Acusado de sexista, el presidente de los Grammy dejará su puesto
Neil Portnow, presidente y CEO de la Recording Academy que otorga los prestigiosos premios Grammy , informó que abandonará su cargo el año próximo. Si bien el directivo no brindó el motivo que lo condujo a tomar la decisión, sí emitió un comunicado vinculado a su retiro de la academia que preside desde hace 16 años. "Cuando tuve el honor de ser elegido para liderar esta gran organización en 2002, juré que bajo mi mirada, y por primera vez en nuestra historia, íbamos a tener una transición bien organizada y profunda. Con poco menos de un año de mi contrato vigente, decidí que era apropiado cumplir esa promesa", escribió.
El timing de su alejamiento, sin embargo, es llamativo. En enero de este año, luego de la entrega de los Grammy, Portnow había expresado que para que las mujeres tengan más representación en el mundo de la música debían intensificar su trabajo. Como consecuencia, un grupo de ejecutivas de discográficas solicitó su renuncia, calificando sus comentarios como "espectacularmente incorrectos" y "ajenos al vasto cuerpo de trabajo creado por y con mujeres". Por otro lado, artistas como Pink también se manifestaron en contra del presidente. "Las mujeres en la industria musical no tienen que dar un paso adelante, las mujeres han estado avanzando desde el principio de los tiempos", subrayó Alicia Moore.
La falta de representación femenina en los Grammy fue tema de debate este año, dado que Lorde fue la única mujer nominada en la categoría de mejor disco del año. No solo no obtuvo el premio, sino que en la previa a la ceremonia se dio a conocer que no subiría a cantar en las mismas condiciones que sus compañeros de categoría: los organizadores le ofrecieron hacerlo acompañada de otro músico y no sola, como era su deseo. "De las 899 personas nominadas en las últimas seis ediciones de los Premios Grammy, 9 por ciento eran mujeres", escribió la madre de la artista en su cuenta de Twitter.
"Aprecio que el tema del sesgo de género debe ser abordado en nuestra industria, y compartimos la urgencia de atacarlo de frente. Nosotros, como organización, y yo como su líder, nos comprometemos a hacerlo", había respondido Portnow a la ola de comentarios negativos, meses antes de tomar la decisión de dar un paso al costado.