Películas sobre amigos "con derecho a roce", una fórmula repetida

¿Adivinen qué? Sí, Hollywood lo hizo de nuevo y volvió a gastar millones de dólares en una comedia romántica sobre dos amigos que se gustan, se miman pero se niegan al noviazgo. Con derecho a roce cuenta la historia de él (Chris Evans), un escritor que descree del amor hasta que la conoce a ella (Michelle Monaghan) y se enamora perdidamente... El problema es que la muchacha está comprometida con otro hombre, por lo que el galán decide iniciar una amistad con la esperanza de que algún día se transforme en algo más. ¿Les suena?

Aquí un repaso por algunas de las películas que -detalles más, detalles menos- se han detenido en historias de manos traviesas, besos robados y corazones desencontrados.

Amigos con derechos (2011)

El 2011, deparó una lluvia de películas con esta temática, pero ésta fue la primera de la saga. Adam (Ashton Kutcher), un muchacho con el corazón roto, se emborracha, llama a todas las mujeres que tiene agendadas en su teléfono celular y se termina reencontrando con Emma (Natalie Portman), una vieja conocida de su adolescencia. Ella, dueña de una mentalidad bastante fría, le propone tener una relación puramente física, libre de sentimientos. ¿Adivinan qué pasa después?

Amigos con beneficios (2011)

Seis meses más tarde, esta comedia protagonizada por Mila Kunis y Justin Timberlake llegó a los cines. La historia se centra en dos profesionales que entablan una relación comercial, se vuelven amigos y, un buen día, que deciden incorporar "el sexo sin amor" a su relación, casi como si se tratara de un placentero deporte. Pero, claro, las cosas entre ellos se fueron poniendo raras y, si no la vieron, ya se imaginarán todo el resto.

De amor y otras adicciones (2011)

La tercera de la saga tomaba un camino algo más dramático. ¿Por qué? Porque Maggie (Anne Hathaway) padecía una enfermedad degenerativa incurable y no quería de ningún modo que los vaivenes sentimentales afectaran su ya de por sí complicado presente. Así se topa con Jamie (Jake Gyllenhaal), un mujeriego visitador médico con quien entabla una ascética relación que, poco a poco, se vuelve muy personal y pone en jaque sus convicciones.

Muy parecido al amor (2005)

Tiempo antes de protagonizar Amigos con beneficios, Kutcher ya había transitado el rol del muchacho que cae en las redes del amor. En este caso, su partenaire era Amanda Peet, quien componía a una chica diametralmente opuesta a él, con quien conseguía congeniar y a quien, luego de varios años de relación, tendría que convencer de que lo que los unía era algo más que una amistad...

La boda de mi mejor amigo (1997)

Clásico de clásicos, otro de los hitazos de Julia Roberts. Lo curioso es que, en esta película, la mujer de la sonrisa más cautivante de Hollywood personificaba a una "perdedora" que asistía con dolor a la boda del hombre que amaba, su mejor amigo, a quien nunca se animó a confesarle su amor. Inolvidable.

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