Parecía la unión menos pensada. Lily Allen, estrella pop de 35 años, británica, divorciada y madre de dos hijas, de un lado. Del otro, David Harbour, actor neoyorquino de 45 años que alcanzó la fama gracias a su rol de Jim Hopper en Stranger Things.Sin embargo, el flechazo se produjo en agosto de 2019 y, a pesar de que Allen suele explayarse sobre su vida privada para confirmar rumores o desmentirlos, en este caso decidió preservar el vínculo que, en el lapso de un año, se iba a convertir en nada menos que su segundo matrimonio.
Como consecuencia de ese hermetismo, ningún allegado a la pareja dio precisiones de cómo se conocieron. Las primeras fotos de Allen y Harbour juntos que comenzaron a circular a mediados del año pasado fueron sacadas en el teatro Piccadilly de Londres. Según informó la prensa en ese momento, ambos salieron a tomar aire en el intervalo de la obra, pero nunca regresaron. Ese breve instante de exposición pública fue suficiente para que los flashes los capten y las versiones de romance surjan.
Semanas más tarde, la pareja fue vista en otra cita: en esa oportunidad, mientras miraban un encuentro de boxeo, también en Londres, abrazados y riendo. De todos modos, el primer gran paso lo dieron en octubre cuando Harbour formó parte del programa Saturday Night Live y se la vio a Allen a su lado en fotos de la fiesta posterior que se llevó a cabo en Nueva York.
Los traumas del pasado
Uno de los rasgos que caracterizan a Allen es su capacidad para vivir su cotidianidad sin miedo a las opiniones de la prensa. Esto se debe, en gran medida, a que la compositora de ese gran disco de 2006 que fue Alright, Still, no tuvo una vida fácil. Por el contrario, la artista padeció la persecución de un fan a lo largo de siete años, un hombre que incluso llegó a entrar a su casa y dormir en su habitación. Los episodios experimentados por la cantante le provocaron un enorme trauma. "Me aislé del mundo después de esos años porque sentí que nadie me estaba tomando en serio mientras yo la pasaba muy mal", contó.
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida de Putting the ‘is’ in Nuance (@lilyallen) el
En ese período, su matrimonio con el decorador Sam Cooper -con quien se casó en 2011 y tuvo dos hijas, Ethel Mary, y Marnie Rose- se resintió. Un año antes del divorcio, en 2018, Allen fue diagnosticada con trastorno de bipolaridad.
Asimismo, la cantante de "Smile" luchó contra problemas alimenticios y depresión luego de haber sufrido abortos espontáneos, como contó en sus memorias, My Thoughts Exactly, donde también narró su lucha contra la depresión posparto, el estrés postraumático tras haber sido abusada sexualmente, y sus relaciones extramatrimoniales con prostitutas.
"Estaba muy deprimida y buscaba salir de casa, estar en cualquier habitación, estar lejos de todo, me encontraba perdida, sola y buscando algo", expresó Allen, quien hace dos años, luego de su divorcio, pudo comenzar a disfrutar de sus hijas y a reacomodar su vida, no sin antes hacer catarsis a través de la música con el álbum No Shame.
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida de David Harbour (@dkharbour) el
En cuanto a Harbour, el actor también fue diagnosticado con trastorno bipolar a sus 25 años, y todos los días le da pelea al alcoholismo. De hecho, a sus 20 años, sus padres lo internaron en un hospital psiquiátrico porque David no podía luchar solo contra ambas enfermedades.
"Lo curioso de mi cabeza es que cada vez que tuve un episodio maníaco, yo no pude revertirlo con lo espiritual", reveló en el podcast del actor Marc Maron. "En mi caso, me dediqué a fumar, a comer, a salir con amigos. Por eso, cuando me acerco a una recaída, las respuestas no están en lo místico. Si tuviera que escribir un libro al respecto sería: 'Si estás en ese estado, sentate en el sillón y disfrutá de los videojuegos'", manifestó el actor, quien nunca pensó seriamente en casarse -su única pareja conocida fue la actriz y cantante Alison Sudol- hasta que conoció a Allen, en quien seguramente se vio reflejado (y viceversa).
