En diciembre del año pasado, el ahora ex guitarrista de Red Hot Chili Peppers, Josh Klinghoffer, recibió un mensaje de Flea, quien le pedía que fuera a su casa para "ver cómo están las cosas". Al instante, Klinghoffer sintió que algo no estaba bien. La banda había estado muy concentrada en la composición de las canciones del disco que vendría después de The Getaway (2016) y Klinghoffer, que en 2009 reemplazó al guitarrista histórico de la banda, John Frusciante, podía pensar que el encuentro tenía por objetivo discutir cuestiones de la grabación o las futuras giras. Sin embargo, "cuando recibí el mensaje, mi corazón se sobresaltó", dice Klinghoffer desde su casa en Los Ángeles. "Había algo raro en el aire, en el tono gris deprimente de ese día de diciembre, que fue un augurio... recuerdo que pensé que todo podía terminarse".
Cuando llegó, Flea, el cantante Anthony Kiedis y el baterista Chad Smith lo estaban en esperando en el jardín de la casa, todos listos para darle la noticia de que Frusciante iba a volver al grupo y que por ende la banda iba a prescindir de sus servicios de allí en más. "Fue un shock total", dice Klinghoffer. "Pero no una sorpresa".
Según él mismo admite, Klinghoffer siempre era "el tranquilo" en un grupo caracterizado por el tamaño superlativo de la personalidad de sus integrantes. Se sumó a la banda como guitarrista invitado para las giras, adquiriendo carácter de miembro pleno con I’m With You (2011). Ahora, a medida que los años que estuvo en la banda vayan quedando atrás, Klinghoffer va a concentrarse en su proyecto solista, Pluralone (su álbum debut, To Be One With You, salió en noviembre) y en la gira nacional con Pearl Jam que empieza el 18 de marzo.
"Estoy entusiasmado y también un poco paralizado, porque nunca lo hice", dice de su aventura solista. "Tocar solo no es algo que pensaría naturalmente en hacer. No tengo esa actitud de decir, ‘ey, acá estoy yo haciendo todo esto, ¡mírenme!’ Pero me lo tomo como una excelente oportunidad para hacer música en un nuevo contexto; uno de los contextos más locos que puedas imaginar".
Pero antes de mirar al futuro, el miembro más joven del Hall de la Fama del Rock todavía tiene que procesar su repentino divorcio de los Peppers, y los diez años que pasó con con una de las más grandes bandas de rock de las últimas décadas.
Repasemos el día que te dijeron que estabas afuera.
El mensaje de Flea me había llegado el día anterior. Como habíamos hecho una pausa en el trabajo con el nuevo disco, pensé que se contactaba para que retomáramos. Porque habíamos decidido entre todos que íbamos a grabar un disco, y suponía que íbamos a hablar de eso.
Llegué último, ellos ya estaban sentados en el patio. Flea parecía algo frío cuando me abrió la puerta. Fue directo al grano y me dijo: "decidimos pedirle a John que vuelva". Me quedé en silencio un segundo y les respondí: "No me sorprende. Ojalá hubiera podido hacer algo para que no quisieran tomar esta decisión, pero en fin, me pongo contento por ustedes". Estoy contento por John. Me gustaría dejar intactos los sentimientos que tuve en ese momento, básicamente mi enorme amor por ellos. [Pausa] Amo esta banda; y ni por un instante se me cruzó por la cabeza que ese era mi lugar si eso significa dejar afuera a John. Y pasamos momentos maravillosos y ahora me tocaba terminar el viaje. Me aferré al hecho de que tengo verdaderamente un enorme amor y respeto y gratitud por todo lo que me permitieron vivir con ellos todo este tiempo. Entonces, cuando me comunicaron su decisión, pude congelar esas emociones hacia ellos y conservarlas, y no estar un año después, si empezaba a tener problemas de plata, tipo, "¡Culpa de estos malditos!"
¿Podés compartir lo que te dijo Anthony?
Más que nada el que habló fue Flea. Anthony no dijo mucho. Pero pude ver en sus ojos que fue una decisión muy difícil. Y creo que Anthony es una excelente persona, es muy sensible y generoso, me apoyaba mucho. Es muy paternal en algún sentido, y noté que le costaba hacer equilibrio entre su forma usual de ser generoso y apoyarme y la necesidad de tener que cortar. Creo que todo viene de la conexión entre Flea y John.
¿Cómo terminó la reunión?
