Guido Süller asegura que su flamante casa está embrujada: “Por la noche escucho llantos y lamentos”

Guido Süller se está haciendo la casa de sus sueños en el barrio San Sebastián, en Escobar. Y como le urge la que terminen, se queda a dormir ahí aunque aún no está finalizada. Sin embargo, la felicidad que sentía frente a su flamante proyecto, pronto le abrió al drama: el mediático asegura que hay fantasmas que lo atemorizan por las noches.

“Tuve que cerrar un cuarto en el que guardo todos mis recuerdos y cosas de mi hermana Silvia, de mi mamá, de Ricardo Fort, porque a la noche escucho llantos y lamentos. Toda mi vida está en ese cuarto que no abro desde hace un año. Hay una energía muy intensa”, dijo Süller en Hay que ver, al tiempo que abría la habitación y mostraba dos tótem, a los que señala como responsables del embrujo.

Süller dice que por la noche hay una oscuridad total porque vive “como en el campo”, y es entonces cuando comienzan los atemorizantes sonidos. “Escucho ruidos, como que se mueven cosas, y esos lamentos... Yo no sé qué será, pero Tomasito [su expareja] me dijo que hizo un conjuro con esos dos tótems, porque se los quiso llevar y yo no lo dejé”, explicó.

Invitada al programa, la tarotista Lourdes Verón prometió regalarle a Süller “una pirámide para lograr armonía y energía”, y de eso modo poder librarse del hechizo. “Si te hicieron un conjuro puede ser que no termines nunca la casa o que se te vaya la plata”, auguró.

Luego de trabajar durante 26 años en Aerolíneas Argentinas, Süller decidió retomar la arquitectura, profesión que estudió pero nunca ejerció. “Mi nueva casa tiene todos los chiches. Hace más de 30 años que me recibí de arquitecto y tuve un perfil bajo con respecto a eso porque pensé que es más divertido el personaje que creé para televisión”, le contaba a LA NACION hace algunas semanas. “La idea inicial era que fuera un cubo flotando en un espejo de agua, y originariamente la piscina iba a circundar la casa pero el proyecto resultó sumamente ambicioso, y en épocas de pandemia sólo logré que la piscina se meta en la casa, o sea que es in-out, calefaccionada por paneles solares. La casa es de steel frame, que es lo último que salió, porque el ladrillo es arcilla, y es antiguo construir en arcilla”, decía con orgullo.

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