Arnold Schwarzenegger llegó a Munich para realizar un evento benéfico y terminó detenido, demorado y en medio de una pesadilla sin sentido
El protagonista de Terminator arribó a Alemania este miércoles, con la intención de movilizarse desde allí hacia Austria, para participar de una subasta para apoyar iniciativas para concientizar sobre el cambio climático
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Una de las cuestiones clave por las que Arnold Schwarzenegger y Donald Trump se mantienen en veredas opuestas es la posición que mantienen sobre el calentamiento global. Al contrario de que ocurre con su compañero de partido, al actor y exgobernador de California le preocupa muchísimo el cambio climático; tanto, que lo convirtió en una causa personal.
El protagonista de Terminator creó hace un tiempo la Schwarzenegger Climate Initiative, que organiza una conferencia anual que se realiza en Viena y respalda proyectos de gestión ambiental a nivel global. Este miércoles, el actor llegó a Alemania para participar, justamente, de una cena y subasta para la protección del medio ambiente que se llevará a cabo este jueves en Stanglwirt, en su país natal. Por su nivel de estelaridad y también por el motivo de su visita, podría haber sido recibido con honores, pero nada más alejado de la realidad: fue demorado y vivió tres horas dignas de una mala comedia de enredos.
La noticia la dio a conocer el sitio TMZ: el actor fue detenido y demorado por el personal de aduanas en el Aeropuerto Internacional de Múnich-Franz Josef Strauss. El motivo que llevó a las autoridades a tomar la determinación de interrogarlo fue un valioso objeto que llevaba en su poder: un costoso reloj que, justamente, tenía previsto sumar a la subasta y no llegó a declarar. Según le contó una fuente a People, en ningún momento se le dio al actor previamente el formulario para hacerlo.
Concretamente, las normas aduaneras alemanas establecen que cualquier persona que ingrese al país por fuera de la Unión Europea debe declarar “fondos de 10 mil euros” o más y algunos “objetos valiosos como joyas y cámaras digitales costosas” pueden requerir procedimientos especiales. Además, el sitio web del aeropuerto señala que “los bienes destinados a fines comerciales siempre deben declararse independientemente de su costo”.
Lo cierto es que una vez que fue demorado, según reveló la misma fuente al portal estadounidense, Schwarzenegger hizo todo lo posible por saldar el malentendido. “Él cooperó en cada paso, a pesar de que fue un chantaje incompetente, una comedia total de errores que haría una película policial muy divertida”, dijo la fuente. En principio, acordó pagar por adelantado posibles impuestos, pero conseguir los fondos resultó ser otra tarea compleja.
“Los agentes utilizaron infructuosamente un lector de tarjetas de crédito durante una hora hasta que se dieron por vencidos. Entonces, llevaron a Arnold a un banco y le pidieron que retirara efectivo de un cajero automático para pagar. Pero eso tampoco resultó. El cajero automático al que lo llevaron tenía un límite demasiado bajo y el banco estaba cerrado. Cuando regresó, un oficial trajo un nuevo lector que, por suerte, funcionaba”, resumió la fuente. Entonces sí, después de más de tres horas demorado, se le permitió salir del aeropuerto con su reloj en mano sin más problemas.
El hecho fue confirmado por un portavoz de aduanas a CBS News y por el representante del actor, que aseguró que tras el incidente, Schwarzenegger pudo seguir con el itinerario propuesto. “Todo está bien y esperamos un evento benéfico muy exitoso. Esperamos que la próxima vez no le hagan pagar impuestos por sus trajes o cualquier otra cosa que lleve en su valija”, ironizó.
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