Estuve ahí poco más de media hora o cuarenta minutos. Les dije: "Mi reacción natural sería levantarme e irme, pero hay algo que me retiene porque es la última vez que estamos los cuatro, y me gustaría que nos quedemos un minuto más todos juntos". Entonces nos dimos un abrazo y nos despedimos. Ni había llegado a casa cuando Chad me mandó un mensaje. Me dijo que estaba desconsolado, porque Chad y yo realmente somos buenos amigos. Y me pasé el día mandando mensajes, porque publicaron un comunicado en Instagram [haciendo pública la salida de Klinghoffer] una hora después [de decírmelo]".
¿Sabías del comunicado?
No sabía nada.
No tuviste ningún rol en la redacción, entonces...
Noooo. No, de ninguna manera. Fue menos de una hora después, y pensé, "guau, qué loco". Fue Flea que lo posteó. Claramente él lo había escrito. Fue una sorpresa total. Y tiene el tono en el que se anuncia una muerte. De alguna manera el comunicado me liberó de tener que decirle algo a la gente, así que me fui al patio de mi casa a tomarme un café y mensajearme con gente sin parar durante las siguientes tres horas. Fue como una muerte, pero ¿cuántas veces te pasa que te morís y salís caminando a vivir el resto de tu vida? Así me quedé: estaba devastado. Fue una tarde de muchos sentimientos, pero estuvo bueno porque realmente me cuesta comunicarme con mis emociones, y creo que fue bueno sentir todo eso, al final.
¿Sabías que John ya estaba en contacto con la banda o te enteraste después de tu salida?
No sabía que John había estado hablando con ellos sobre la posibilidad de volver a sumarse. John se contactó con Anthony [hace un año y medio, más o menos], y se juntaron a comer. Fue una sorpresa saberlo. Y después John se contactó con el manager que se ocupa de las giras. Definitivamente estaba mostrando la cara en el mundo Chili Pepper nuevamente, mandando mails y pidiendo disculpas por su comportamiento previo. Entonces, cada vez que escuchaba algo al respecto, pensaba, "¿en qué anda John, no estará pensando en volver, no?"
Recuerdo que una vez él y Flea fueron juntos a un evento, una pelea de boxeo o algo así, y cuando me enteré de que había fotos de los dos juntos en internet pensé, "¿podrá ser eso? ¿Podrá pasar eso?" Tendría que haber pensado: "ey, John está tratando de volver". Tendría que haberme preparado para lo que se venía, incluso tendría que haberles sacado el tema yo mismo. Pero no la vi venir.
¿Por qué nunca te aproximaste a Flea para decirle, "¿De qué se trata? ¿Tendría que estar preocupado"?
[Pausa.] Porque estábamos tan metidos en el nuevo disco y porque había un cronograma de trabajo. Había un álbum que ya teníamos bastante escrito, más de la mitad, y supongo que bajé la guardia creyendo que estábamos haciendo algo juntos realmente. Si hubiera sido que recién terminábamos una gira y que hacía un mes que no nos veíamos y John entonces viene y dice ‘acá estoy’, sí habría sospechado algo. Habría considerado la posibilidad. Pero realmente estábamos metidos en un trabajo nuevo, de cara al futuro.
Suena como cuando estás saliendo con una chica y te enterás de que fue a comer con el ex.
Sí, totalmente. No me imaginaba que John y Flea estaban pasando tiempo y charlando como deben de haberlo hecho. Porque ese día, cuando me dieron la noticia, dije que no estaba sorprendido y Flea dijo: "Bueno, sabés que estuve juntándome con John... a improvisar". Y entonces le dije: "Flea, no sabía que se estaban juntando a improvisar". Es así como te lo digo.
El núcleo del problema tiene que ver con que John y Flea, siendo adolescentes, crearon un lenguaje musical juntos, y eran muy compañeros. La banda todavía no era tan exitosa. [El guitarrista y fundador de los Peppers] Hillel [Slovak] justo se había muerto. Estaban en otro momento de sus vidas, y pudieron crear un lenguaje y una conexión musical entre ellos que es muy profunda y significativa. Como en una relación, con ese amor que nunca se termina.
¿Entonces es como la vuelta de un ex, efectivamente?
Exactamente. Un ex que siempre iba a estar presente, desde el principio. Para decir la verdad, yo nunca pude ponerme en primer lugar por la simple razón de que la relación musical entre John y Flea estaba de antes y era tan fuerte, yo era su fan y fui testigo de cómo se dio todo, y pude tocar durante años esas canciones que amaba, porque realmente amo lo que John puede hacer con la guitarra. Me habría gustado poder crear algo con ellos que hiciera imposible pensar en volver atrás, y con eso quiero decir crear un lenguaje con Flea como él hizo con John. Lo único que agradezco es que todo esto no pasó hace cinco años, porque me habría destruido.
