Mena Suvari: "Es un honor ser considerada una sex symbol"
En diálogo exclusivo con LA NACION, la actriz anticipa cómo será la cuarta entrega de American Pie y se confiesa: "Me siento muy afortunada por la carrera que hice"
Tenía la boca muy roja, los ojos muy azules, la piel muy blanca y el pelo muy rubio. Cientos de pétalos de rosas a tono con los labios caían a borbotones sobre su cuerpo desnudo, desde el techo o el cielo, o vaya a saber de dónde, y salían de su boca, como caramelos que invitaban a probar, acariciar y oler. La imagen que no podía dejar de evocar en sus fantasías sexuales Kevin Spacey en la multipremiada película Belleza Americana, tiene como protagonista a Mena Suvari, y quedó marcada a fuego en las retinas de todo el que la vio.
"Esa película superó todas mis expectativas. Como actriz, definitivamente marcó mi destino", dice en diálogo con LA NACION la blonda ex lolita, doce años después de ese despegue meteórico.
Cuando quedó seleccionada para ese promisorio papel tenía 20 años y hacía seis que un ojo avizor le había recomendado probar suerte frente a las cámaras. Así fue que llegó a Hollywood desde Newport en 1995 y se embarcó en el mundo de los castings. Participó en diversas series televisivas y en algunas películas de poca repercusión. La noche de Año Nuevo de 1998 la sorprendió desprevenida. Sin darse cuenta había concluido el rodaje como protagonista de tres películas y no imaginaba la repercusión que tendrían no bien fueron estrenadas en 1999: American Pie, American Virgin y Belleza Americana.
"Siento que soy muy afortunada por las oportunidades que tuve", reconoce Mena, haciendo un repaso por su carrera desde entonces hasta hoy, con 33 películas en su haber y cuatro que piden pista para el 2012. "Me siento muy feliz de poder seguir haciendo lo que me gusta después de tantos años. Cuando hice Belleza Americana, no pensé que iban a seguir llamándome para producciones tan diferentes entre sí", comenta. El fantasma del encasillamiento rondó por su cabeza desde el principio pero buscó sobreponerse y demostrar su talento: "En Hollywood es muy común que te etiqueten como la sexy o la linda. Perfectamente me podía pasar, pero me ocupé de trabajar siempre mis personajes y hacer cosas que sean un desafío para mí, que me hagan crecer como profesional".
Luego de aquel desnudo casi infantil (Mena encarnaba a una adolescente), vinieron muchos otros. Las escenas subidas de tono son casi una marca registrada de la actriz que fue considerada una sex symbol desde esa tierna edad hasta sus más maduros 32. Sin embargo, cada vez que tiene que responder por esas escenas "jugadas", la actriz lo hace sin pudor y con total naturalidad. Sonríe y, seductora, alimenta fantasías: "No sólo me beso con una mujer, pasan muchas cosas más", supo contar sobre su personaje en la serie Six Feet Under, donde tuvo una participación especial en 2004.
Por estos días no le teme al paso del tiempo y asegura que tampoco tiene obsesión con su figura. "Simplemente lo disfruto mucho. Me halaga profundamente que me consideren una sex symbol, y poder seguir manteniendo esta imagen a pesar de los años. Me siento muy honrada. Además, la gente es muy cálida conmigo", dijo en una comunicación vía Skype con este medio desde México, donde se encuentra promocionando el ron Captain Morgan, junto al actor que interpreta al piratezco capitán. Tiene un vestido floreado sesentoso, con escote pronunciado y un nuevo corte de pelo, hasta los hombros con un flequillo recto que la hace ver más adolescente que nunca. Dijo que pasaría unos días en las paradisíacas playas caribeñas del país azteca antes de regresar a Los Angeles, donde la espera su flamante marido Simone Sestito, un productor musical que la conquistó luego de finalizado su conflictivo primer matrimonio con el fotógrafo Robert Brinkmann. La boda se realizó el año pasado en Roma, con toda la pompa y hoy sigue tan enamorada como cuando dio el sí: "Ha sido un año maravilloso. Me siento afortunada por tener a un hombre tan increíble a mi lado. Me siento muy bien con mi vida y estoy feliz", dice con ese brillo típico en los ojos.
La reunión más esperada
El 2012 promete ser para Mena como aquel 1999 que la catapultó a la fama internacional. Es que estrenará cuatro películas, entre las que se destaca con creces American reunion, la cuarta entrega de la saga que la instaló en el mundo de las comedias juveniles. Aunque las primeras tres no gozaron de buena crítica ni cosecharon premios, la taquilla ardió y los fans se multiplicaron a lo largo de los años. Hoy, American Pie , al menos la primera, es un clásico para los adolescentes que esperan ansiosos ver esta especie de epílogo de la historia de Jim, Kevin, Oz, Finch y el tan inolvidable como insoportable Stiffler.
"Fue increíble para nosotros encontrarnos después de tanto tiempo. Nos divertimos mucho y estábamos muy apasionados por volver a hacerlo. Espero que los fans lo disfruten tanto como nosotros", dijo Mena y anticipó: "La historia se concentra en los recuerdos de lo ocurrido en la primera película, el reencuentro por los diez años de egreso y en cómo pasó el tiempo para cada uno de ellos. Para Heather (su personaje) es muy fuerte, porque estuvo muy concentrada en su carrera. Vuelve a su casa y está muy contenta de volver a enamorarse. Pero tienen que verla para saber más", concluyó dejando abierta la expectativa.
Conmovida aún por el regreso a ese primer amor, evoca el suceso de hace 12 años como si fuera ayer: "Es un sentimiento hermoso el de volver a ese éxito que fue tan especial para nosotros. En este tiempo me encontré con muchísima gente que ama American pie y que ama a sus personajes. Ser parte de eso es muy especial. Creo que era el momento perfecto para hacerlo".
Con esos fans a los que embrujó con su mirada de femme fatal en Belleza Americana y de ingenua virgen en American Pie , se mantiene en contacto vía Twitter, donde la siguen más de 32 mil personas. "No estoy en este medio en búsqueda de fama. Así que es maravilloso tener tanta gente apoyándome en todo lo que hago sin habérmelo propuesto", concluye.