Las intimidades de la China Suárez, Oreiro, Francella y Furriel en Punta del Este

PUNTA DEL ESTE.- La China Suárez eligió lugar para pasar el verano. El este uruguayo tiene el imán necesario como para asegurar movida cuando se quiere movida, y paz para el descanso cuando la familia lo requiere.

"Ya decidí que voy a pasar mi verano aquí, con Rufina y Benjamín”, dijo en referencia al Hotel Fasano Las Piedras, que tuvo amplia difusión cuando Susana Giménez quiso celebrar ahí un cumpleaños muy especial. “Benja ya lo conoce, vino hace años", dijo la protagonista de El hilo rojo”, que filmó este año con su nueva pareja, el chileno Benjamín Vicuña.

Fue la figura más buscada en el fin de semana esteño, aunque no estaba nominada para los Premios Platino y su participación era la de entrega de uno de los premios. Pero la actriz argentina estuvo promocionando su última película, dio notas, y concitó la atención. En la alfombra roja se lució con un vestido negro, sexy, que fue objeto de múltiples flashes.

La China Suárez llegó a La Barra en la noche del jueves a las 22 horas sin Benjamín y sin Rufina. Había pasado todo el día en Montevideo presentando el Hilo Rojo y reconoció que estaba cansada, por lo que fue a descansar al Bungalow Nº 11 del hotel Fasano Las Piedras.

Nada de desayuno y mucho de sueño. A las 12 am del viernes se despertó y luego usó los servicios del lugar. Disfrutó del spa , de la piscina interna, la sala de relax, los masajes y el sauna. Pero nada de ejercicio duro. "No soy de usar gimnasios, aunque sean espectaculares", dijo riéndose mientras fumaba su primer cigarrillo del día. Y ese día fue cuando transmitió a la gente del hotel su deseo de pasar ahí sus vacaciones veraniegas: "Este lugar es increíblemente bello".

El sábado se fue a Buenos Aires para festejarle el cumpleaños a Rufina y a la mañana del domingo volvió a Fasano, vestida de negro y cansada. Tomó un desayuno y enseguida se acomodó en su habitación para dormir hasta las tres de la tarde, cuando comenzaron a maquillarla para la gala.

Para la Gala se puso un sexy vestido negro, escotado, y como cartera llevó un Clutch en forma de caballo. Momentos de bromas cuando la China no podía poner su teléfono celular dentro de esa cartera. "Lo compré en el Barrio Chino de Nueva York" contó, ante la gente que le halagaba el original clutch.

En el mismo complejo turístico estaba Natalia Oreiro, una de las conductora de los Premios Platino, que encargó un menú especial; solo verduras y especialmente puré de calabaza y ensaladas con palta. Llegó con Ricardo Mollo y su hijo Merlin Atahualpa, a quien cuidan ellos mismos, sin niñera.

Atahualpa pasó horas jugando en el Kids Club del hotel, “súper sociable con todo el mundo”, según distinguía el personal del hotel. Mollo disfrutó de una degustación de vinos uruguayos y se declaró fanático del vino y un gran conocedor.

Otra curiosidad de las estrellas visitantes: el actor español Eduardo Noriega llegó con su esposa María Trinidad pero ella, simpática y tímida, no deja que le saquen fotos. La pareja tomó dos bicicletas y salió de recorrida por la cancha de golf y la playa.

El encargado de poner el humor en la gala, el español Santiago Segura, aprovechó las horas en Punta del Este para andar mucho tiempo en bicicleta.

Guillermo Francella llegó con su esposa el mismo domingo y la pareja disfrutó uno de los platos especial del hotel: el cordero con puré de papas.

El mexicano Adal Ramos vio a Francella y se acercó a saludarlo con una emoción de admiración que llamó la atención. Lo abrazó y le decía que era un sueño conocerlo.

Joaquín Furriel y Eva de Bernardi permanecieron la mayor parte del tiempo en el bungalow y salieron solo para almorzar. También pidieron el cordero con puré de papas y almorzaron solos. Eva pidió un turno para tomar un masaje en el Spa y fueron de los últimos en partir hacia la gala y pidieron que no se les hiciera fotos.

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