A poco de cumplir 50 años, la actriz colombiana que conquistó Hollywood puede hacer gala de un historial amoroso digno de “la mujer más deseada del mundo”
- 8 minutos de lectura'
A Sofía Vergara no le gusta hablar de su pasado amoroso. Con esa cadencia colombiana tan amable en su voz y una sonrisa algo desafiante, evade cada vez que puede las preguntas sobre los hombres que pasaron por su vida. “La pregunta que más odio es cuando me preguntan de mis novios, de mis amantes. Eso me molesta porque uno trata de tener privacidad. Así que te lo voy advirtiendo de una vez”, le aclaró a Jaime Bayly hace un par de años en un mano a mano y lo dejó de inmediato fuera de juego. La periodista Pilar Castaño -”la primera dama de la moda en Colombia”-, en cambio, le arrancó entre carcajadas una confesión que describe a la perfección lo bien que la pasó la mega estrella de Barranquilla en el plano sentimental: “Yo he comido filet mignon”, se despachó.
A “la primera dama de la moda en Colombia”, como se la conoce a Castaño por su peso en el mundo fashionista del país cafetero, no le resultó nada complicado que Vergara se confiese. Solo necesitó de una brutal sinceridad: “Yo me acuerdo la envidia mía cuando salías con Luis Miguel. No vamos a hablar de eso, pero me acuerdo perfecto y luego, para rematar, entonces era Enrique Iglesias. Ya era para matarte pues”, acotó en una entrevista que hicieron por Zoom para Hola TV. “Es que yo he tenido muy buena suerte, qué quieres que te diga. He tenido buena suerte. Yo he comido filet mignon”, respondió. Desde Joe González-Ripoll, el padre de su hijo, hasta Joe Manganiello, su esposo y gran amor, repasamos las grandes conquistas de una de las mujeres más deseadas del mundo.
Un arranque impulsivo
Apenas tenía 18 años y daba sus primeros pasos como modelo cuando se casó con José Luis “Joe” González-Ripoll, el hijo de un reconocido arquitecto colombiano y alcalde de Barranquilla en dos oportunidades. Él le llevaba diez años y la razón que los empujó al altar fue un test de embarazo positivo. El matrimonio duró dos años. Según publicó la revista colombiana Soho, la pasión que solían manifestar en público durante sus primeros meses de amor se desvaneció y el final llegó por una infidelidad: Joe la descubrió en una discoteca de Bogotá con otro hombre. Con los papeles de divorcio ya firmados, Sofía empezó a protagonizar cada vez más campañas publicitarias y su carrera despegó. La relación de la actriz con su primer amor siempre fue muy cordial: juntos criaron a Manolo, el único hijo de la celebrity y el hombre más importante en su vida.
Cuando su belleza la llevó hasta el festival de Viña del Mar para oficiar de presentadora, Vergara sacó provecho de la oportunidad mucho más allá del aspecto laboral: enamoró a Luis Miguel y su nombre empezó a recorrer el mundo. El flechazo, además de flashes y glamour, generó todo tipo de versiones en la prensa del corazón, sobre todo en relación al final de la amistad de El rey sol y el actor Jaime Camil, con quien Vergara mantenía una relación antes de conocer al cantante. El amor llegó a su fin algunos meses después: según trascendió, pero nadie oficializó, el mexicano habría terminado con la relación cuando se enteró que era ella quien le decía a los paparazzi dónde encontrarlos.
Una lista para todos los gustos
Chicos malos, estrellas de Hollywood y cantantes latinos o de ritmos afroamericanos: la lista de amores de Sofía Vergara tiene hombres para todos los gustos. Y si bien no todas esas relaciones fueron confirmadas por sus protagonistas, sí salieron en la prensa y fueron noticia en el mundo.
Durante sus primeros años en Miami y luego de un fugaz romance con Enrique Iglesias, a la colombiana la relacionaron con Chris Paciello, el dueño de varios clubs nocturnos y reconocido mafioso de la movida ciudad de Florida. El fin de la relación llegó, según trascendió, cuando Paciello cayó preso en el año 2000 acusado de asesinato. Luego de una rotunda vuelta de página, Vergara se involucró en 2003 con el cantante británico de R&B Craig David, un “chico bueno”, según The Mirror, y con Puff Daddy, aunque de este encuentro no trascendió mucha información.
Vergara volvió a la tapa de las revistas dos años después cuando Tom Cruise quedó flechado al conocerla en el set de Cuatro hermanos. Sin poder sacarla de su cabeza, volvió a verla -y logró conquistarla durante la fiesta pos Oscar que Will Smith y su mujer organizaron en 2005. Según cuenta Andrew Morton en su libro Tom Cruise: la biografía autorizada, el protagonista de Misión Imposible organizó una cena con sus hijos y la joven de Barranquilla con el objetivo de evaluarla cómo madre. Pese a que todo parecía ir a la perfección, Vergara puso fin al noviazgo. ¿El motivo? La obsesión de Cruise con la cienciología. Es que la actriz colombiana pensaba, según escribió Morrón, que iría “directamente al infierno” si aceptaba la propuesta de casamiento del actor.
