Abel Fleury, el poeta de la guitarra
Hace 100 años nacía en Dolores, provincia de Buenos Aires, Abel Fleury, el compositor y guitarrista criollo que fue el primer embajador de la música pampeana en el mundo.
Este músico autodidacto -sólo tomó unas pocas lecciones con Honorio Sicardi- formó parte del grupo de artistas que impulsaron la llegada del folklore nacional a la cartelera de espectáculos porteña, a partir de la década del 30.
Tanto a través de las populares audiciones radiales como en el cine (fue uno de los autores de la música de "Santos Vega", de Luis Moglia Barth, y participó en "Joven, viuda y estanciera", de Luis Bayón Herrera), Fleury ocupó un lugar destacado en la vida musical porteña. Y lo hizo con la interpretación de estilos pampeanos y milongas sureñas -muchas de ellas de su propia autoría-, así como por medio de transcripciones para su instrumento de obras de diferentes compositores clásicos.
Fleury, fallecido en 1958, dejó un repertorio de obras para guitarra sola, no muy extenso, pero que ha servido de referencia para varias generaciones de intérpretes de extracción clásica y músicos populares.
Elogiado por artistas como Andrés Segovia, Fleury realizó varias giras por el exterior, la más extensa de las cuales fue por España, durante todo 1952.