Las primeras salidas sin ocultarse de los medios
Luego de la presentación de Harbour en Saturday Night Live, los flamantes novios decidieron mostrarse ya sin miedo al asedio la prensa por las calles de Manhattan. De esta forma, octubre fue el mes en el que blanquearon su vínculo pero sin brindar declaraciones, simplemente disfrutando de salidas, desde galas benéficas a partidos de básquet.
Sin embargo, la popularidad de la pareja aumentó el 28 de octubre, cuando Harbour posteó en su cuenta de Instagram una selfie con Allen en Disney World. De allí en adelante, las publicaciones se multiplicaron en ambas redes, y en enero de 2020 llegó el inevitable paso por la alfombra roja de los premios SAG del Sindicato de Actores; este año el actor estuvo nominado por su interpretación en Stranger Things, galardón que perdió a manos de Peter Dinklage por Game of Thrones. La "derrota" no pareció importarle demasiado, ya que se lo vio feliz junto a Allen (cuyo hermano, Alfie, fue parte del cast de GOT), quien lo acompañó al evento y lució un bellísimo vestido rojo de Azzi & Osta.
En abril, los fanáticos de la pareja likearon el tierno posteo de la celebración del cumpleaños número 45 de Harbour. ¿El motivo? La fiesta que le organizó su novia junto a sus niñas. "Para mis amigos y mis fans que me desearon feliz cumpleaños, les quiero agradecer, me siento muy feliz", escribió el actor, quien luego se explayó sobre la decoración que Allen y sus hijas hicieron para agasajarlo.
El casamiento en Las Vegas que sorprendió a todos
A pesar de que una selfie de Allen en la que se le veía un anillo había llamado la atención, de todas formas la cantante y Harbour sorprendieron a todos la semana pasada, más precisamente el lunes 7, cuando se casaron en Las Vegas, en una ceremonia conducida por un imitador de Elvis Presley. ¿Las únicas personas invitadas? Las hijas de la cantante, Esther de 8 años, y Marnie, de 7.
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida de David Harbour (@dkharbour) el
"En una boda oficiada por el mismísimo Rey, la princesa del pueblo se casó con su devoto, de casta baja, pero amable poseedor de una tarjeta de crédito en una bella ceremonia, iluminada por los cielos cenicientos cortesía de un Estado en llamas, a varias millas de distancia, en el marco de una pandemia global. A continuación, los aperitivos serán servidos en una pequeña recepción", escribió Harbour en Instagram, quien recibió felicitaciones de fans y compañeros de elenco. "Esposaron a Hopper. Wow. ¡Papá, estoy muy orgullosa! Te amo y estoy muy feliz por vos", le comentó su hija en la ficción de Netflix, Millie Bobby Brown.
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida de Putting the ‘is’ in Nuance (@lilyallen) el
Fiel a su estilo relajado, ambos compartieron en sus redes postales de ese día, desde lo que comieron tras la boda -hamburguesas- hasta un viaje previo que hicieron por Croacia. Para dos personas que lucharon y sufrieron mucho, el haberse conocido fue un momento clave en sus vidas, y la velocidad con la que avanzó su relación no deja de ser una prueba de ello.
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida de Putting the ‘is’ in Nuance (@lilyallen) el
Más notas de Amores sin ficción
Más leídas de Personajes
"Quedó atónito". La reacción de Tom Brady al enterarse de que su exesposa, Gisele Bündchen, está embarazada
“Me dejó rota”. Eugenia Quibel, la última pareja de Rozín entre el legado profesional, el deseo final y los recuerdos
Amores de selección. Los que dieron el sí, los que se separaron en medio de un escándalo y los enamorados de siempre
"El tiempo dirá”. Francella habló por primera vez acerca de su crisis matrimonial con Marynés Breña