La actriz y conductora está a días de pasar por el altar junto a Ramiro Ponce de León, su pareja desde 2013 y con quien mantiene una relación abierta
- 7 minutos de lectura'
En apenas unas semanas, Florencia Peña y Ramiro Ponce de León tendrán una boda doble: el 19 de noviembre se casarán en Cafayate, Salta, y el 25 de noviembre harán la fiesta en Buenos Aires para dejar a toda su familia y amigos contentos. Se conocieron en una fiesta en 2013, se enamoraron y durante cinco años él vivió en su Salta natal, donde tiene su estudio de abogacía, mientras la actriz estaba en Buenos Aires e iba y venía, siempre y cuando su trabajo y sus hijos, Juan y Tomás, se lo permitían. En 2017 nació Felipe y la pareja decidió que era tiempo de convivir, por lo cual él se mudó a la casa de ella. A casi diez años de ese primer encuentro, la boda es la frutilla de este amor que sobrevivió a la distancia y al poliamor.
La primera vez que se vieron fue en el casamiento de una amiga de la actriz en 2013. Ella fue con la idea de bailar, comer rico y pasar una buena velada. En un momento de la noche, Ramiro Ponce de León se acercó y le ofreció un daikiri de frutilla que ella aceptó. Charlaron un rato y él se fue a buscar la bebida, pero después nunca volvió. La actriz, entonces, tomó la iniciativa y fue a buscarlo, trago en mano. “Se acercó, me preguntó si quería un daikiri, y no volvió más. A lo cual pensé que si quiero la luna me la bajo yo. Fui a buscarlo, le llevé un trago y entendí que es su parte salteña: es lento. Me ninguneó y funcionó”, contó alguna vez Peña en Cortá por Lozano (Telefe). La primera cita casi se frustra porque uno de sus hijos estaba con fiebre, pero ella lo invitó a su casa, conversaron durante cuatro horas y Cupido los flechó. “No nos separamos más. Bueno, es una manera de decir porque durante más de cinco años vivimos separados, yendo y viniendo, hasta que llegó Felipe y Rama ya se quedó en casa. Cuando lo conocí, no quería ni casarse ni ser padre, ni formar una familia”, confesó ella en Flor de equipo, el programa que condujo hasta marzo de este año en Telefe. En 2017, cuando nació Felipe, se terminó de ensamblar la familia con Juan y Tomás, los hijos que ella tuvo con su anterior pareja, Mariano Otero.
Monogamia vs. poliamor
Al año de convivencia se hizo pública la primera crisis de la pareja. O eso pensaron todos cuando alguien descubrió una supuesta infidelidad de él y enseguida la actriz tuvo que salir a aclarar que practicaban el poliamor, por lo cual no se trataba de ningún escándalo porque son una pareja abierta. “La monogamia no ayuda a que las personas se elijan de un modo libre y auténtico. Tenemos una relación abierta y consensuada. Siempre hablé de libertad, pero no era mi intención salir a presentar esta carta en un programa. Él se equivocó en la manera de exponerse porque es un inexperto. No termina de darse cuenta de que tiene una relación abierta con Florencia Peña. Hace mucho que no creo en la monogamia, pero sí en formar una pareja construida desde el amor absoluto. Y por ahí andamos”, aclaró Peña en los medios, en ese momento. Y también dijo en Intrusos: “Estamos juntos porque nos amamos, pero nos vemos con otras personas. Cuando estas personas intentan embarrar la cancha desde afuera hace que uno tenga que salir a dar explicaciones. Intentamos no dañar a algunas mentes cerradas con las que convivimos y además yo tengo hijos chicos que van a la escuela, por eso no hablé hasta ahora. Pero como soy una mina que va de frente quiero que sepan que con Ramiro tenemos una relación muy charlada y ninguno de los dos hace nada que no haya sido conversado; obviamente yo no quiero escuchar detalles en un audio y él tampoco. Me hago cargo de que esto es una cagada, pero bueno, es la relación que construimos con Ramiro y nos amamos así. Acá no hay una traición. No me gustó enterarme de detalles, y tampoco me gusta que haya gente que se cuelgue de esto. Para mí este tema terminó acá”.
