Separada de Daniel Scioli, estaría viviendo un romance con Ignacio Castro Cranwell, que fue su vocero durante la campaña de 2015
Apenas terminó la elección presidencial que consagró a Mauricio Macri presidente de los argentinos, Karina Rabolini (49) decidió dejar atrás la exposición pública, las fotos, las entrevistas, los eventos y la política. Y hasta cambió su número de teléfono y su casilla de email. Sólo está en contacto con su familia, unas pocas amigas de toda la vida y con Ignacio Castro Cranwell, quien sería el nuevo dueño de su corazón. Se conocieron durante la campaña presidencial, cuando él oficiaba de vocero de la entonces primera dama bonaerense y juntos recorrieron todo el país tratando de sumar votos para la candidatura de Daniel Scioli (quien ya rehizo su vida sentimental junto a Gisela Berger, modelo y ex bailarina de ShowMatch). Según dicen se enamoraron, e Ignacio dejó la casa de San Isidro Labrador en la que vivía con su ex mujer y sus hijos casi al mismo tiempo que Karina se mudaba de La Ñata. Castro Cranwell también cruzó de vereda política: hoy es funcionario del gobierno porteño del PRO, trabaja como director de Relaciones Institucionales del Ministerio de Educación (su cuñado, Felipe Miguel, es jefe de Gabinete de Horacio Rodríguez Larreta). Vive en Nordelta, en el barrio Senderos, donde Karina lo visitaría varios días a la semana.
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