No va más: Kim Kardashian y Kanye West, cada día más cerca del divorcio
Kim Kardashian tuvo un 2020 sísmico luego de que su marido, Kanye West, anunciara que quería ser candidato a presidente de los Estados Unidos. La mediática acompañó cada desliz del rapero con paciencia e incluso lo defendió en las redes sociales, donde habló de los problemas psiquiátricos que sufría el padre de sus hijos. Sin embargo, la tormenta no pasó. Y, según detallan medios estadounidenses, el divorcio es un hecho.
Kim y Kanye están juntos desde hace casi siete años, pero este no es el primer escándalo que protagonizan. Según informó Page Six, Kardashian está decidida a terminar con su matrimonio con West. Al parecer, la pareja busca mantener en secreto su separación, pero los indicios empezaron a hacerse día a día más notables. Entre ellos, la ausencia del anillo de casamiento en la mano de Kim en cada una de las fotos que circuló estas últimas semanas; asimismo la decisión de pasar las Fiestas separados: mientras que el rapero estuvo en su rancho de Wyoming, ella, junto a sus hijos, estuvo en la casa de una de sus hermanas.
Por su parte, informa People, la mediática contrató a Laura Wasser, abogada que representó a Angelina Jolie, Johnny Depp, y Britney Spears, entre otras celebridades, para que lleve adelante su divorcio. "Él sabe que para ella está terminado. Ha tenido demasiado, y le dijo que necesita un poco de espacio para definir su futuro", dijo una fuente al citado medio. Y agregó: "Él está bien, está triste pero bien. Sabe que es inevitable que suceda, y sabe que va a ser pronto".
El mes pasado, fuentes cercanas a la pareja aseguraban que estaban viviendo vidas separadas. "Kim [quien está estudiando derecho] tiene trabajo y proyectos que son importantes para ella y Kanye, los de él", decían en ese entonces
Los padres de North, Saint, Chicago y Psalm vienen atravesando una fuerte crisis desde julio pasado, cuando se sucedieron algunos hechos relacionados a la conducta pública de West que, de alguna manera, rebalsaron el vaso. Desde su candidatura a presidente, pasando por los tuits donde acusaba a su esposa de racista a su polémico discurso de campaña -en el que aseguró que habría abortado a una de sus hijas- hicieron que Kim tuviera que salir a dar explicaciones en las redes sociales. Kardashian habló del trastorno bipolar que sufre su marido y dijo que lo estaban ayudando. Según, Page Six, la decisión la habría tomado en ese momento, pero sabía que no era bueno para su imagen dejar a su marido en plena crisis de salud.
Cuando pasó la tormenta, la pareja volvió a compartir tiempo junto a sus hijos pero, en septiembre, West volvió a hacer algunas declaraciones en redes sociales hablando de Kim y dando a entender que no estarían atravesando un buen momento.
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