¿Por qué?
Porque habría confirmado mis peores inseguridades: que soy un fracasado, que apesto tocando la guitarra, que no valgo nada como persona, etc. Habría sucumbido a los pensamientos negativos que nuestro cerebro suele arrojarnos. Pero ahora que ya pasé diez años con ellos, y después de componer tres álbums juntos, tenía cierto espacio de maniobra, como poder pensar que lo que podía hacer efectivamente era limitado, porque yo no soy John. Y estoy muy orgulloso de lo que logré con ellos, musical y personalmente, y con la confianza que me tuvieron cuando llegué para hacer lo que hicimos. Realmente estoy orgulloso. En cambio, si esto pasaba hace cinco años no dudaba en tirarme de un maldito puente.
La ley de los reemplazos en el rock es que siempre van a compararte con tu predecesor.
Cuando me uní a la banda apenas si tocaba la guitarra. No uso redes sociales, pero sé que en internet les encantaba compararme con John, y que siempre decían que realmente no estoy a la altura de él. Lo que pensaba es: muchachos, no entienden nada. De verdad apenas si tocaba la guitarra cuando me uní a la banda, y el mero hecho de que pudiera subirme a la camioneta y hacer todas las cosas que hice con Red Hot Chili Peppers es el mayor logro de mi vida, porque verdaderamente no me consideraba un "guitarrista". Que me compararan con John en primer lugar realmente me daba risa, era algo bueno.
¿Creés que son injustos los fans cuando te comparan con John?
No diría injusto. Es entendible, pero me gustaría que entendieran lo que le aporté a la banda además de lo musical. Esa sensación de que un día era uno de los Chili Peppers pero que todos sentíamos como que nada había cambiado, porque ya había estado allí. Pude crear un lenguaje musical, no como el de John, no el mismo, pero pude crear y ser amigo de todos. Ellos llevaban años juntos. Había conflictos, había muchas emociones en juego. Mi presencia distendía esas tensiones y le permitió a la banda seguir adelante.
Viendo las cosas ahora, ¿te parece que hubo algunos signos de que te iban a echar de la banda que pasaste por alto?
Quizás no signos concretos. Sé que el tema central, de nuevo, es la relación entre la guitarra y el bajo, entre John y Flea. Creo que somos buenos amigos con todos ellos, de una manera muy profunda, y que la relación que tuvimos, considerando que yo soy dieciocho años más joven, realmente fue algo especial. Pero John y Flea, más allá de si se llevan bien o no, tienen esta cosa que crearon en un momento distinto de sus vidas, y no hay forma de que yo pueda crear eso. Cuando llegué y traté de hacer mi papel, era el año 2009. Ellos son distintos. Tienen hijos, y son muy exitosos. El tiempo y la paciencia que necesitás para sentarte y trabajar, es como volver a verte con una ex novia, es diferente.
¿Te tomaste la decisión de modo personal?
No, porque sé que les importo, que me querían como persona. Si me hubieran dicho, "gracias, Josh, fue muy bueno tenerte en la banda, pero vamos a contratar a esta o aquella persona", habría sido diferente. O sea, es John. Es el guitarrista al que adoraba con mi alma. Tuvimos una amistad muy especial, y grabamos juntos y la pasamos bien, y sacábamos canciones de los Beatles, y duró lo que duró. No podría nunca mirar para atrás y ver algo mano. Lo único raro para mí es cómo se dio vuelta la moneda, estabas en un lugar y de repente ya no estás más. Es como que tenés algo y de repente no lo tenés más.
Planeabas quedarte en la banda mucho tiempo más.
Al menos una gira más. Por la sencilla razón de que estábamos trabajando en un nuevo disco. Nunca fui muy bueno con el dinero, acepto que lo que más me gusta es gastarlo, pero esta vez pensaba, "ok, ¿cuánto más va a durar esto? Los muchachos ya están grandes. No es que van a seguir saliendo de gira infinitamente. Ya no lo hacen como antes de hecho. Esta vez voy a ser responsable y a guardarme algo [de plata]". Pensaba todo esto como con la voz de un padre en mi cabeza. Yo en general no pienso así. Soy muy infantil con el dinero, siempre fui así, y al estar en la banda pude permitírmelo. Y fue hermoso. Pero ya me estoy volviendo viejo. Tengo cuarenta, pienso, OK, quizás tenga que ser un poco más responsable. Pero al final, lo que quería era grabar un disco más.
