La diva de los almuerzos televisivos cumplió con su promesa y, en su carácter de madrina del show, visitó la carpa del Rodas, una de las atracciones fuertes de la temporada de Mar del Plata
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MAR DEL PLATA.- Mirtha Legrand es una mujer de palabra. En su llegada a Mar del Plata había prometido inaugurar sus salidas al teatro visitando la carpa del circo Rodas, ubicada en la rotonda del faro, al sur de la ciudad, y cumplió. La diva es la madrina del espectáculo y no podía dejar de asistir a su gala inaugural.
Este miércoles, pasadas las 20.40, la diva llegó en su automóvil acompañada por su asesor de vestuario Héctor Vidal Rivas y su maquilladora y asistente Gladys Andrade. En el ingreso fue recibida por Jorge Ribeiro Soarez, el dueño del Rodas, una de las carpas más importantes que giran por nuestro país. También le dio la bienvenida Marcelo López Lanza, otro de los empresarios del show. Ambos anfitriones le obsequiaron un ramo de rosas rococó, aquella flor que era un símbolo de los almuerzos de la estrella.
Cuando Mirtha comenzó a avanzar hacia el interior de la carpa, fue escoltada por la Guardia Nacional del Mar, la querida e histórica organización que acompaña a los principales eventos realizados en Mar del Plata y que es embajadora de la ciudad en el país y en el mundo.
Luego de posar con la publicidad del Rodas detrás y con los acordes de “Emperatriz”, la cortina musical de sus programas, la estrella de eltrece ingresó a la gran carpa siendo aplaudida por las 2550 personas que agotaron los tickets de la función y que la ovacionaron. En la primera fila esperaba a “La Chiqui”, su amiga María del Carmen Álvarez Argüelles, propietaria del hotel Costa Galana. A unos metros, también se encontraba el líder sindical Luis Barrionuevo.
Si Mirtha lo dice
Como suele suceder cada vez que visita un espectáculo, la diva toma el micrófono y elogia lo que acaba de ver. También sucedió anoche en el circo Rodas. Finalizada la función, Chiquita se mostró admirada por la envergadura de la propuesta e hizo hincapié en el complejo número de las motos voladoras, que giran dentro de una esfera cerrada. También quedó deslumbrada con los clowns y el número de antipodismo, la milenaria técnica que consiste en hacer malabares con los pies.
En la desconcentración, el público quiso acercarse a la diva para tomarse una fotografía, algo que ella siempre acepta con gusto, sobre todo cuando se encuentra de vacaciones en “La Feliz”, sin el apremio de una agenda comprimida.
Por otra parte, en su permanencia en Mar del Plata no se encuentra acompañada por ningún familiar, ya que, como es habitual, su hija Marcela, su nieto Nacho y su bisnieta Ámbar, entre otros seres queridos de su círculo más cercano, disfrutan de unos días de descanso en José Ignacio, cerca de Punta del Este.
Primer conflicto
La llegada de Mirtha Legrand al Rodas se vio envuelta en una polémica. El martes pasado había trascendido que la diva visitaría a Martín Bossi esa misma noche, algo que no sucedió. Cuando aquellos rumores comenzaron a trascender, se dijo que Fátima Florez no habría tomado bien que “La Chiqui” la relegara a un segundo lugar.
Finalmente, el martes pasado Mirtha prefirió cenar con amigos y reservar su primera salida pública -y en su carácter de madrina- para ver el show del circo Rodas. Este miércoles, se confirmó que la diva presenciará el viernes la función de Fátima 100%, postergando recién para su tercera salida su visita al teatro Mar del Plata para presenciar Bossi Live Comedy, el show liderado por Martín Bossi.
Anoche -en su visita al circo- Mirtha dejó en claro que hace y deshace a su modo y buscando capitalizar sus estrategias promocionales. Está claro que, si Mirtha asiste a un espectáculo y luego lo elogia, inmediatamente el amperímetro de la boletería comienza a subir. Ella lo sabe, por eso escoge con lupa precisa a quiénes apoyar.
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