Los recomendados de la redacción
Cine
Desde Venezuela
Festival de Cine Venezolano Hoyts Abasto, desde el jueves
Después de convocar a 1500 espectadores en su edición inaugural del 2015, vuelve el Festival de Cine Venezolano, que se desarrollará esta vez en las salas del Hoyts Abasto, entre el jueves y el miércoles 9. Según anticipa, el festival propone novedades seleccionadas entre la más reciente producción fílmica, las cuales comprenden realizaciones de una nueva generación de cineastas que ya han llamado la atención y recogido distinciones diversas en festivales internacionales, entre ellos el más antiguo, el de Venecia. Allí, Desde allá, opera prima de Lorenzo Vigas, se convirtió en el primer film venezolano que intervino en la prestigiosa mostra y terminó mereciendo su premio mayor, el León de Oro, logro nada fácil de alcanzar en una competencia de la que participaban nombres del calibre de Vladimir Sokurov, Amos Gitai y Jerzy Skolimowski. Con semejantes antecedentes se comprende que los organizadores hayan elegido ese título para inaugurar la muestra. ¿Qué es Desde allá? Según alguna crítica, gira en torno de la turbulenta relación entre un ensimismado dentista homosexual de mediana edad y un pandillero. Según otros, que la relación entre los dos personajes no alcance a definirse del todo y permanezca alejada de los moldes prefabricados es uno de los grandes aciertos del film. Lo que no se duda es que el cine de Venezuela aspira a mostrarnos su actual diversidad. Fernando López
Clásica
Saltar sobre las fronteras
Inchausti - Peluso Nacional Clásica
El martes, a las 20.
Sala Argentina del CCK, Sarmiento 151.
Este mes se cumplen 80 años desde que la Columbia Broadcasting System apareció en vivo con sus conciertos de la Filarmónica de Nueva York. Todavía se comenta la antológica respuesta del público que entonces convirtió las emisiones de aire junto a los receptores en imperdibles actos musicales. La gente tenía la seguridad de que podía escuchar lo mejor, porque contaba con el respaldo de una radio. Es que durante las 24 horas del día, una radio, primero elige y luego desarrolla sus programas. Elegir es su código y su garantía. Como se sabe, desde hace años Radio Nacional Clásica hace estas salidas al natural en sus estudios de la calle Maipú. Pero ahora, como sucederá el martes, en el CCK, saltará sobre sus fronteras. Para ello, eligió a Xavier Inchausti, el ya varias veces celebrado brillante violinista por su labor solística, reciente ganador del concurso internacional que lo ubicó como concertino de la Sinfónica Nacional. Y a Paula Peluso, una de las pianistas de más depurada raza camarística argentina. Este rutilante dúo, tocará la Sonata Nº 7 opus 30-2, para violín y piano, de Beethoven, que rompe moldes con sus tan singulares cuatro movimientos, su enérgico comienzo y su cánon final. Y la Sonata para violín y piano en Mi mayor, op. 18, un desahogo sentimental cargado de inesperado lirismo de Richard Strauss. Jorge Aráoz Badí
Teatro
Profundidad y carcajadas
La sufridera
Dirigida por Ariel Osiris
Viernes, a las 23.
Teatro Del Artefacto, Sarandí 760
Claudio Gotbeter es de esa camada de autores y directores que fueron más mimados y comprendidos en el exterior que en su propio país. Exquisito y con un estilo único, desarrolla su carrera principalmente en Europa (en países como Alemania, Francia, Italia o Polonia lo adoran). Como dramaturgo impone un particular estilo en el que, a través del humor, escarba en la naturaleza humana. Pone el acento en la interpretación y el histrionismo de los actores. Es más, uno piensa que cuando Gotbeter escribe una obra, seguramente debe pensar en la figura física del actor que podría interpretar a cada personaje. Esta vez una de sus mejores creaciones, La sufridera, es abordada por otro director: Ariel Osiris. A Gotbeter le suele gustar desnudar los aspectos más ocultos de las personas y se regodea en ellos. La paranoia, el pánico, el sadismo y, sobre todo, la estupidez son las características que encarnan sus criaturas, envueltas en un halo tan patético como compasivo. Juega con la reiteración, con lo repentino, con conversaciones circulares y unos silencios que horadan la pieza y le van dando mayor profundidad. Porque en esa atmósfera que recuerda tanto los años del under porteño con epicentro en el Parakultural hay un absurdo reflexivo que se esconde debajo de esa cáscara caricaturesca. Tiene una exquisita capacidad para decir cosas profundas y arrancar carcajadas. Pablo Gorlero
Televisión
Senderos que se bifurcan
11.22.63
Basa en una novela de S. King
Desde pasado mañana, por AMC.
Todos los martes, a las 22.
El primer atractivo que tiene la novela 11.22.63, de Stephen King, es el episodio que sirve de base a su trama. Se trata del asesinato de John Fitzgerald Kennedy, uno de los hechos del siglo XX que más conmovieron al mundo. Equiparable probablemente a lo que ocurrió con el atentado a las Torres Gemelas. El segundo atractivo de esta obra es la fantasía que imaginó King para tejer esa trama que excede a lo que pasó en Dallas aquella tarde del 22 de noviembre de 1963. El relato retrata cómo eran los Estados Unidos y el mundo en aquellos años y ensaya una suerte de pronóstico acerca de lo que hubiera podido pasar si el magnicidio no sucedía. Lo que inventa la narración -usando la idea de la posibilidad de infinitos universos paralelos- es lo que le pasa a un profesor universitario en Norteamérica a quien un amigo le lega en su lecho de muerte una misión que no puede rechazar. Jake Epping debe meterse en una especie de sótano que lo lleva por un efecto misterioso a una fecha cercana a la que mataron a Kennedy. Algo que él podría evitar. Pero el viaje tiene consecuencias. Una de ellas es que cada cosa que se haga en aquel pasado cambia la historia de allí en más. Con esto, en el libro se abren y exploran una serie apasionante de posibilidades. Algo que por suerte, la serie, que produce J.J. Abrams, respeta bastante bien. Ricardo Marín
Música
El gaditano y sus historias
Javier Ruibal presenta Quédate conmigo
El viernes, a las 20.30, y el domingo, a las 19.
Usina del Arte, Caffarena 1.
Javier Ruibal sacó pasaje para Sudamérica. Quiere volver a cantar para el público argentino. Arregló una gira que también tiene fechas en el Uruguay. Aquí se lo podrá ver y escuchar recién el viernes y el domingo, en la Usina del Arte. Porque anda de festejo tiene como as en la manga un álbum registrado en vivo a propósito de sus 35 años con la música. Pero no es ese el motivo principal de esta nueva visita. Su último recital en la Argentina fue hace cuatro años; su último disco de estudio es de hace tres. Se quiere dar el gusto de que también suenen por aquí esas canciones. Y la verdad que valen la pena. Mientras que otros músicos luego de tres décadas de carrera dan vueltas sobre su propio eje cada vez que sacan un nuevo disco, este músico gaditano tiene cosas para decir. Tiene nuevas historias para compartir. Algunas un poco lineales y explícitas, otras sutiles, con el fino trazo de su escritura. Su disco Quédate conmigo tiene historias de amor y también de las otras, de las que cuentan problemas sociales que pueden retratar situaciones similares en dos puntos del planetas muy lejanos entre sí, y además hay historias de infancia y de cine, de hechos muy cotidianos. Siempre con sello sonoro de Ruibal, una mixtura capaz de hacer convivir al flamenco con la declamación del rap, sin contradicciones. Mauro Apicella
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