El histórico líder de La Pesada del Rock’n’Roll habla del relanzamiento del material del supergrupo de los 70, del estado del rock nacional y los grupos argentinos que va a producir
Billy Bond, el legendario líder de La Pesada del Rock’n’Roll, ese supergrupo de los 70 que marcó a fuego la historia del rock local con una serie de álbumes y shows incendiarios, bajó nuevamente desde Brasil, país en el que se encuentra radicado desde 1974, como lo viene haciendo periódicamente en los últimos años. El principal objetivo de esta visita fue la realización de una charla abierta, o encuentro con sus fans, denominada “Tomando el té con Billy Bond”, realizada en el Teatro Monteviejo, ubicado frente a lo que fuera el Mercado del Abasto (el nombre resultó literal, hubo té y galletitas para todos). Allí, frente a unas 200 personas que agotaron las localidades, demostró lucidez, buena memoria e histrionismo en una performance a medio camino entre la charla abierta y el stand up. Desechando la posibilidad del escenario, Billy se ubicó en medio de las mesas, paseándose entre el público, contestando las preguntas con su sinceridad acostumbrada, y cediendo ocasionalmente la palabra a gente que había convocado especialmente para la ocasión, quienes contribuyeron a reconstituir esa especie de “historia paralela” al relato oficial del rock argentino, que el cantante viene sosteniendo desde hace años en su página de Facebook. Entre los presentes estuvieron Carlos Villalba , uno de los dueños originales de La Cueva, Pedro Pujó, fundador de Mandioca con Jorge Alvarez, Juan Carlos Kreimer, periodista fundacional del rock argentino, Cacho Valdez y Héctor Starc, músicos de la primera hora, y el histórico empresario discográfico Pelo Aprile.
En la ocasión, Billy demostró el mismo talento para construir equipos y repartir el juego que había exhibido durante las épocas de La Pesada, un colectivo integrado por los mejores músicos de la época. Y como broche de oro, volvió a cantar en Argentina, después de más de 40 años de ausencia. El tema elegido fue “La Marcha de San Lorenzo”, en la versión de La Pesada, entonada junto a todos los presentes, con el acompañamiento de este cronista en guitarra, y músicos de las bandas Gualicho Turbio y Las Bodas Químicas, que fueron las elegidas por “el Bondo” - junto a un jurado integrado por músicos y periodistas -, para reincidir en su trabajo como productor.
Minutos antes del evento, Bond habló en exclusiva para RS, revelando algunas de las novedades que lo tendrán ocupado durante los próximos meses.
Uno de los motivos de esta visita fue revelar el ganador de la convocatoria de bandas emergentes para que les produzcas un disco.
Hace más de un año hicimos una especie de concurso buscando bandas nuevas. Porque creo que el rock and roll tiene un poco de olor a naftalina, y hay que darle sangre nueva. Realizamos una especie de convocatoria, en la cual escuchamos más de 1200 bandas. Entre ellas elegimos, junto con el jurado, dos bandas bien diferentes.
¿Por qué eligieron dos bandas? ¿no se decidían?
Es eso, no había cómo dejar una de ellas afuera. Estaban buenísimas las dos, pero básicamente se trata de que tienen dos sonoridades y dos actitudes bien diferentes. Pero tanto a una como a la otra le faltan algunas cosas, y ese es el trabajo de alguien que sea productor discográfico. Que tenga una visión de afuera, y les aporte lo que le faltan. Para hacerla corta, esas bandas son Las Bodas Químicas y Gualicho Turbio.
Son de lo mejor que hay en el under.
