Murió Frank Farian, el polémico creador de Milli Vanilli
Aunque no se lo veía sobre los escenarios, Farian fue el gran cerebro de grupos como Boney M y La Bouche, además del dúo de los cantantes Rob Pilatus y Fabrice Morvan que ganaron un Grammy haciendo playback, sin haber grabado los temas que publicaban
- 6 minutos de lectura'
Frank Farian, el productor de música electrónica del proyecto Boney M e inventor del tan famoso como polémico dúo Milli Vanilli, murió ayer, a los 82, años. Según informó el portal Variety, la noticia fue confirmada por su agencia de representación, Allendrof.
El primer escalón que lo llevó a la fama fue Boney M, integrado por Farian y músicos de sesión. Fue uno de los nombres de referencia del eurodisco alemán de la década del setenta y principios de los ochenta. Uno de sus principales éxitos fue “Baby Do You Wanna Bump” (1974), puntapié de un reconocimiento que le valió ocho discos de oro y platino. Tanto en ese caso como en otros más recordados y polémicos, Farian nunca apareció en las tapas de los discos. Casi toda su carrera transcurrió en bambalinas de los escenarios o detrás de las consolas de los estudios de grabación.
En 1988, Farian contrató a los bailarines y cantantes Rob Pilatus y Fabrice Morvan, que en ese momento se encontraban instalados en Munich, para crear el dúo Milli Vanilli. Como no quedó impresionado por la destreza vocal del dúo, pero sí por su apariencia física, Farian produjo un álbum exitoso para el dúo, coescribiendo canciones como “Girl I’m Gonna Miss You”, “All or Nothing” y “Baby Don’t Forget My Number”, que junto con el éxito “Girl You Know It’s True” fueron grabados, en realidad, por otros vocalistas, como John Davis, Charles Shaw, Brad Howell y las hermanas Jodie y Linda Rocco.
Lanzado por primera vez en Europa en 1988 como “All or Nothing” (retitulado “Girl You Know It’s True” para el lanzamiento del álbum en Los Estados Unidos por el sello Arista), el debut de Milli Vanilli, liderado por Rob y Fab fue seis veces álbum de platino en Estados Unidos. Además, se alzaron con el premio Grammy de 1990 al Mejor Artista Nuevo. Pero la fama alcanzada y las peleas internas entre productor y falsos cantantes hicieron que esta sociedad se terminara. En noviembre de aquel año, Farian dio por terminado el contrato con los bailarines, quienes habrían pretendido grabar con sus propias voces el siguiente disco de Milli Vanilli. Fue en ese momento en que el propio Farian habría dejado trascender la verdad sobre las grabaciones del dúo, que se habían realizado hasta ese momento.
Claro que en medio del éxito de “Girl You Know It’s True”, no había sido capaz de contar cómo se había gestado realmente el dúo. “Pensé, está bien, es sólo para discotecas y clubes”, aseguró a Los Angeles Times, durante una entrevista. “Nunca imaginé que sería un gran éxito, ni el número uno, ni el top 10 en Estados Unidos. Y entonces ya era demasiado tarde y me daba mucha vergüenza decir algo”. Pilatus y Morvan se vieron obligados a renunciar al Grammy de 1990 de Milli Vanilli al Mejor Artista Nuevo y fueron, junto con Arista Records, parte de una demanda colectiva relacionada con fraude al consumidor en Estados Unidos. Farian no pagó las consecuencias de ese fraude y continuó creando grupos desde el backstage. Otras de sus invenciones fueron Le Click y La Bouche, que dejó hits como “Be My Lover”.
