5 fanáticos que se obsesionaron con sus ídolos y terminaron mal
En ocasiones la línea que divide a la pasión del delito es muy delgada: aquí, cinco casos de fans sin final feliz
Los fanáticos existen desde los tiempos de las tragedias griegas cuando había personas que seguían a autores y poetas en todas las representaciones de sus obras. El tiempo pasó y el fanatismo fue mutando, con las miles de cartas postales que recibían Los Beatles en Liverpool o las vigilias en la puerta del hotel en la que se alojaban los Rolling Stones. Hoy, gracias a las redes sociales, existen “los fandoms", que consiguen que frases o momentos se vuelvan trending topic en cuestión de minutos y que están listos para defender a su ídolo pase lo que pase.
Sin embargo, existen también aquellos que pasan de la idolatría a la obsesión y se vuelven muy peligrosos, tanto para ellos como para los artistas. Presentamos cinco casos reales:
1. Madonna
Con tantos años en el mundo del espectáculo y con tanta vocación por provocar, no es raro que los fanáticos de la Chica Material se cuenten por cientos de miles en todo el globo. Pero Robert Dewey Hoskins no era un seguidor más de Madonna : comenzó a perseguirla en cada aparición pública, a seguir sus pasos cuando no estaba de gira y a espiarla en su casa. En 1995, se subió a las rejas de su mansión en Londres para decirle que le cortaría la garganta de “oreja a oreja” si no se casaba con él. Fue detenido y sentenciado a diez años de prisión.
2. Gwyneth Paltrow
Cartas, juguetes sexuales y hasta pornografía era parte de lo que semanalmente Dante Soiu le enviaba a la actriz de Shakespeare enamorado. Asustada, Gwyneth Paltrow lo denunció penalmente por acoso y en 1999 fue condenado a pasar 5 años encerrado. En 2009 reincidió, esta vez para demostrarle que ya era un hombre nuevo y que le diera una nueva oportunidad, pero sólo mostró que no estaba en sus cabales y regresó a prisión.
3. Hilary Duff
A veces la web y las redes sociales sirven para incrementar aún más la obsesión de algunas personas, ya que crea la ilusión de que uno puede estar estar viviendo la misma realidad que el ídolo. Eso sucedió con el ruso Maksim Myaskovskiy, que conoció el trabajo de Hilary Duff por la televisión, pero terminó enamorándose por los blogs y los portales. Comenzó a enviarle mensajes a la actriz y cantante explicándole que se suicidaría si ella no le prestaba atención. En 2006, fue detenido porque se supo que estaba planeando matarla en una entrega de premios.
4. Björk
Cuando uno es una estrella internacional es difícil encontrar tiempo para responder las cartas de todos los fanáticos. Si uno de éstos tiene problemas psiquiátricos, las cosas pueden volverse duras. Ricardo López se cansó de que su ídola, Björk , no contestara sus misivas y se grabó construyendo una bomba de ácido sulfúrico con la que pensaba matarla y evitar así que ella salga con otro hombre. Logró enviar la bomba, escondida en un libro, pero fue interceptada por la Policía, que cuando fue a apresarlo encontró que López se había suicidado y grabado el momento.
5. Selena
Un cierre trágico que recuerda a lo que sucedió con John Lennon fue lo que puso fin a la que podría haber sido la primera figura latina en triunfar en el pop estadounidense. Selena crecía en el ambiente de los inmigrantes que vivían en Texas, con shows que agotaban localidades en cuestión de horas, y temas que sonaban en algunas radios. Pero luego de una discusión con Yolanda Saldívar, la presidenta de su club de fans, ésta sacó un arma y la mató de un disparo.
Otras noticias de Madonna
Más leídas de Personajes
“Me dejó rota”. Eugenia Quibel, la última pareja de Rozín entre el legado profesional, el deseo final y los recuerdos
"El tiempo dirá”. Francella habló por primera vez acerca de su crisis matrimonial con Marynés Breña
Amores de selección. Los que dieron el sí, los que se separaron en medio de un escándalo y los enamorados de siempre
“No me la banco”. El inesperado conflicto que desató Paulina Cocina por su opinión sobre la chocotorta y la respuesta de Damián Betular