesías marítimas, los encuentros familiares y las grandes veladas palaciegas por el bajo perfil que guarda del otro lado del océano. La monegasca dejó claro que nada le importa mientras tenga cerca a Gad. Desde que terminó su noviazgo de cuatro años con Alex Dellal, y aunque el actor sea quince años mayor, nunca se la había visto tan contenta. Gad también dejó en evidencia que su relación va en serio al presentarle su nuevo amor a su hijo Noé (11). "Nací en Marruecos y ahora vivo en París junto a una princesa. Pero la realidad, en este caso, es mejor que cualquier película", declaró en una entrevista.
Texto: Rodolfo Vera Calderón
Fotos: Getty Images y Agencias
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