¿Quién es Marilina Bertoldi, la ganadora del Gardel de Oro?

De chiquita, junto a su hermana mayor, en las tardes quietas de Sunchales, jugaba con guitarras de cartón y hacía solos en el aire. Inventaba melodías en el piano de su abuela y, al poco tiempo, ya asaltaba la discoteca de su padre. "Era como el Spotify de ese tiempo, porque él tenía una discoteca enorme y yo agarraba un disco al azar o lo elegía por la tapa. Así escuché a Nirvana, uno de los primeros discos que me movilizaron",le contó a La Nacion dos años atrás.

Marilina Bertoldi (según a ella misma le gusta recordar, nacida un martes 13), terminó el secundario y dejó su Santa Fe natal para probar suerte en la gran ciudad, pero en lugar de seguir los pasos de su hermana Lula (que en la misma instancia se fue a estudiar a Córdoba y hoy es la cantante y guitarrista del grupo Eruca Sativa), se vino a Buenos Aires con su guitarra acústica al hombro.

En 2010 se filmó cantando una de las canciones que componía desde chica ("nunca me gustó hacer temas de otros") y subió el video a Youtube. Signo de los tiempos, su tema se viralizó inmediatamente y decidió entonces armar una banda de manera más profesional: Marilina Connor Questa.

Cinco años y dos discos después,Bertoldi dio otro volantazo y lanzó su carrera solista. Desde entonces, irrumpió en la escena under del rock local con presencia y actitud. En 2017, con su álbum Sexo con modelos, compitió por un Grammy Latino contra Luis Alberto Spinetta, Los Fabulosos Cadillacs, Massacre y Andrea Álvarez, todos artistas por lo menos veinte años mayores que ella. No ganó, pero en el mismo año se llevó el Gardel a Mejor Disco Artista Femenina. "Para mí está empezando una nueva era dorada del rock argentino", dijo entonces.

A los 30 años, anteanoche, con su disco Prender un fuego, se convirtió en la segunda mujer en ganar el Gardel de Oro y en la artista más joven en llevárselo a su casa desde su primera edición, en 1999."La única mujer que ganó este premio fue Mercedes Sosa, hace 19 años. Hoy lo gana una lesbiana", dijo con orgullo con la estatuilla en la mano.

En la platea, su madre y su hermana Lula sonreían emocionadas. "Mi hermana Lula fue la persona que siempre me insistió para que cantara públicamente y si no hubiera sido por ella, yo seguiría cantando encerrada en mi habitación", confesó tiempo atrás. "Desde chicas siempre jugamos a tocar, escuchábamos música juntas, pero nunca participamos de un mismo proyecto. Fue una decisión que ni la tuvimos que plantear, sino que cada una lo entendió por su cuenta, en un punto porque somos artistas muy distintas. Tenemos gustos muy diferentes y cosas muy distintas para decir. Siento que ella es una persona, en la vida y en la música, muy optimista. Y yo estoy muy lejos de eso. Ella es la alegría y yo soy la de vamos a pensar lo que estamos haciendo porque se va todo al carajo. Lo bueno es que al ser tan diferentes encastramos perfecto".

Ya en la madrugada de ayer, en Mendoza, en diálogo con LA NACION volvió a alzar su voz para marcar su espacio: "El rock nació como eso. Eran personas que estaban haciendo cosas que molestaban, diciendo algo que nadie decía y reflejaba a una juventud que no tenía voz ni voto. Se alejaban de lugares clásicos. Así fue reinventándose, cada rama fue rebelándose contra la anterior porque ya tenía demasiados privilegios. Este momento es histórico porque se le ha dicho al rock que murió hace muchos años. Y yo siento que el rock de los hombres murió hace muchos años. Lo que nos tienen que dar es el espacio a todas las personas que por sólo pisar un escenario generan un impacto y un llamado de atención que ya ningún hombre puede generar con su voz".

Luego, ante el asombro por el desconocimiento sobre su persona, Bertoldi escribió en su cuenta de Twitter: "yahoo respuestas: quién carajos es marilina bertoldi?" Para quienes todavía no lo saben, ya es tiempo de que la conozcan.

Conforme a los criterios de

Conocé más

El Cadillac silencioso. Su parentesco con Barenboim, su lugar en Los Fabulosos y por qué en la música “la infidelidad está bien vista”

“Si tenía un problema hablaba con él”. El “cura rockero”: del gesto del papa Francisco al “delivery” para Juanse

"Gracias a ellos". Durga McBroom: la eterna voz de “The Great Gig in the Sky”, la confesión de David Gilmour y su experiencia con The End