¿Y ahora, después de todo, qué te parecen los dos discos que sacaste con ellos?
No les tengo tanto aprecio. Me gustan las canciones, y creo que escribimos cosas muy buenas juntos, pero soy realmente muy exigente. Rick Rubin había sido el productor [de I’m With You] y la razón por la que no quise trabajar con él por segunda vez [la banda estaba en tratativas con Rubin para que les produjera el nuevo disco] fue porque sentía que ellos cuatro tenían una relación especial y que yo me quedaba afuera. Y estaba ahí tratando de participar y es difícil que tengamos todos la misma voz cuando ellos tienen una relación desde hace más de veinticinco años y yo soy este mocoso de porquería que está en un rincón y dice: "No, no creo que tengamos que hacer eso, probemos esto otro, etc." Es como que nadie iba a escucharme. Iban a escuchar a su amigo, que los conocía, con el que habían trabajado y colaborado exitosamente durante décadas. Y no es que estuviera mal. Tenía sentido, de hecho. Pero estaba tratando de hacer mi arte en este contexto, con las cartas que tenía en la mano. Tengo más canciones escritas, y una pila de ideas por realizar que nadie va a escuchar nunca, porque el tiempo que cada uno tiene es limitado. Por eso la segunda vez [el disco The Getaway] trabajamos con Danger Mouse [el productor Brian Burton]. Brian es buen amigo mío, pero lo principal es que no quería trabajar otra vez con Rick. Brian es fantástico, pero al final es un adicto al trabajo, y del otro lado estaba Flea, que empezó la banda en la secundaria. Entonces, ¿cuál era mi lugar en este triángulo? Nunca pensé que iba a ser fácil pelear por lo que yo quería que el disco fuera, así que el disco terminó por ser un manojo de canciones que me gustaban, pero no necesariamente estaba conforme con el sonido. Así que lo que estaba intentando este último tiempo, antes de mi salida, lo que pensaba que íbamos a hacer es grabar un disco del que iba a estar absolutamente orgulloso.
¿Qué tan avanzado estabas en el trabajo de composición y grabación?
No habíamos pisado el estudio de grabación todavía. Estábamos escribiendo los temas, habíamos empezado a fines de 2018, pero hubo algunos obstáculos. Apenas un mes después de empezar a escribir casi perdemos la casa en la que estábamos trabajando, y todo nuestro equipamiento, debido a ese terrible incendio, pero por suerte fue solo un susto. Trabajamos bastante el año pasado pero con muchas interrupciones también.
¿Creés que van a desechar todo lo que escribieron juntos?
Todo.
¿Y cómo te sentís con eso?
Triste. Me lo tomo muy zen, en el sentido de que al final respeto sus decisiones y estoy feliz por ellos, me pone contento de verdad que vuelvan a estar juntos y que estén trabajando. Me pongo triste, por otro lado, por todas esas canciones que escribí con ellos y que no entraron en I’m With You. Pero es así con Brian: hicimos cuarenta o cincuenta canciones, pero su estilo de producción es que le gusta trabajar cada pieza desde cero, y yo decía: "Ey, pero tenemos todas estas canciones". Entonces agarraba algo que le gustaba. O nos metíamos en el estudio con él y empezábamos de cero. Y era divertido, estaba bien. Pero la magia de los Peppers, y lo que es cada vez más raro, es que se trata de cuatro flacos en una sala tocando y grabando las piezas más o menos en vivo. Y eso es básicamente lo que yo quería hacer. Lo que pasa es que no quería hacerlo con Rick Rubin, porque él me hizo sentir un bicho raro, y porque es el tipo de persona que no tiene la capacidad de hacerte sentir cuidado, o de nutrir y hacer crecer una nueva relación.
¿Cómo pensabas que iba a sonar el álbum?
[Pausa.] Me imaginaba un sonido crudo y enérgico, Chili Peppers puro. Algo en mí quería que sonara como lo hacían en 1986, quizás con un par de baladas más. Básicamente me interesaba que tuviera el sonido que lograron en la gira The Uplift Mofo Party Plan [de 1987/88]. Eso es lo que lamento. Siento... [pausa] como si de alguna manera los discos que efectivamente grabamos mientras estuve en la banda fueran mi responsabilidad, pero la verdad es que pensándolo bien no sé cuánto tuve que ver realmente.
