Nicole Kidman presentó por primera vez a su familia en los Globos de Oro

Nicole Kidman es una de las actrices más conocidas del mundo, pero su vida personal intenta que quede fuera de los focos mediáticos. Hace casi 15 años que se casó con el músico Keith Urban, tras un intenso matrimonio con el actor Tom Cruise, y juntos tienen dos hijas. Pero Kidman, protagonista de éxitos y portadas, nunca había posado públicamente con las pequeñas. Hasta ahora.

Anoche, en la celebración de los Globos de Oro, Kidman apareció por primera vez junto a sus hijas Sunday Rose, de 12 años, y Faith Margaret, de 10. Los premios del cine y la televisión que concede la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood se realizaron desde Los Ángeles pero también desde Nueva York, aunque con los premiados presentes desde sus casas. Por eso desde su hogar apareció Kidman junto a Urban y sus dos pequeñas.

Mientras que Nicole Kidman llevaba un vestido largo negro con cadenas doradas, poco maquillaje y el pelo recogido, su marido lucía un sobrio traje con una corbata negra y las niñas se vieron muy naturales, con sencillos vestidos de manga corta en algodón blanco. Sentadas entre sus padres, las pequeñas se mostraron tímidas y silenciosas mientras su madre era nombrada como una de las nominadas al premio a mejor actriz de miniserie o telefilm, al que ella optaba por The Undoing (junto a Cate Blanchett, por Mrs. America; Daisy Edgar-Jones, por Normal People; y Shira Haas, por Poco ortodoxa) y que finalmente se llevó Anya Taylor-Joy por su interpretación en Gambito de dama.

Si durante su primer matrimonio junto a Cruise la actriz hizo todo lo posible por mantener la privacidad de sus muy expuestos hijos, Isabella y Connor, sus esfuerzos se redoblaron en esta nueva vida que comenzó hace 15 años en Nashville (Tennessee, Estados Unidos) junto a Urban. Apenas trascendieron detalles sobre los embarazos y nacimientos de las pequeñas. La mayor nació en Nashville en julio de 2008 y es la primera hija biológica de la actriz. La segunda llegó en enero de 2011 y fue fruto de un vientre de alquiler.

Para Kidman fue muy difícil poder tener a sus dos segundas hijas. Ella misma explicó poco después del nacimiento de Sunday Rose que creía, medio en broma medio en serio, que un baño en unas cascadas era lo que le había hecho quedarse embarazada. “Nunca pensé que me quedaría embarazada y daría a luz a un bebé, pero pasó”, confesó en 2008. De hecho, la intérprete de Moulin Rouge y Las horas reveló las dificultades que tuvo para quedarse embarazada y los abortos que sufrió. “Sé lo que es el anhelo. Ese anhelo. Es un anhelo enorme, doloroso. ¡Y la pérdida! No se habla lo suficiente de la pérdida por un aborto natural”, relataba hace tres años. “Es un dolor inmenso para muchas mujeres”, señalaba entonces.

En una charla con S Moda hace ocho años, Kidman hablaba de sus hijas y decía que no habían salido a ninguno de sus padres: “Pero si hablamos del físico, Sunday tiene más parecido a Keith, mientras que todo el mundo dice que Faith se parece mucho a mí. Lo que está claro es que las dos llevan la música en la sangre, y es algo que me encanta”.

Entre algunas de las escasas anécdotas que Kidman reveló en algún momento sobre las niñas, hay una curiosa relacionada con los premios que ganó por la serie Big Little Lies. Cuenta que se lo dio a Sunday por si quería ponerlo en su estantería y la pequeña le replicó agradecida que no, porque ya estaba completa. “Su estantería está llena de bolas de nieve, diplomas y libros, ya sabes, de cositas y juguetitos”, explicó en 2018. “Lo entendí perfectamente. No querés un premio que ganó tu mamá ahí, ocupando espacio. Pero la pequeña fue como... ¡lo quiero!”, dijo imitando la voz de su hija menor.

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