Ángel Mahler: De una orquesta nacida en la crisis de 2001 a las grandes películas de Paramount, la música de Queen y un nuevo musical
El 1° de abril estrena un nuevo proyecto que repasa grandes películas con música en vivo: El Padrino, Forrest Gump, Los intocables, Misión imposible, Star Trek, Top Gun, Grease, Rocketman, Footlose, Fiebre de sábado por la noche, Sobreviviendo y Transformers, entre otras
- 6 minutos de lectura'
Los músicos no fueron excepción durante la crisis de 2001. Ese año, Ángel Mahler, compositor de exitosos musicales como Drácula, propuso a los músicos que lo acompañaban en ese tipo de proyectos, crear una orquesta para eventos. Necesitaban trabajar. Esa orquesta, la B.A. Pops –aunque no con la misma formación de aquellos años– es la que, el 1° de abril, subirá al escenario del Luna Park para recorrer la música de películas famosas, como El Padrino, Forrest Gump, Los intocables, Misión imposible, Star Trek, Top Gun, Grease, Rocketman, Footlose, Fiebre de sábado por la noche, Sobreviviendo y Transformers, entre otras.
“La B.A. Pops se llama así en homenaje a John Williams y a la Boston Pops, haciendo música de películas. Lo que Williams hizo fue impresionante. Y hoy nuestra apuesta tiene otra relevancia. Me gusta que eso suceda. Yo aposté al compositor, no a ser intérprete. Pero estas músicas son tan definitorias para las películas que no podemos imaginarlas sin sus temas. Adquirieron una notoriedad increíble y, por eso, admiro tanto a sus compositores –dice Mahler–. Tocar la música de Star Trek o de Indiana Jones requiere precisión y virtuosismo. Tienen la complejidad de una obra clásica. No lo digo para quedar bien sino porque han sido excelentes compositores. Alan Silvestri, James Horner, Jerry Goldsmith y Danny Elfman. Son los compositores clásicos del 1700 y 1800. Los formatos cambian. Y aunque sea algo, entre comillas, quizá más comercial, son importantes para la gente. Podés recordar la música de Forest Gump sin recordar exactamente qué pasaba en la escena.
–En este caso sí se van a ver las secuencias, aunque habrá adaptaciones.
–Es una sucesión de películas de Paramount. Comienzo en 1956, con Los diez mandamientos, la de Charlton Heston y Yul Brynner. Habrá fragmentos de películas y fotos. Lo armamos especialmente.
–¿Fue una idea tuya?
–Quería hacer El Padrino I, porque cumplía 50 años. Uno tiene muy presente la música, pero al volver a ver la película me di cuenta de que duraba casi tres horas y de música tenés menos de una hora. Pensé que sería aburrido como espectáculo, sin escuchar a la orquesta, durante dos horas. Muchas veces hice espectáculos con músicas de películas. Pero nunca con las imágenes.
–Porque no es fácil tener los derechos a menos que se trate de una coproducción.
–Sí. Fue una idea que le llevé a Paramount, hace dos años. Hice la propuesta y cuando me daba por vencido, recibía la respuesta por mail. Hicimos un montón de eventos, pero nunca con imágenes originales.
–¿Qué tanta mano metiste en las partituras?
–Se va a escuchar la música original. Solo tuve que hacer arreglos que, espero, queden lindos. Espero el juicio de la gente.
–En 2001 armaste una orquesta para diferentes fines, entre ellos la pantalla grande. En todo este tiempo, aparecieron muchos proyectos dedicados a musicalizar películas, o recrear bandas sonoras. ¿A qué se debe esa tendencia y la respuesta del público?