Silencio autoimpuesto
Claro que el caso Milli Vanilli seguirá siendo la principal conexión del público con su nombre y su apellido. En tiempos en los que el escándalo crecía, Farian aseguró: “Las estrellas juegan un papel más importante en Estados Unidos. Se los toma mucho más en serio. Y les encanta el escándalo. ¡Esta música es sólo para bailar! ¿Cuál fue la traición? ¿Alguien en Estados Unidos creía que los Village People o los Monkees realmente cantaban ellos mismos? ¿Los Archies? Por favor. Todo el mundo lo ha estado haciendo durante 25 años. Madonna, Janet Jackson: estos espectáculos de baile perfectos ya se esperan. Así que la mejor manera de subir al escenario es con cintas. Pero tienes que decir lo que estás haciendo. Yo se esto... Aquí en Europa todo el mundo es más cool. Escriben sobre ello, pero no como si yo fuera Saddam Hussein. Si lees la prensa estadounidense, pensarás que soy más importante que Saddam”.
Una pasión poco conocida
Nacido como Franz Reuther en Kirn, Alemania, el 18 de julio de 1941, Farian se convirtió primero en chef. La comida fue una de sus grandes pasiones, incluso antes de formar una banda, Frankie Boys Schatten, que publicó su primer single “Shouting Ghost”, en 1964. En 1975, cuando se lanzó su corte de baile “Baby Do You Wanna Bump”, Farian creó el seudónimo de Boney M, en honor a un personaje de una serie de detectives australiana. Un conjunto de cantantes y bailarines antillanos se convirtieron en los principales intérpretes de Boney M y tuvieron éxitos como “Daddy Cool”, de 1976 y “Rasputin”, de 1978. Además, en 1985, Farian fundó Far Corporation con un puñado de músicos de Toto (Steve Lukather, David Paich y Bobby Kimball) y grabó Division One, un álbum que incluía una versión de “Stairway to Heaven” de Led Zeppelin que se convirtió en un éxito en Gran Bretaña.
Despedidas
Liz Mitchell, la vocalista británica nacida en Jamaica en la formación inicial de Boney M, le dijo a The Guardian: “Compartimos y nos unimos bajo una estrella que se elevó más allá de lo que jamás nos atrevimos a esperar. Bien hecho el trabajo que hicimos. Descansa en paz, Frank”. Morvan, por su parte, envió un comunicado a The Guardian tras el anuncio de la muerte de Farian que decía: “Mi más sentido pésame a su familia. Su música seguirá viva. Nunca podremos negar la felicidad y la alegría que trajo a este mundo”.
Atrás quedaron los rencores por las viejas peleas, en medio del éxito. A mediados de 2023 se estrenó el documental Milli Vanilli: El Mayor Escándalo en el Mundo de la Música, que luego de pasar por festivales de cine llegó a la pantalla de Paramount+. También se pueden encontrar entrevistas como las que Morvan ofreció en 2018 a la BBC: ““Cuando nos dieron este contrato, no teníamos manager, no teníamos abogado, el documento estaba en alemán. Nos llevamos el contrato al hotel, actuamos como si lo hubiéramos leído, pero nunca le prestamos atención (...) éramos jóvenes, inocentes y lo más importante era que nos iban a dar un adelanto con el que íbamos a poder pagar el alquiler”, contó Fabrice. Pero luego de algunas discusiones sobre hacer playback, llegó a otra conclusión: “El asistente [de Farian] nos explicó que habíamos recibido dinero de su parte y que ese dinero no era gratis. Ahora íbamos a tener que pagarles. Y de un momento a otro, estábamos enfrentados con la idea de que tendríamos que conseguir un trabajo para pagar una suma grande de dinero. Su respuesta fue: ‘Para pagarnos: solo hagan esta canción’”.
Otras noticias de Detrás de la música
- 1
Claudia Villafañe: su mejor rol, por qué no volvería a participar de un reality y el llamado que le hizo Diego Maradona horas antes de morir
- 2
El mal momento que lo tocó vivir a China Suárez a pocos días de Navidad
- 3
Con qué figura de la selección argentina habría tenido un romance secreto Emilia Attias
- 4
John Goodman, el actor de Los Picapiedra, luce irreconocible tras su gran cambio físico