Top five: canciones acusadas de plagio
Cinco temas que alcanzaron la gloria pero terminaron rindiendo cuentas ante la justicia...
No existe una fórmula para componer un hit. Hay artistas, de hecho, que dedican gran parte de su tiempo a buscar esa canción que consiga catapultarlos un paso más allá en sus carreras... y, a veces, en ese plan, encuentran "inspiración" en viejos sonidos de otros músicos.
Aquí, un repaso por cinco composiciones que fueron éxitos pero terminaron siendo acusados de plagio.
1. Shakira y las canciones mundialistas
Shakira gambeteó y metió un gol de media cancha con "Hips don't lie", la canción que terminó siendo banda sonora del Mundial de Alemania 2006. Sin embargo, el hit de la chica que mueve las caderas no salió indemne de su propia fama: el cantante boricua Jerry Rivera puso el grito en el cielo cuando escuchó que el inicio de la canción era idéntica a la de su éxito de 1992, "Amores como el nuestro". Finalmente, ella tiró la pelota afuera, dijo que fue Wycleaf Jean quien la había convencido de incluir ese fragmento y la cosa no pasó a mayores.
La historia se repitió en 2010, con la también mundialista "Waka Waka". Wilfredo Vargas acusó a la colombiana de "robar" el estribillo de la canción "El negro no puede", de 1982... Y la verdad que tenía razón:
¿Qué dijo Shakira? Que el estribillo en cuestión pertenecía a una vieja canción folklórica africana, y que ella había decidido utilizarla para homenajear al continente que la había elegido como intérprete del himno oficial.
2. Nada se pierde, todo se transforma
En 2013, Robin Thicke se unió a T.I. y a Pharrell Williams para hacer "Blurred lines", tema que se convertiría en el primer corte de su disco homónimo. El éxito fue inmediato: días después de su publicación, el video ya tenía un millón de vistas en YouTube.
Sin embargo, los amantes del soul no demoraron en encontrar en ese hit un viejo sonido conocido. Se trataba del pegadizo beat de "Got to give it up", de Marvin Gaye. El caso fue llevado a la Justicia por los herederos del recordado músico, y el jurado les dio la razón: Thicke y Williams fueron condenado a desembolsar 7,4 millones de dólares por el "desliz".
3. Fantasmas picarones
Ray Parker Jr. tuvo su gran hit de la mano de la película Ghostbusters, en 1984. Pegadiza hasta el hartazgo, encabezó los rankings durante varias semanas y llegó a estar nominada al premio Oscar a la mejor canción, pero perdió a manos de otra gran canción, "I just called to say I love you", de Stevie Wonder.
Sin embargo, hubo un músico que acusó plagio y generó un escándalo. Se trataba nada menos que de Huey Lewis, quien encontraba un enorme parecido entre el tema de Ray Parker Jr. y su canción "I want a new drug".
Tras llevar el caso a la Justicia, los músicos llegaron a un acuerdo confidencial... Hasta 2001, cuando Lewis comentó en un programa de televisión que el fallo había sido favorable a su reclamo y, en consecuencia, había recibido una abultada suma de dinero en compensación.
4. Todo por un hit
En 1991, Vanilla Ice quiso demostrar que el rap también podía ser cosa de "chicos blancos" y lanzó su álbum debut, To the extreme. El tema que abría el disco, "Ice Ice Baby", lo llevó a la cima de los rankings, lo lanzó a una efímera fama y, también, lo condujo a los tribunales estadounidenses.
El hit contenía un claro sampleo de "Under pressure", de Queen. El problema es que Vanilla Ice y sus productores "olvidaron" mencionar que habían tomado prestado el ultra reconocido sonido del bajo de John Deacon.
Hubo demanda, pero las partes llegaron a un acuerdo extra judicial y ambas canciones pudieron seguir conviviendo pacíficamente.
5. Un ex Beatle, también en la mira
Uno de los momentos más altos de la carrera solista de George Harrison fue, sin dudas, su disco All Things Must Pass, de 1970. "My sweet Lord" se convirtió, rápidamente, en un éxito y en un himno que llamaba a la tolerancia religiosa y a la unión de las distintas creencias en un mismo sentimiento de fe.
Pero, claro, no demoraron en llegar los detractores... del lugar menos pensando. El sello neoyorkino Bright Tunes presentó una demanda contra el ex Beatle por plagiar la melodía de "He's So Fine", compuesta por Ronald Mack y lanzada en 1962 por el grupo femenino The Chiffons.
Finalmente, Harrison fue multado por "plagio inconsciente" y, unos años más tarde, se inspiró en su paso por los tribunales para escribir la canción "This song" y tomarse el asunto con mucho humor.
Bonus Track: barro en el palacio del pop
A diferencia de Britney Spears, Christina Aguilera o Miley Cyrus, Lady GaGa nunca recibió la unción por parte de la reina madre del pop, Madonna . Claramente, no hay onda entre ellas.
Pero esa indiferencia se volvió pelea cuando la señora Ciccone se hizo eco de los comentarios que señalaban que la canción de Lady Gaga, "Born This way", era sospechosamente similar a "Express Yourself". Y, aunque eligió no llevar el caso a la Justicia, Madonna se tomó el asunto en serio y le dedicó una canción a su no reconocida sucesora ("She's not me", de su disco Hard Candy) y, durante la gira MDNA Tour hizo un mash up de las dos canciones en pugna para poner en evidencia el parecido entre ambas canciones.
Otras noticias de Shakira
Más leídas de Música
“Había otro como yo”. Un grabador Geloso, una amistad de casi 60 años y el secreto para retomar cada tanto los clásicos de Pedro y Pablo
"Un fenómeno de verdad". Nació en el conurbano, se exportó a Europa y hoy tendrá su “Lolla” en el Autódromo
Carlos Bisso, el enigmático. El éxito con Conexión N°5, la leyenda del guante negro y un disco oculto durante medio siglo
Esperado debut en el Colón. El pianista Hyuk Lee, sobre la fábrica de estrellas clásicas de Corea: “Ganar es la consecuencia natural del trabajo”