–Bueno, de hecho, quedan muy pocas entradas disponibles y estoy pensando agregar una función, quizás a fin de año. El nacimiento de la orquesta fue exclusivamente por necesidad. Era 2001. Todo el país lo pasó mal. Los músicos, obviamente, también. La muerte de Tito Lectoure (dueño del Luna Park), que falleció en 2002, tampoco nos daba la posibilidad de hacer ese tipo de producciones grandes como Drácula. Esta orquesta nació por la búsqueda de subsistencia. En aquel momento no había una tendencia de hacer música de películas. Recién en 2007 viajé con Damián (su hijo, también músico y director) y Emanuel, mi otro hijo, que también es músico, para ver a John Williams en el MET, con la Filarmónica de Nueva York. Estaba en un momento genial. Y eso me aseguró el camino de hacer esta música de películas. En 2015 vi Jurassic Park en el Royal Albert Hall, con una orquesta de Europa del Este que no me gustó como sonaba. Pero justamente creo que tiene que ver con la exigencia y la complejidad de la partitura y con la revalorización. Si uno escucha la música de Harry Potter es una genialidad, y tiene una dificultad tremenda. Hay una revalorización de la música de películas.
–¿Hasta qué punto el público va por el entretenimiento? ¿Hay gente que va por el detalle de la partitura?
–Yo no hago estos espectáculos para los músicos sino para el gran público. La fórmula más genial es ofrecer un espectáculo que sea popular y de la más alta calidad. Es la única que concibo. Aun pensando en Drácula, como ejemplo de musical exitoso, yo no escribí la partitura pensando que fuera algo fácil de tocar. Escribí lo que sentí que tenía que escribir. Y si el corno tiene que tocar su última nota, un Fa, veremos la manera como llega a esa nota. Lo popular se bastardea, se lo considera de baja calidad. ¿Cuántas óperas escribió Verdi? Y Verdi era popular y excelente. También hay música para entretener, porque no vas a ir a un cumpleaños de 15 a escuchar un réquiem. Creo que eso está en otro rubro, que es el entretenimiento.
–¿Cómo se lleva la orquesta con los instrumentos digitales?
–Tenemos una orquesta de 52 músicos. Y estuve haciendo innovaciones. Trabajamos con octapads o wavedrums. Estamos contentos con ese aire nuevo que le vamos a dar. Y tenemos synthes porque creo que es un instrumento más. No lo uso para representar a la cuerda. Trato siempre de que la partitura sea interesante. No hay nada peor que un músico aburrido tocando notas largas. La utilización de los teclados es para crear climas. Sirven para que la orquesta se llene de otros sonidos. Bueno, yo soy de la época del Minimoog. Lo tengo desde los 17. Aunque ahora no lo uso.
–¿Cómo equilibrás el trabajo de compositor con este revisionismo de la música para cine o el espectáculo con música de Queen, por el que ganaste un Premio Estrella de Mar como Mejor Show Tributo, en Mar del Plata?
–Cuando comencé a estudiar piano con Edda María Sangrígoli le dije que quería, en cinco años, poder llegar a tocar el Concierto Emperador de Beethoven. Pero en medio de ese proceso, que fue muy rico, me di cuenta de que no soy un intérprete. Creo que cada cual en su rubro encuentra dónde ser feliz y de qué modo hacer feliz a la gente. En definitiva, es eso. Y también creo que hay etapas, instantes. En este momento quiero hacer esto. En 2024 quiero hacerme el tiempo para un nuevo musical, El conde de Montecristo, tecnológicamente como algo avanzado, con cine y teatro a la vez. Ahora estoy en ese proceso de definir cómo contar la historia. Lo voy a comenzar luego de este proyecto con Paramount. Paramount in concert recién nace. Creo que hay muy buen material. Muy buenas películas. Esta es una primera experiencia para aprender y crecer. Para que todos vean y confíen en este producto. Creo que será el primero de muchos conciertos. Lo que inspira es la buena música.
Para agendar
Paramount in concert
Con la dirección de Ángel Mahler
Sábado, a las 21, en el Luna Park, Bouchard y Corrientes. Entradas por Ticketek.
Otras noticias de Ángel Mahler
Más leídas de Espectáculos
En Nueva York. Mafalda, invitada especial en la gala de los Emmy Internacional, cumplirá uno de sus grandes sueños
“Eternamente agradecido”. Gastón Pauls reveló el rol que cumplió Marcela Kloosterboer en su recuperación de las adicciones
Elogios, abrazos y un “piquito”. El celebrado reencuentro de Leonardo DiCaprio y Kate Winslet, a 27 años del estreno de Titanic
Estalló todo. La reacción de la ex de Franco Colapinto tras las imágenes del piloto con la China Suárez