Bomba Estéreo recargado

Sonrientes, amables, colombianísimos, Li Saumet y Simón Mejía saben cómo disfrutar de Buenos Aires. Por caso, comiendo un alfajor Cachafaz, aun con el riesgo de que queden secuelas en la pollera amarilla de la cantante de Santa Marta. Elegancia tropical acaba de salir y tiene como misión expandir aún más las esquirlas de Estalla! , el álbum con el que le mostraron al mundo entero de qué se trataba su fusión de ritmos folklóricos con música electrónica.

En el marco del ciclo Movistar Free Music -shows gratuitos para clientes de la empresa telefónica-, esta noche Bomba Estéreo subirá al escenario del teatro Vorterix para empezar a tocar en suelo porteño su tercer disco. Eso sí, con toda la elegancia del caso.

"Empezamos a componer para el disco en un sitio emblemático del trópico como Barranquilla -cuenta Simón, bajo y sintetizadores-. Es la cuna de la música folklórica, de donde emerge toda la música del Caribe que nos inspira y de donde viene nuestra esencia." Pero Barranquilla no sólo es tradición, sino que también es electrónica, es fiesta; en fin, es Bomba Estéreo, y Elegancia tropical es la definición que mejor le calza a un grupo que llevaba cuatro años girando por el mundo y que a la hora de registrar un nuevo álbum se sumergió tanto en las aguas de sus primeras influencias como en las recogidas en sus viajes.

"El disco se hizo entre viaje y viaje -agrega Simón- y es un resumen de todos estos años de giras y de músicas escuchadas." También es un buen balance entre las letras de Li y la musicalización de Simón; entre el pulso bailable y la experimentación electrónica. "Experimentar siempre fue nuestra premisa -sostiene Li-. Al principio lo hacíamos con los ritmos que teníamos más a mano, y con el tiempo encontramos otros. Creo que hay más electrónica que antes. Eso sí, conservamos los sonidos fuertes colombianos, lo afro, pero les dimos otro enfoque. Siento que es una nueva etapa la que se abre con este disco."

-La experimentación tiene un límite, ¿no? Y es que la esencia de la banda se mantenga.

Simón : -En un momento nos dimos cuenta de que nos estábamos volviendo demasiado experimentales, así que tuvimos que volver un poco para atrás para estar en sincronía con nuestro pasado. Íbamos a firmar con un sello, empezaron a ponernos presión y todo eso hizo que nos replanteáramos las cosas, que bajáramos un poco a tierra y que nos diéramos cuenta de que el sonido de Bomba Estéreo finalmente se identifica con algo y que no se puede ir tangencialmente a lo opuesto.

-Vuelven a sonar como embajadores culturales colombianos. Por las letras, el nombre del disco, el arte de tapa. ¡Por todo!

Simón: -Es lo que nos sale. Buscamos cambiar, variar, pero siempre emerge nuestra esencia.

Li: -Tenemos una cosa muy colombiana y se nota, pero también formamos parte de una cultura mixta. Estamos hechos de Colombia, de Internet, de Inglaterra, de Estados Unidos, de cine, de radio, de música.

-Sos como un demonio de Tasmania, que se mueve de una punta del continente a la otra. En estos últimos años viviste en Córdoba y también en Nueva York.

Li: -Sigo en Nueva York. Viví un cambio emocional, personal y con la banda, como músico y como persona. Conocí culturas distintas y entendí que hay un propósito que va más allá de la fama y del dinero, y es transmitir un mensaje. Esto hizo que llevara las letras a un nivel más interior que exterior. El disco anterior salió con naturalidad, fue una carta de presentación. Expresamos ahí lo que no nos gustaba. Éste, en cambio, tiene un sentido más espiritual. También puedo recordar en dónde escribí cada letra. Algunas pertenecen a mis días en la Argentina; otras, a Colombia, a Brasil...

-Y por qué o por quiénes fueron inspiradas, ¿no?

-¡No! [risas]. Eso no es necesario decirlo, eso queda en el archivo personal...

Como asumidos embajadores culturales de Colombia, Li y Simón -la banda la completan Kike Egurrola en batería y Julián Salazar en guitarras- no sólo responden de música. También la situación política y social de su país aparece en las charlas. "Nosotros no queremos enfrascarnos en estos temas -dice la cantante-. Ya hemos tenido mucha violencia; queremos pasar la página y pensar en el amor y en la música."

-Que hoy mucha gente se interese por la música colombiana tiene que ver con que se haya generado otro contexto social.

Simón : -Sí, cada vez más nos preguntan por las escenas artísticas de Bogotá y Barranquilla y, aunque los problemas del narcotráfico sigan estando en un primer plano, a los ojos del mundo aparecen otros temas.

Li: -En el mundo dejaron de reconocernos por Pablo Escobar y empezaron a relacionarnos con Juanes y Shakira. Después de los artistas mainstream empezaron a emerger los independientes, y en eso estamos.

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