Javier Faroni sobre Carlín Calvo: "Me pedía volver a trabajar porque quería escuchar el aplauso de la gente"
"Si bien sabía cuál iba a ser el desenlace, no deja de golpear fuerte no tenerlo. En estas primeras horas estoy sufriendo mucho y viendo cómo seguimos sin él. Para los que estábamos más cerca era una rutina de dependencia saber cómo estaba, qué necesitaba. Eso no está y uno se tiene que acomodar y recordarlo de la mejor forma". El productor Javier Faroni recuerda a su gran amigo Carlín Calvo, que murió el pasado viernes. Durante una entrevista con Intrusos, por América, Faroni se quiebra varias veces y se emociona al contar su relación con el actor.
Sobre los últimos años de Carlín, Faroni detalla: "Se recuperó satisfactoriamente del primer ACV y pudo volver a trabajar enseguida. Tuvo 10 años de una buena carrera y siguió disfrutando del cariño del la gente más allá de sus dificultades motrices. Pero la recuperación del segundo ACV fue muy dura y si bien al principio estuvo mejor, con el correr de los años tuvo más complicaciones y dificultados. Los últimos años fueron muy difíciles. Tenía muchas ganas de seguir viviendo, era terrible lo que luchaba para seguir estando. Los últimos meses fueron muy complicados y pensábamos que tampoco era una vida que estaba deseando tener. Estaba enojado, claramente, con lo que le había pasado. No le gustaba estar así y la peleaba bastante. Aprendió a convivir con el primer ACV y seguía trabajando y la gente lo amaba, pero después ya no pudo trabajar y volver era su gran sueño. Era una factura que me pasaba, me decía que no lo hacía", dijo y no pudo seguir hablando porque las lágrimas se lo impidieron.
Cuando se repuso, Faroni pudo seguir. "Me pedía volver a trabajar porque quería escuchar el aplauso de la gente. Leonas fue la última obra que hizo en Mar del Plata (en el 2015) y el personaje fue armado para que él viviera una temporada más. Y era impresionante lo que pasaba con el aplauso. Decía sólo una frase al final de la obra: "es una lucha". Y el teatro se venía abajo. Teníamos miedo de que no pudiera decirlo porque a veces le costaba mucho hablar. Y le quería meter texto y al final se puso a hablar y no le podíamos sacar el micrófono", ríe Faroni con nostalgia.
La relación entre el actor y el productor data de muchos años atrás. "Tengo 50 años y lo conocí a los 12. Estaba con mi abuela que era fanática de El Rafa y lo vimos de casualidad en la puerta del Teatro Provincial. Mi abuela lo paró, le pidió un autógrafo, le dijo que le gustaría ver la obra y Carlín nos invitó al teatro. Yo nunca había entrado a un teatro porque nací en General Roca, un pueblito de Córdoba que apenas tenía cine una vez por mes. Esa noche le pedí al boletero ver la obra de atrás, sin saber siquiera qué era eso. El tipo no quería, le pedí que le preguntara a Carlín que me permitió que fuera atrás, vi la obra en una silla entre bambalinas y me enamoré de eso. Volví al día siguiente y fui temprano a hablar con el boletero. Seguí yendo todos los días hasta que terminé siendo el ‘che pibe’. Mis padres me dejaban hasta las 10 de la noche. Yo vivía en Mar del Plata y mi problema era cómo seguir en contacto al verano siguiente y en invierno lo llamaba a Carlín. No sabía qué iba a pasar la temporada siguiente y me pensé un circuito. Me hice amigo de los boleteros de teatros y cines y pensé en contarle a Carlín cuáles eran las cifras de público de los otros teatros. Porque a él le interesaba cuánta gente iba a verlo pero más le interesaba cuántas veían a los demás".
De este modo y gracias a la relación que el joven Javier Faroni había establecido con los boleteros, cuando terminaba la primera función él ya tenía "las cifras de los demás y era un dato clave", recuerda y suma. "A mis 17 años nos peleamos porque me pagaba muy poco. Era generoso pero amarrete con la plata. No tenía un sueldo y me daban propinas y para ese entonces era asistente de producción y tenía muchos gastos. Un día me quedé con un vuelto de dos pesos y él se enojó muchísimo y nos peleamos. Yo seguí mi camino, trabajando en producción hasta los 19, cuando produje mi primera obra. Carlín no podía creer que siguiera trabajando sin él y hasta en contra de él. Tuvimos muchas otras peleas después de esa, cuando estuvimos un par de años separados. Y luego estuvimos toda la vida juntos. Es difícil decir qué era para mí: un hermano, un amigo del alma. Hace tres días que lloro como un nene porque muchos años reprimí mis sentimientos para sostenerlo, para contener a la familia. Carlín era todo. Si ese día él no me dejaba ir a ver la obra de atrás, qué hubiese sido de mi vida. Luchamos juntos en el éxito y el fracaso. Es familia. Representa todo para mí y lo sabía y la familia lo sabe", volvió a emocionarse el exitoso productor teatral.
En la entrevista Faroni cuenta quiénes estuvieron cerca del querido actor en los momentos más delicados. "Mucha gente ayudó en esta época y cada uno estuvo en lo que pudo. El amor que le dieron fue terrible". Y sin dar detalles de la situación económica familiar, asegura: "Nunca les va a faltar nada ni a Karina (Galluci) ni a sus hijos. (Carlín) Tuvo muchos éxitos y también gastaba mucha plata. Karina siempre estuvo y aunque ya estaban separados en el segundo ACV, siempre se ocupó".
Finalmente, el productor contó que lo emocionó ver a Ricardo Darín el día del entierro: "No tenían vinculo en los últimos años pero claramente el cariño de Ricardo a Carlín seguía vivo y por eso tuvo la necesidad de estar presente en la despedida. Y es una alegría muy grande porque vivieron años maravillosos y por una discusión de esa época no fueron cercanos. Pero me hizo feliz y a la familia también".
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