Liam Payne: por presiones de la familia y los fans, dieron marcha atrás con la publicación de una canción póstuma

Liam Payne, fallecido en Buenos Aires semanas atrás, es el coautor junto al músico Sam Pounds de una canción llamada “Do No Wrong”, que se estrenaría este viernes 1° de noviembre. Sin embargo, tras el anuncio que se hizo a principios de esta semana, se decidió dar marcha atrás con el estreno y postergar su publicación.

“Aún no es el momento” y quisiera dejar a la familia del cantante “llorar en paz”, dijo el músico estadounidense Sam Pounds, luego de ver la reacción que había provocado el anuncio del lanzamiento. Inicialmente, había dicho que la canción se lanzaría el viernes y esperaba que “eclipsara los ecos negativos” que rodearon la muerte de Payne. Pero, en un comunicado días después, aseguró que estaba analizando suspender el estreno de “Do No Wrong” para “dejar la libertad de la decisión todos los miembros de la familia”.

Luego agregó: “Quiero que todas las ganancias se destinen a una organización benéfica de su elección (o como quieran). Aunque a todos nos encanta la canción, todavía no es el momento. Todos todavía estamos de luto por el fallecimiento de Liam y quiero que la familia lo lamente en paz y en oración. Todos lo esperaremos”.

A pesar de que podrían haber surgido reacciones contrarias, una gran cantidad de fans de One Direction y de Payne agradecieron a Pounds por retrasar el lanzamiento. Es probable que Pounds haya leído e interpretado con buen criterio es pedido que se podía resumir en una frase: “Habrá un momento adecuado para ello en el futuro, pero por ahora estamos de luto”.

La última semana, había posteado clips junto a Liam, grabados por Ruth, hermana de Payne. También publicó una obra de arte que muestra a un ángel debajo de un corazón negro roto. Y en referencia al estreno de la canción, había escrito en X: “Rezo para que esto sea una bendición para el mundo como Liam siempre ha soñado. Rezo para que los ángeles los consuelen a todos todos los días mientras escuchan. Rezo para que esta canción sea una bendición para Ruth, Bear [el hijo de Payne, de siete años] y toda la familia”.

Luego de esta publicación, no solo fueron fans los que opinaron sobre el lanzamiento del tema. La familia de Liam fue categórica al respecto: “Encontramos de muy mal gusto que alguien saque provecho de una muerte para lanzar una canción como tributo. La familia de Liam no está de acuerdo con esta acción (...)”, escribieron, también a través de las redes sociales.

Al momento, el último trabajo de Payne conocido por el público había sido un tema llamado “Teardrops”, que fue lanzado en marzo. El día después de su muerte, Pounds publicó un homenaje a Payne en Instagram , incluyendo un video del cantante británico en el estudio de grabación de la canción. “No puedo creer que esté escribiendo esta publicación. No puedo creer que te hayas ido de esta manera”, expresó con dolor.

La investigación

Liam Payne murió el 16 de octubre pasado en Buenos Aires, tras caer del tercer piso al patio interno del hotel de Palermo donde estaba alojado. Según los estudios realizados en las primeras horas, “atravesaba algún tipo de brote producto del abuso de sustancias”. Murió por “politraumatismos” y múltiples fracturas –entre ellas, una en la base del cráneo, de carácter vital– y “una hemorragia interna y externa”. Así lo informó el fiscal Marcelo Roma, que interinamente está a cargo de la investigación al subrogar la Fiscalía en lo Criminal y Correccional porteña N°14, conducida por su colega Andrés Madrea, en un comunicado publicado por la página web de la Procuración General de la Nación. Y la autopsia, realizada por médicos legistas del Cuerpo Médico Forense (CMF) esa misma noche, concluyó en las mismos evaluaciones que se había establecido anteriormente: “la causa de muerte de Payne, determinada macroscópicamente, ha sido politraumatismo, hemorragia interna y externa”.

El músico había nacido en Wolverhampton, el 29 de agosto de 1993. No fueron fáciles sus primeros años, ya que una insuficiencia renal condicionó seriamente el estado general de su salud. Casi como un modo de rebeldía ante esa niñez limitada por algunas internaciones y con tratamientos farmacológicos intensos, quiso imponerse desafíos extremos, como el de la alta competencia deportiva, en el atletismo. Pero sus mejores condiciones no estaban en sus piernas sino en su garganta. Afortunadamente, a muy corta edad tuvo en claro que ese era su talento.

Hasta promediar su adolescencia era un chico más, con los problemas y las angustias de cualquier muchacho de su edad. No se sentía afortunado en el amor y tomó clases de boxeo tras algunas experiencias de acoso estudiantil. En 2008 se presentó a una audición para el programa televisivo cazatalentos The X Factor. Era demasiado joven. Sin embargo, Simon Cowell, el gurú de las factorías de boy bands, le dio una segunda oportunidad, dos años más tarde. Su versión de “Cry Me a River” se impuso en el gusto del público y del jurado. Y si bien no logró perfilarse como solista, consiguió una plaza en esa nave llamada One Direction. Fue uno de los integrantes de ese flamante quinteto formado por Harry Styles, Niall Horan, Zayn Malik y Louis Tomlinson.

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