Las mejores y peores películas de Charlize Theron

Charlize Theron indudablemente ingresa en la categoría de actrices que cuentan con un enorme potencial no del todo desarrollado. Hay películas para las que se transforma completamente con increíbles resultados (ver nuestra primera mención en el podio de lo mejor) y otras en las cuales actúa con cierto desgano y casi en piloto automático (Hancock, Prometeo y un largo etcétera). Aquí abajo repasamos su filmografía, una que está caracterizada por esos desniveles, y esperamos más aportes en los comentarios:

*TRES BUENAS:

*1. MONSTER (2003, Patty Jenkins)

• En diversas ocasiones hemos discutido acerca de cómo una transformación física para un determinado personaje no necesariamente equivale a una gran actuación. Tomemos como ejemplo a Jamie Foxx en Ray quien, si bien supo cómo incorporar todo el rango gestual de Ray Charles, no logró dotar a su interpretación de un componente emocional que anule el manierismo. El caso contrario es lo que hace Charlize Theron en Monster, esa película que revelaba el ojo agudo que tiene Patty Jenkins para meterse en la psiquis femenina (ahora se encuentra trabajando en Wonder Woman, a estrenarse en 2017) y para la cual la actriz se entregó por completo. Y por entregarse no solo estamos aludiendo a su cambio físico sino también al modo en el que muestra dos facetas de Aileen Wournos. Por un lado, Theron transmite la violencia desatada con ese caminar rabioso y esa mirada en constante estado de alerta. Por el otro, sabe cuándo virar su actuación hacia el lado más empático, aquel que se refleja en las escenas con Christina Ricci, las cuales dota de una admirable sensación de comodidad e intimidad. Por esta feroz interpretación, Theron obtuvo el merecido Oscar, y su actuación permanece hasta hoy como una de las mejores de todas las que premió la Academia de Hollywood.

*2. YOUNG ADULT (2011, Jason Reitman)

• En la reciente película de Seth MacFarlane, A Millon Ways to Die in The West, Charlize reconfirmaba que además de tener talento para interpretaciones más densas y viscerales, también puede lucirse en el género cómico. Una enorme actuación que ilustra este hecho es la que dio para Young Adult, el último gran acierto de Jason Reitman antes de ponerse ceremonioso con Aires de esperanza y con la paupérrima Men, Women and Children, con un perfecto guión de Diablo Cody que está a la altura del de Juno. En esta sátira sobre "el síndrome Peter Pan", ella compone a Mavis Gary, una mujer que nos genera rechazo durante todo su trayecto narrativo, y que va desde la soberbia hasta el patetismo de manera continua. Mavis, una escritora fantasma de novelas young adult (todo un símbolo de su propia conducta), está convencida de que el amor de su vida es un novio de la adolescencia y, para recuperar su afecto, va a visitarlo sorpresivamente a Minnesota, donde altera la vida familiar de ese hombre que ya pareció dejarla atrás. Theron aprehende a la perfección las palabras de Cody y brinda una interpretación mordaz, con una mezcla de ironía y melancolía propias de esta mujer cuyo ego es tan grande que cree que la vida de los demás no es más que un mero ensayo para el mundo real, uno del que se siente parte y del que en realidad está completamente excluida.

*3. TIERRA FRÍA (2005, Niki Caro)

• Tierra fría no es precisamente la película más sutil o inventiva de la neozelandesa Niki Caro y en muchas ocasiones bordea el estilo de "historia real llevada a la televisión" debido a su tendencia a filmar según los dictámenes del manual de las biopics, alejándose de cualquier impronta autoral y cayendo en los lugares seguros para causar impacto. De todas maneras, si hay algo que distancia al film de otros tantos basados en sucesos reales son las grandes actuaciones de todo el elenco, además de la de Theron. Frances McDormand se toma con bienvenido sarcasmo al personaje más conmovedor del film dotándolo así de una dignidad admirable; Jeremy Renner ya despuntaba como una presencia cinematográfica magnética; y Richard Jenkins lograba sacarle el trazo grueso a un personaje que podría haber resultado más detestable. En esencia, todos los actores le aportan humanidad a una historia que gracias a ellos se corre del golpe bajo. Charlize interpreta a una de las tantas mineras de Minnesota que sufrieron acoso sexual por parte de sus compañeros de trabajo, y que llevaron adelante una demanda colectiva ardua pero eventualmente satisfactoria. Esta es una de las actuaciones en las que desaparece en su personaje, donde no resulta ni forzada ni perezosa, y mediante la cual demuestra que el papel de mujer común en situación extraordinaria la cae como anillo al dedo. Por esta interpretación obtuvo su segunda y última nominación al Oscar hasta el momento.

*DOS MALAS:

*1. DULCE NOVIEMBRE (2001, Pat O'Connor)

• Partamos de la base de que adaptar una novela de Herman Raucher no es una tarea sencilla. El autor norteamericano ha escrito obras - también llevadas al cine - como Verano del '42 y Sublime amor juvenil, que se encuentran propensas a ser sometidas a un desfile de cursilerías dignas de su cuasi-heredero Nicholas Sparks. A pesar de esto, la prosa de Raucher es un poco más audaz y, al caer en manos correctas, puede llegar a conmover a pesar de ciertas fatalidades de las tramas. Dulce noviembre se mueve en esa fina línea pero eventualmente termina cayendo en lo empalagoso con todas las letras. La premisa es ciertamente original: una mujer que está a punto de morir elige todos los meses a un hombre diferente para que experimenten las mejores jornadas de sus vidas. En noviembre, "el elegido" es Nelson Moss, un empresario cuya existencia rutinaria logra alterar al punto de que ambos se enamoran. Si dicha premisa hubiese sido abordada con algo de riesgo en su realización, este film podría haber sido un drama romántico mucho más efectivo. Por el contrario, la actriz y Keanu Reeves (quienes venían de trabajar juntos en El abogado del diablo) no tienen la química suficiente como para prevenir que la historia caiga en el ridículo, y recursos como la música (Enya todo el tiempo) y la saturada fotografía son explotados sin un atisbo de sutileza.

*2. ÆON FLUX (2005, Karyn Kusama)

• El mismo año en el que se estrenó Tierra fría y dos años antes de otra gran incursión dramática de Theron - en el film de Paul Haggis In The Valley of Elah-, la actriz comandó la adaptación de la serie animada de Peter Chung Æon Flux, bajo la dirección de una realizadora que acá no se encuentra a la altura de su talento: la prometedora Karyn Kusama. Este film tiene ciertos componentes feministas que tanto le atraen a Kusama - incluso logra incorporar temáticas de su realista Girlfight al universo de la ciencia ficción -, pero termina siendo víctima del guión de la dupla Phil Hay-Matt Manfredi. Ambos cometen una suerte de masacre contra la versión animada haciendo de su protagonista una mujer menos activa y temeraria, encerrada en una historia que se va tornando cada vez más soporífera. Theron, quien por entonces quería ser catapultada como heroína de acción, tampoco logra inyectar a esa guerrera del nervio necesario como para mantener nuestra atención. El fracaso del film fue notorio desde todos los frentes y Chung hizo fuertes declaraciones luego de presenciar lo que habían hecho con su personaje: "Me sentí humillado y triste por ver cómo le quitaron toda la crudeza a la historia para agradar más a la audiencia". Los guionistas, por su parte, contraatacaron asegurando que la versión final está lejos de ser la que ellos escribieron. Cualquiera sea el caso, esta es una película totalmente olvidable.

*DE YAPA: Charlize en Mad Max, a estrenarse mañana:

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