No habías visto a John en diez años, hasta la boda de Flea en octubre. ¿Él se puso en contacto con vos de alguna forma antes de tu salida?
Fui yo que me puse en contacto con él, el día de mi cumpleaños, porque estaba en Brasil y sabía que iba a verlo en la boda, por primera vez en una década, así que le dije: "Ey, John, solo quería que supieras que te quiero, que siempre te consideré un amigo. Sé que nos vamos a cruzar pronto y espero que estés bien". Él me contestó enseguida, pero no pude entender lo que me dijo. A veces la sintaxis de la gente es confusa, cuando tipean en el teléfono, así que nos vimos diecisiete días después, fue un encuentro breve pero bastante cordial. El tema es que el resto de la fiesta, después de saludarlo... fue muy extraño el clima que había. Estoy seguro de que él ya estaba decidido para esa altura, que ya tenía en mente lo que se venía.
¿Tuvieron contacto desde tu salida?
No. No tengo ninguna razón para hablarle. De hecho, si él me hablara, me sorprendería.
Almorzaste con Flea cinco días después de que te comunicaran la decisión. ¿Cómo fue?
Fue lindo. La pasamos bien. Nunca es así cuando alguien se va de una banda, siempre hay drama, trauma, tragedia. Para ellos también debe haber sido difícil dejar afuera a alguien que querían, y toda la buena onda que había. Quizás habría sido más fácil para ellos, incluso, si yo hubiera empezado a pegar puñetazos gritando cuando me dieron la noticia. Es triste todo, y el tono oscuro del posteo de Instagram tiene un significado doble. Por un lado, ¡ey, sí, vuelve John! Pero al mismo tiempo, tipo, realmente la pasamos bien con este pibe durante diez años. Por eso es triste. Por eso es tan raro también.
Suena cliché, pero realmente parece una separación amorosa.
Es que sí, totalmente. La analogía es perfecta, amargamente perfecta. Es como, viste cuando estás saliendo con una chica y la cuidás porque la querés, o te convencés de que la querés, más o menos funciona la rutina, y todo bien. Pero de repente aparece esa ex novia super sexy que se alejó en un momento muy oscuro, pero ahora está mucho mejor. Y con ella tenés otros recuerdos, recuerdos de otros tiempos, de otro volumen de venta de discos para empezar [risas]. Y la verdad que tiene más sentido. Solamente porque tenés la misma edad que tu ex tiene más sentido, te comunicás mejor. Incluso si en dos años se pudre todo otra vez, ya estás acostumbrado, sabés de qué se trata. Así que sí, yo soy esa persona que querés y amás, pero que no estaba ahí en 1988.
Desde afuera, ocupabas un lugar público extraño dentro de la banda, al ser siempre "el tranquilo" en un grupo caracterizado por el tamaño superlativo de la personalidad de sus integrantes.
Un lugar rarísimo. Y si lo miro de afuera, es como que no puedo creer que la vida que llevaba. Un amigo mío lo puso en estos términos: vos por la tuya podés ir a comer una hamburguesa y nadie va a saber quién sos. Y es rarísimo, eso. Es fascinante. Creo que mientras estuve en la banda hicimos cuatro sesiones de fotos en total. No hacíamos mucho de eso. Fue una locura que duró diez años. Después están todas las fotos que te piden. Ni mi madre tiene tantas fotos mías. Así que el hecho de que de repente alguien me pida una foto es sorprendente.
¿Te imaginás en el futuro volviendo a tocar con ellos, sea como miembro pleno o como invitado?
Sí, por supuesto. Los quiero mucho, y siempre me gusta tocar con mis amigos, es lo que más me gusta. Desde los doce años quería tener mi banda. Y durante diez años, un poco ese sueño se cumplió.
¿Algún mensaje para los fans?
Que son lo más grande de lo que significa haber estado en una banda como los Peppers. A veces no los miraba porque me concentraba en lo que ocurre arriba del escenario, con la banda. Y la banda ya tenía fans, así que no tenía que preocuparme mucho de eso. Me ocupaba de ellos tocando. Así que el hecho de tener fans y de que les gustara lo que hacía con la banda es hermoso, y no puedo estar suficientemente agradecido. Para todos los que disfrutaban lo que hacía, para todos los que se preocuparon por mí en todo este proceso, para todos los que no sabían quién era cuando me sumé a la banda, estoy total, totalmente agradecido. Realmente les agradezco el interés que tuvieron por mí, y espero que no se termine, porque no pienso dejar de hacer música.
Por Jason Newman
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