Tras deshacerse de Cruise, trascendió un breve romance con Mark Wahlberg que nunca se confirmó. Quien sí se hizo cargo de inmediato de su irrefrenable pasión por la modelo fue el cantante Cristian Castro, quien incluso fue más allá en materia de halagos: llegó a admitir que su relación con Vergara fue la más inolvidable de todas las que tuvo y la definió como el gran amor de su vida.
Un escándalo que terminó en tribunales
En 2010, la protagonista de Modern Family unió su camino al de Nick Loeb, un empresario y actor integrante de una de las familias más ricas y tradicionales de Nueva York. En 2012 se comprometieron, pero dos años después todo terminó entre ellos: él mismo reveló al diario The New York Times que la separación se dio por el desinterés de la artista en ser madre de nuevo. ¿Qué los mantuvo atados durante algunos años más? La custodia de dos embriones congelados que guardaban celosamente por si en algún momento coincidían en las ganas de ser padre. El conflicto comenzó después porque ella los quería destruir y él los quería conservar para implantarlos en una gestante subrogada, terminó en tribunales. En 2017 la justicia estadounidense volvió a fallar contra el pedido de Loeb.
La calma después de la tormenta
Aún no estaba todo terminado con Loeb cuando Vergara dio con el gran amor de su vida: el actor Joe Manganiello. Y si bien las versiones sobre la primera vez que se vieron son varias, los dos contaron en diferentes ocasiones que la atracción existió incluso antes de conocerse. “Solo lo había visto desde muy lejos en unos cuantos eventos. Pensé que era muy atractivo, pero no estaba interesada. Era demasiado atractivo. Porque sí, es posible ser demasiado guapo. O eso es lo que yo pensaba”, explicó ella luego de conocerse el romance en el programa The Ellen DeGeneres Show. “Sofía Vergara es mi mujer perfecta. Tiene ese encanto latino. Tiene un curvas, una cara y un pelo preciosos. Simplemente es preciosa”, declaró él por su parte en una entrevista a la revista People antes de comenzar la relación.
Según una nota de Cosmopolitan que repasa la línea del tiempo de la relación de los artistas, la primera vez que se vieron frente a frente fue en la cena de corresponsales de la Casa Blanca en mayo de 2014. Ella todavía estaba comprometida con Nick Loeb en ese momento, por lo que cada uno siguió su camino. Luego del evento, trascendió una elocuente imagen en donde se ve a Manganiello mirando sugestivamente una parte del cuerpo de Vergara mientras ella charla con un grupo de personas. En agosto de ese mismo año Manganiello le dijo a E! News: “Sí, me atraparon por completo. Eso fue realmente divertido cuando empezamos a salir, meses después de eso”.
Pocas semanas después de esa cena, Vergara canceló su compromiso. Manganiello se enteró de la ruptura y le pidió a Tyler Ferguson, compañero de la actriz en Modern Family, su número de teléfono. Lo que siguió es evidente: salieron, se enamoraron, se comprometieron durante la navidad de 2014, se casaron en 2015 y no se separaron nunca más.
Este año la feliz pareja celebró su séptimo aniversario y cada vez que les preguntan, además de deshacerse mutuamente en elogios, cuentan con una gran cuota de gracia los pormenores de su vida juntos. Así, por ejemplo, Joe confesó que a su mujer no se le mueve un solo pelo cuando le cuenta sobre sus hazañas físicas en sus viajes de turismo aventura -”Ella me dice cosas como, ‘¿Qué tal si voy a mi armario y traigo una bandeja con mis aros, y te hablo sobre ellos durante la próxima media hora’”, le explicó el actor a Jimmy Fallon para graficar el desinterés de Vergara-; y la colombiana aseguró en varias oportunidades que Bubbles, el perro que inicialmente iba a ser para ella, la odia y se robó a su marido. “No es una cosa de risa, es horrible, se ha llevado a mi marido, mi cama. Duermen juntos y yo duermo en el otro lado. Se ha convertido en algo muy raro. Pero tengo que decir que no es culpa de Joe, ella está obsesionada con él”, le dijo a Ellen DeGeneres con algo de indignación.
Más notas de Sofía Vergara
Más leídas de Personajes
En Nueva York. Mafalda, invitada especial en la gala de los Emmy Internacional, cumplirá uno de sus grandes sueños
“Eternamente agradecido”. Gastón Pauls reveló el rol que cumplió Marcela Kloosterboer en su recuperación de las adicciones
In fraganti. Paul Mescal: amores, coqueteos y conquistas de un Gladiador
Elogios, abrazos y un “piquito”. El celebrado reencuentro de Leonardo DiCaprio y Kate Winslet, a 27 años del estreno de Titanic