Naya Rivera: a dos años de su muerte, su exmarido la recordó con un conmovedor mensaje

En julio de 2020 una noticia conmovió al mundo, la actriz de Glee, Naya Rivera, murió luego de caer en un lago durante una excursión que estaba haciendo con su hijo, Josey, en las famosas Hollywood Hills, en Los Ángeles, California.

Ryan Dorsey, exmarido de la intérprete y padre del niño, hoy de 6 años, usó las redes sociales para expresar su pesar por la prematura partida de Rivera. El mensaje lo escribió justamente el Día de la Madre estadounidense, que se celebró el domingo pasado, y en el mismo incitó a la gente a abrazar a sus madres y abuela.

“Me he despertado pensando tanto... Josey está con su abuela y yo estoy solo. No mando mensajes de ‘Feliz Día de la Madre’ porque parece una locura considerando todo. Intenté volverme a dormir un poco más como si así pudiera soñar y posponer la vida real un poco”, escribió. Y sumó: “Cuanto más pienso en todo, más difícil es de creer. Es increíble aún que esto sea la realidad. Que esta es nuestra vida real y tengo que parpadear fuerte y sacudir la cabeza para salir del bucle y asumir los hechos de una vez por todas”.

En referencia al lugar donde ocurrió el hecho, expresó: “Pasar por Forest Lawn Drive siempre me traerá los recuerdos de hace dos veranos. Pero los recuerdos anteriores tengo que estar agradecido por ellos y nuestro hijo. Así que me tomo mi tiempo y derramo mis lágrimas. Y hablo de toda la mierda estúpida que nos distanció. Pensar en arrepentimientos y en cómo podría ser la vida, pero todo lo que puedo hacer es seguir adelante”.

No conforme con esas palabras y con las tiernas fotos con las que acompañó la publicación, Dorsey cerró: “Abracen a sus mamás y abuelas, y quieranlas mientras puedan. Perdonen y olviden, si pueden. No querrán encontrarse un día quizás deseando haberlo hecho”.

Un traumático accidente

El 8 de julio de 2020, un niño de 4 años fue encontrado solo en un bote en el Lago Piru (embalse artificial de los EE. UU. localizado en el bosque nacional Los Padres en las montañas Topatopa del sur de California). Su madre, tras haberlo salvado, se encontraba desaparecida. Rápidamente se supo que la mujer en cuestión era Naya y el mundo del espectáculo quedó paralizado.

Sus compañeros de Glee usaron las redes sociales para pedir por ella y más tarde, tras la noticia de su muerte, despedirla con mensajes devastadores. Entre los más afectados se encontraba su exmarido. Quien con el correr del tiempo aún sigue mostrándose roto tras la pérdida de la madre de su hijo.

En estos casi 2 años, Dorsey compartió actualizaciones de cómo estaba su hijo, y de cómo juntos afrontaban la ausencia de Naya. Videos y fotos se sucedían en las redes, donde podía verse al pequeño, hoy de 6 años, riendo y bailando. Con la llegada de esta fecha tan especial, el Día de la madre, la sensibilidad se apoderó del padre del niño quien aprovechó para expresar cómo se siente ante la ausencia física de la actriz.

Una trayectoria que quedó trunca

Naya comenzó su carrera como actriz a los cinco años, cuando debutó en la serie The Royal Family. Nacida en 1987 en California en una familia de origen portorriqueño, Rivera se acostumbró a los sets de filmación desde la primera infancia. Fascinada con la TV pero también con la música, pudo unir esas dos pasiones cuando consiguió el papel de Santana Lopez, una de las integrantes del coro adolescente en el centro de Glee.

La serie creada por Ryan Murphy fue su gran oportunidad y, como sucede usualmente en Hollywood, la obligó a interpretar a una alumna del colegio secundario cuando ella ya tenía 22 años. Pero claro, la edad era un dato menor frente a los otros requerimientos del programa que Rivera cumplía al pie de la letra.

Después de años de intentos fallidos por conseguir la oportunidad que la llevara al estrellato y de ser rechazada como participante de American Idol, finalmente ella era la indicada para un personaje que debía saber bailar y cantar. Aunque nadie en el colegio lo supiera o imaginara que una de las chicas más populares terminaría en el grupo de los nerds que integraban el coro.

En dupla con el personaje de la bailarina Heather Morris, que interpretaba a Brittany S. Pierce, Rivera consiguió destacarse en un elenco lleno de talentosos jóvenes, muchos, como Lea Michele y Jonathan Groff, provenientes del mundo de los musicales de Broadway. La buena química entre Santana y Brittany, que comenzaron como las enemigas juradas de los chicos cantores y terminaron formando parte de la banda, les dio cada vez más espacio en la trama y hasta su propio romance cuando descubrieron que eran mucho más que mejores amigas.

Después de Glee, Rivera tuvo más presencia en los medios por sus problemas personales que por su trabajo. Su conflictiva separación del rapero Big Sean y su posterior divorcio del actor Ryan Dorsey (el padre de su hijo Josey), que incluyó una denuncia por violencia doméstica contra ella, se destacaron más que sus papeles en series como Devious Maids y Step Up: High Water.

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