Sí, una es muy afinada, tiene mucho punch, tocan un rock and roll más a la antigua, en la onda de Pappo, La Pesada y todo eso, pero con unos toques muy modernos y personales, sobre todo el guitarrista (José Lavallén Iglesias). Y también me gusta que van cambiando, no son lineales, pero sin perder polenta, el baterista tiene mucha fuerza. Las letras son interesantes, algo metafóricas. Esos son Las Bodas Químicas. La otra banda, que es Gualicho, son totalmente anárquicos, obviamente brutos, terriblemente agresivos, y muy diferentes a todo lo que escuché. Me parece que produciéndolos, pueden ser por lo menos una cosa distinta a todo lo que está sonando. Y si hacemos un análisis de que el mercado tiene que renovarse, creo que estas dos bandas pueden renovar algo. No te digo que van a cambiar la vida de la gente, pero...
Además, muestran una actitud y un conocimiento de la historia y la cultura rock.
Es exactamente eso, esas palabras tuyas las tomo como mías. También tengo otro proyecto, independientemente de los discos de cada una de estas bandas, que es juntarlas en un estudio, y hacer un proyecto colectivo, un poco a la manera de La Pesada. Vamos a ver qué sale.
"Voy a conseguir que todos los vinilos de La Pesada, de los que yo tengo los derechos, salgan con un sonido controlado, que tengan la calidad que se merecen", dice Billy Bond.
¿Se viene una reedición de los discos de La Pesada, descatalogados durante décadas?
Voy a conseguir que todos los vinilos de La Pesada, de los que yo tengo los derechos, salgan con un sonido controlado, que tengan la calidad que se merecen. Porque está Pelo Aprile en la jugada, y él es uno de los profesionales más potentes y que saben de este negocio, y no van a entregar un producto mal hecho. Porque normalmente los discos en vinilo que están reeditando tienen un sonido de mierda, y voy a intentar que no me pase.
Te referís a los discos de La Pesada que pertenecían al catálogo Music-Hall, recuperado por la acción del INAMU.
Sí, sólo los discos míos (se refiere a los cuatro volúmenes de Billy Bond y La Pesada), no los discos que produje de los integrantes de La Pesada como solistas.
¿Pensás editar tu material como solista anterior a la Pesada, que estaba también en Music-Hall?
Todavía no lo sé, lo voy a discutir con Pelo, lo voy a apretar (risas).
En ese momento, Billy lo llama a Pelo Aprile para que se incorpore a la charla. El veterano productor revela que Bond lo había llamado la noche anterior, y que el acuerdo fue con una palabra: “Hagámoslo”.
¿La Pesada también va a formar parte la Banda de Sonido de una película?
Luis Ortega, un director de cine joven que es uno de los hijos de Palito, está haciendo una nueva película que se llama “El Angel”, que habla de la vida de un asesino muy famoso llamado Robledo Puch, y va a incluir en la banda de sonido cuatro canciones de La Pesada. Son todos temas del primer LP de La Pesada, en su versión original. Yo le dije, “¡no me pongas, porque sino me van a echar la culpa a mí, de que éste mató diez tipos!”. Ya estuve con Ortega en la edición, y seguramente voy a venir para el estreno.
Tengo entendido que también hay un proyecto de un libro con tu historia.
Si, es junto a Juan Carlos Kreimer, uno de los primeros periodistas del rock argentino, y otro chico más. Va a ser un libro divertido, algo experimental. Se me ocurre que la mayoría de los libros que salen sobre música, y lo digo con todo respeto, es algo así como “tomá, escribí un libro”. Me da la sensación de que no hay un cariño, o una cosa especial que lo convierta en algo atractivo.
¿Algún proyecto discográfico como solista?
Por el momento no. Pero ayer me junté con Charly y estuvimos hablando tres horas y media, y por supuesto ya estábamos haciendo un disco. Cuando te ponés a delirar con los viejos amigos...
Como el disco de Billy Bond and the Jets, que se hizo en pocas horas...
Lo hice en las horas que me sobraban de estudio de Charly, cuando estábamos grabando el primer disco de Seru Giran. Porque Charly no venía, o llegaba tarde, y estábamos en el estudio con los chicos, David Lebón, Moro... así salió.