Netflix: en Corre, la maternidad se vuelve obsesión
Sarah Paulson y la debutante Kiera Allen protagonizan este thriller de Aneesh Chaganty
- 3 minutos de lectura'
Corre (Run, Estados Unidos/2020). Dirección: Aneesh Chaganty. Guion: Aneesh Chaganty, Sev Ohanian. Fotografía: Hillary Spera. Edición: Will Merrick. Elenco: Sarah Paulson, Kiera Allen, Pat Healy, Sharon Bajer, Sara Sohn. Duración: 90 minutos. Disponible en: Netflix. Nuestra opinión: buena.
En 2018, Aneesh Chaganty debutó en la dirección con Searching, un pequeño thriller concentrado en la desesperada búsqueda de un padre del paradero de su hija a partir de las erráticas pistas que le ofrece su computadora. Lo que Chaganty consigue allí, con cierta astucia, es presentar ese vínculo, en ese caso definido por la ausencia, como el terreno fértil para la obsesión. Además, la concentración de la historia en ese único movimiento le autoriza un perfecto control de la puesta en escena. En Corre, su segunda película, un poco más ambiciosa pero afirmada sobre la misma premisa, nuevamente las relaciones filiales son el objeto de su escrupulosa exégesis y de la inevitable matriz de la obsesión.
Diane Sherman (Sarah Paulson) nos ofrece su primera imagen en un hospital, luego de un parto difícil, como espectadora privilegiada de su pequeña hija recién nacida. Diecisiete años después, Chloe (Kiera Allen) vive en la pequeña fortaleza que su madre le ha fabricado, a fuerza de medicamentos y educación hogareña. En silla de ruedas, con problemas cardíacos y severas alergias, Chole vive atada con ese inquebrantable cordón umbilical que le ofrece la protección materna, que incluye comida casera, rutinas escolares y periódicas visitas al cine. Chaganty filma ese entorno como el perfecto reflejo de la personalidad de Diane, sus mecanismos y circuitos como cristalización de su intento de control y resguardo de toda amenaza del afuera.
El quiebre llega con el atisbo del terror, el descubrimiento por parte de Chloe de cierta inconsistencia en su medicación, un nombre equivocado, un color incorrecto. A partir de allí todo lo que era familiar se torna siniestro, y Chaganty consigue verdaderos momentos de horror con decisiones muy económicas: un cambio de foco que vislumbra la aparición ominosa de la madre luego de un tímido reencuadre, la persistente dilatación de la espera que logra condensar el suspenso sin efectismo ni excesivas prolongaciones, la transformación de ese mundo adaptado a la limitada movilidad de Chloe en una progresiva trampa de la que es difícil salir indemne.
Corre no se propone llevar el terror hacia otras claves sino explotar su imaginario conocido, sobre todo despojándolo de veleidades y extravagancias y concentrándolo en su corazón: ese profundo terror al mundo ya conocido. Y en ese sentido, si bien Sarah Paulson hace de su personaje una construcción inquietante de entrada, cuya máscara se despoja de su dique de contención a medida que va perdiendo el control de la casa y de su hija, la que consigue transmitir la experiencia de ese vuelco a lo desconocido es Kiera Allen. No solo convierte a su cuerpo en su peor enemigo sino que trasmite en su muda desesperación aquello que no tiene expresión posible en el mundo organizado de las palabras.
Otras noticias de Streaming
Más leídas de Espectáculos
"El dolor fue real”. Denzel Washington: su cambio físico, la ayuda que recibió de Lenny Kravitz y una impensada confesión
Polémica. Quién es Manuel Anido Cuesta, el polémico nuevo amor de Ana de Armas
"Destruido para siempre". La contundente respuesta de Pampita a García Moritán y el nuevo paso que dio en su relación con Martín Pepa
"Fue mucha movida". Fátima Florez: de sus shows en Las Vegas a quién imitará en Carlos Paz y el personaje que no haría “nunca”