La preocupación de Benjamín Vicuña, desde Chile: “Alejado de mi familia, con fronteras cerradas”

La pandemia obligó al mundo entero a aislarse y frenar durante más de un año, con fronteras cerradas que dificultan los reencuentros y los viajes. Instalado en Chile por trabajo, Benjamín Vicuña escribió una poética reflexión hablando sobre la ansiedad que le genera estar cerca de su familia en Argentina y la crisis sin precedente que se vive en el mundo del espectáculo en vivo.

“Para nadie es una novedad hablar sobre los tiempos desafiantes que vivimos. Tiempos comparados con guerras que al menos yo no viví”, comenzó escribiendo. “Para nadie es fácil manejar en medio de la niebla, muchas veces sin saber cuál es el camino. Qué difícil para la ciencia y para nosotros entender que el aire puede ser nuestro enemigo, un beso un kamikaze y la distancia con nuestros seres queridos un salvavidas”.

El chileno también reflexionó sobre lo que implica cumplir con sus compromisos laborales en tiempos de pandemia. “En mi caso, como actor, cumplo con mi responsabilidad de terminar una serie nocturna en Chile desde el 6 de marzo, alejado de mi familia radicada en Buenos Aires, con fronteras cerradas que solo aceleran la ansiedad y con mis teatros sin poder abrir sus puertas hace ya más de un año”.

“Qué desolación ver cómo algo tan grande y noble como un centro cultural se cae a pedazos en medio del desinterés”, expresó haciendo referencia a la crisis que se vive en la industria del entretenimiento, en donde tanto la música como el teatro están paralizados dejando a miles de personas sin la posibilidad de trabajar.

“Nada de lo que menciono se compara al dolor de perder a alguien, eso es obvio, pero si es un dolor progresivo y aparentemente invisible. Los trabajadores de la cultura hoy son invisibles, como sus familias y necesidades. Cuánto dolor e incertidumbre caminar por las sombras de lo no esencial”, continuó en medio de su análisis sobre la situación actual de los espectáculos en vivo. “Este texto seguramente no es esencial ni relevante, pero si un grito desde lo más profundo de un hombre que improvisa y extraña en tiempos violentos”, culminó.

Vicuña se encuentra en su país natal desde principios de marzo, alejado de su mujer, Eugenia “China” Suárez, y de sus cinco hijos: Bautista, de 13 años; Beltrán, de 8 y Benicio, de 6, los tres fruto de su relación con Pampita Ardohain; y de Magnolia, de 3 años y Amancio, de ocho meses, de su actual relación con Suárez.

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