Se viene la boda
La pareja superó este trago amargo y a principios de año él le propuso casamiento cuando estaban de vacaciones en México. El abogado le entregó a la actriz una caja con varias cajitas adentro y en la última se encontró con una carta que decía: “Amor mío, ya vemos cuándo, ¿te casás conmigo?”. La respuesta no se hizo esperar y pronto comenzaron con los preparativos. La organización está a cargo de Claudia Villafañe y ya adelantaron que no habrá despedida de solteros. “Hicimos mucho quilombo. No vaya a ser cosa que se filtren cosas antes de casarnos y nos arruinen el casamiento”, justificó Peña entre risas. Y poniéndose más seria, dijo: “Nos íbamos a casar hace unos años, pero mi papá se enfermó en ese momento y el camino hacia su partida fue muy difícil. No había una alegría familiar para una boda, así que quedó ahí porque tampoco era algo que yo necesitara que pasara. Está claro que pensamos el amor de una forma bastante libre, pero ahora estamos en un momento donde sentimos que tenemos que celebrar la vida por muchas cosas que también sucedieron alrededor. La vida es hoy, hay que festejar y con ese espíritu me pidió casamiento porque para nosotros no es más que una excusa para celebrar con la gente que queremos, y reafirmar nuestro amor”.
Un escándalo con el padre de sus hijos
Antes de conocer a Ponce de León. Florencia Peña estuvo casada con el músico Mariano Otero. Tuvieron a Tomás, en 2003, y a Juan, en 2009. Se casaron en 2005 y se separaron en 2012, luego de un escándalo mediático provocado por la filtración de un video íntimo de la pareja. En las entrevistas de ese momento, ella contaba que Otero la había dejado. “Ya no estaba bueno lo que éramos cuando estábamos juntos. No es fácil estar conmigo, ni con ningún famoso. No se bancaba mi modo extrovertido de encarar la popularidad y yo no podía torcer mi naturaleza. Mis hijos iban y venían con el andador en los estudios de televisión, pero con Mariano jamás pude compartir mi carrera. Éramos dos artistas con una relación muy intensa, para lo bueno y lo malo. La separación de Mariano fue durísima. Jamás sentí tanto dolor. Veía los pedazos de mí misma. El estallido me agarró con la guardia baja. Durante un tiempo tuve un acompañante terapéutico viviendo en casa. Tomaba Zoloft y Rivotril para poder salir a trabajar. Estaba en juego el fracaso familiar. La idea de que mis hijos crecieran con sus padres separados me torturó durante mucho tiempo. Siendo la mina más power, me costó superar el mandato. No encontraba modo de abrir mi corazón. Daba por perdido volver a enamorarme”, contó cuando participaba en “Bailando por un sueño”.
Su debilidad, los actores
Otra de las parejas de Peña fue el actor Martin Karpan, radicado en la actualidad en Colombia desde hace muchos años. Se conocieron trabajando y estuvieron juntos algunos años hasta que se separaron en 2001. La actriz contó alguna vez que un día él agarró algunas de sus cosas y se fue del PH que compartían en Villa Urquiza: “Dejó los perros, los gatos, incluso parte de su ropa, y se fue”, contó la actriz. Tuvieron varias idas y vueltas hasta que la separación fue definitiva.
El primer novio famoso de Peña fue el actor Diego Olivera. Lo conoció cuando protagonizaba la exitosa comedia Son de Diez, junto a Federico Olivera, hermano de Diego. La relación duró casi cinco años, llegaron a convivir en un dúplex en el barrio de Belgrano hasta que se separaron en 1995. Diego vive desde hace varios años en México y es pareja de Mónica Ayos.
Más notas de Amores sin ficción
Más leídas de Personajes
En Nueva York. Mafalda, invitada especial en la gala de los Emmy Internacional, cumplirá uno de sus grandes sueños
“Eternamente agradecido”. Gastón Pauls reveló el rol que cumplió Marcela Kloosterboer en su recuperación de las adicciones
In fraganti. Paul Mescal: amores, coqueteos y conquistas de un Gladiador
Elogios, abrazos y un “piquito”. El celebrado reencuentro de Leonardo DiCaprio y Kate Winslet, a 27 años del estreno de Titanic