Clara Chía pidió una orden de alejamiento contra un fotógrafo y aseguró que el acoso que sufre la “afectó psicológicamente”

El exfutbolista del FC Barcelona Gerard Piqué (36 años) y su pareja, Clara Chía (24 años), ratificaron ayer ante el juez la denuncia que interpusieron contra un paparazzi por un supuesto delito de acoso. Ambos habían solicitado al magistrado que dictara una orden de alejamiento contra Jordi Martín. Piqué, sin embargo, retiró la petición y solo Chía la mantiene, aunque la rebajó: pide que Martín no pueda acercarse a menos de un kilómetro de ella (en la petición inicial hablaba de 3000 metros). La joven manifestó que el seguimiento la afectó y para demostrarlo aportó al juzgado informes psicológicos.

En junio del año pasado, el exdeportista y Shakira anunciaban su separación tras 12 años de relación y dos hijos en común. Dos meses después, las cámaras captaban a Piqué en actitud cariñosa con Clara Chía en el concierto de Dani Martín, y desde entonces ambos pasaron a ser el centro de interés para la prensa y lo siguen siendo.

Este miércoles, la Fiscalía se opuso a la petición de Clara Chía con el argumento de que prevalece el derecho a la información. Jordi Martín declaró como investigado y ha explicado que el seguimiento de la pareja se enmarca en su labor como fotoperiodista.

Piqué regresó a la Ciudad de la Justicia de Barcelona, un escenario que le es familiar, ya que ha tenido que comparecer por el acuerdo de custodia tras su ruptura con Shakira —un acuerdo por el que la cantante colombiana ha podido mudarse a Miami con los dos hijos de la hoy expareja, Milan y Sasha— y también, en 2008, por un delito contra la seguridad vial en Barcelona. Entonces fue multado a pagar 48.000 euros por conducir sin puntos en el carnet.

Tanto Piqué como Chía detallaron al titular del juzgado de instrucción número 6 de Barcelona, Miguel Ángel Tabares, el supuesto asedio al que han sido sometidos durante el último año por parte de Martín. El episodio que desencadenó la denuncia ocurrió en mayo, en un garaje de la calle Beethoven de la capital catalana, muy cerca de la sede de la empresa Kosmos, de la que es dueño y presidente el exjugador del Barça. Según la denuncia, de unos 30 folios, se trata de un espacio privado en el que el fotoperiodista no debería haber entrado para tomar fotografías. El texto señala también que el fotógrafo siguió a la pareja durante el último año, no solo en España, sino también en diversos viajes que hicieron al extranjero.

El fotógrafo, que también declaró ante el juez, pero como investigado, explicó que cumple con su trabajo y que siguió a Piqué especialmente durante la etapa en la que mantuvo una relación sentimental con Shakira, cuyo final fue contado con detalle en las últimas canciones de la artista. Martín recordó también que Piqué es un personaje público y que él limitó a seguirlo y a tomar fotografías por el interés que suscita. Sobre el episodio del garaje, aseguró que no sabía que se trataba de un espacio privado y que no llegó a tomar fotografías.

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