Fue una de las protagonistas más tiernas del programa de Cris Morena y ahora, casi 20 años después, debuta como cantante; LA NACION habló con ella para repasar su carrera y saber cómo es su vida hoy
- 5 minutos de lectura'
¿Quién no recuerda a Sol, el personaje de Chiquititas que enternecía a todos cantando “tengo el corazón con agujeritos”, allá por el ‘95? Pasaron los años y Daniella Mastricchio creció, pero nunca dejó de trabajar, aunque con menos exposición. Hizo televisión, protagonizó obras de teatro y ahora se lanza como solista con el álbum Urbango y un show con canciones propias, que realizará el próximo 21 de noviembre en La tangente. Durante algunos años estuvo dedicada a la crianza de sus tres hijos: “Pero siempre conectada al medio de alguna manera, y hoy se plasma en esta realidad”, cuenta con entusiasmo a LA NACION.
-¿Es verdad que decidiste este lanzamiento como cantante durante la pandemia?
-Sí, la idea nació en cuarentena. Siempre escribí letras de canciones, alguna melodía y la proyección era mostrarlas algún día, pero por un motivo u otro quedó en la idea. Estaba muy entusiasmada y me contacté con Nico Melo, que es mi productor musical, le conté mi idea, le mostré las letras y trabajamos juntos desde entonces. Quise darme la libertad de buscarme como artista, por eso hay singles con cumbias, melódicos, tangos, trap y rap. No pude quedarme con un género, me gustaron todos. Entonces, ¿por qué encasillarme? “Mi despertar” es el primer tema del álbum Urbango y puede escucharse en todas las plataformas digitales.
-Una cuarentena productiva, ¿fue una manera de encontrar una salida?
-Fue una maduración que le di a la idea, hice el proceso y lo ejecuté y también tuve el tiempo, escribía muchísimo más y las ganas crecieron. No podía quedar todo en letras, algo me iluminó y dije: “Es ahora el momento”. También hay otros temas sonando como “Knock Out”, “Sin Testigos”, “Fuego”, “Cuentas claras”, “El elegante” y una versión acústica de “Corazón con agujeritos”.
-Debutaste con un éxito como Chiquititas cuando eras una nena, ¿tenías consciencia en ese momento?
-Arranqué a los 7 años, muy chiquitita, una locura y en todos estos años hice procesos que estuvo bien atravesar. Siempre estuve vinculada a lo artístico, nunca dejé de hacer teatro, giras, pero no estaba en la tele y entonces la gente cree que no existís, pero estuve conectada de alguna manera y hoy se plasma en esta realidad. Me dediqué mucho a mi familia también, tengo tres hijos: Valentín de 16 años, Sol -como mi personaje en Chiquititas- de 9, y Bautista, de 4. Tengo niños en todos los niveles escolares, jardín, primaria y secundaria (risas).
-¿Estás en pareja?
-Sí, con Matías Fabiani, que es instructor de taekwondo. Convivimos, pero me prometió un próximo casamiento... Espero sea en breve (risas).
-¿Por qué empezaste a trabajar tan chiquita?
-A los 4 años me encerraba en la oficina de mi papá, que estaba en mi casa, me ponía el casete de Jugate conmigo y bailaba y cantaba, repetía publicidades. Y después, no sé cómo, me encontré haciendo lo que hacía en casa, pero en la tele. Hice muchas publicidades, era modelo de Pancho Dotto a esa edad. Creo que tuve suerte.
-¿Te hubiera gustado hacer una carrera universitaria?
-Me anoté para empezar tecnicatura en acompañante terapéutica, arranco en marzo.
-¿Qué recuerdos tenés de Chiquititas?
-Los mejores. Mucho tiempo después me di cuenta del éxito del programa. En ese momento me paraban en la calle, había mucha gente en el teatro pero no era consciente de lo que generaba. Aprendí muchísimo, me formó tanto en lo profesional como en lo personal. De verdad, fue una linda escuela. El teatro fue lo que más me gustó, lo disfruté al máximo. Y recuerdo que cada vez que terminaba una función, yo lloraba porque creía que no iba a volver a hacerla. Era muy emocionante. Aún hoy la gente me reconoce y me habla de Chiquititas. Es increíble, aunque mi cara aporta a que no haya olvido (ríe). Me sorprende que me reconozcan las nenas chiquitas porque se sigue viendo el programa en la web, y se acercan y me piden foto, mucho cariño.
-¿Renegas alguna vez?
-No, cómo voy a renegar de algo tan lindo que guardo en mi corazón...
-Tenías muchas escenas con Romina Yan, ¿cómo era la relación fue de cámaras?
-La mayoría de las escenas eran con ella. Tengo los mejores recuerdos, era una divina y nos unía un vínculo muy especial, genuino, porque pasábamos muchas horas juntas. Era casi como una mamá y así se manejaba ella con todos, nos ayudaba a hacer la tarea o si teníamos que ir al teatro y algo no salía, se ponía a ensayar. Era muy contenedora con todos.
-Hace poco algunos chicos de Cebollitas contaron que sufrieron maltrato, ¿cómo era el trato en Chiquititas?
-Muy bueno. Insisto, tengo los mejores recuerdos. Es cierto que Cris (Morena) es exigente y se ve en el producto final. Recuerdo mucha organización, una producción atenta, con todas las comodidades para los niños y las familias. Yo fui muy feliz.
-¿Tenés relación con Cris?
-En agosto pasado hice la versión acústica de “Corazón con agujeritos”, veintitantos años después, y le escribí primero a Cris para contarle mi idea con el cariño y respeto que merece ese tema para mí. Es un regalito que me hacía y le hacía a la gente. Le pareció muy bien y después compartió el video en sus redes; le encantó el trabajo que hicimos y me agradeció esa versión acústica. Estuvo bueno ese reconocimiento porque trabajamos mucho, no queríamos presentar un mamarracho.
-¿Qué proyectos tenés a corto plazo?
-El 21 de noviembre nos presentamos con la banda de La voz argentina en La tangente y es mi primera vez con temas propios. Estoy re contenta, nerviosa, ansiosa. Y seguimos trabajando en el álbum Urbango, van a salir otros temas y pueden escucharse en todas las plataformas. Van a venir otras sorpresas de temas populares como “Corazón con agujeritos” y me encantaría volver a trabajar en ficción o en teatro, claro. Amo actuar y despunté el vicio en los clips que hacemos.
Agradecimientos: make up y pelo: @anivazquez.makeup
Más notas de Entrevistas
Más leídas de Personajes
En Nueva York. Mafalda, invitada especial en la gala de los Emmy Internacional, cumplirá uno de sus grandes sueños
“Eternamente agradecido”. Gastón Pauls reveló el rol que cumplió Marcela Kloosterboer en su recuperación de las adicciones
"El dolor fue real”. Denzel Washington: su cambio físico, la ayuda que recibió de Lenny Kravitz y una impensada confesión
In fraganti. Paul Mescal: amores, coqueteos y conquistas de un Gladiador