La música de los delfines, en stereo

A poco más de un año de la multitudinaria despedida de Soda Stereo, Gustavo Cerati retribuyó la participación de Richard Coleman en aquel último concierto, ese de las "gracias totales". Y los dos guitarristas que alguna vez militaron juntos en Fricción, mítico grupo de los años Ô80, volvieron a encontrarse sobre un escenario.

En esta oportunidad, el anfitrión fue Coleman y su banda Los 7 Delfines, con el objetivo de sumar al ex Soda como atracción de la grabación del disco en vivo que editará la banda antes de fin de año, con lo registrado el fin de semana último en el teatro Regio.

Entonces, desde el comienzo la propuesta era por demás interesante. Tanto que, a la función original del sábado hubo que agregarle una más para el domingo, debido a la demanda de entradas.

Además de la presencia de Cerati, Los 7 Delfines habían prometido hacer un set de canciones basado en sus dos primeros álbumes, "L7D" y "Nada memorable", quizás sus mejores trabajos hasta el momento, e intercalar algunos temas de "Dark", su última producción independiente.

Con una puntualidad extraña en la banda, el ahora cuarteto -y con el reciente ingreso de Germán Lentino en bajo luego de la partida de Ricky Sáenz Paz para formar parte de Bel.Mondo- subió al escenario con sus ropas negras a tono con el público, entre los que se vio a más de uno con sus largos sobretodos y los pelos parados a la Robert Smith.

Un viaje por el tiempo

El arranque fue a pura potencia con "Neverdonothing" y "Tu orden", de su primer disco. Con las guitarras y la voz de Coleman siempre al frente, Los 7 Delfines lograron conmover a los espectadores, que en su mayoría siguen al cantante desde los tiempos de Fricción.

Y el ir y venir en el tiempo fue la regla de oro de las dos noches.

De sus primeros años, cuando una de las guitarras estaba comandada por Gamexane, de Todos Tus Muertos, viajaron sin escala a sus más nuevas composiciones -"Allá" y "Enloquecida"- para luego retroceder aún más y recrear lo que bien podría señalarse como el primer hit que Coleman supo imponer masivamente: "A veces llamo". Luego del tema de Fricción incluido en su primer álbum, "Consumación o consumo", doce años atrás, el momento pareció de lo más acertado para invitar al escenario a su viejo amigo, Gustavo Cerati.

Guitarra en mano, el ex líder de Soda Stereo se ubicó en el opuesto de la música que desarrolló durante los últimos años junto al proyecto electrónico Plan V, y se puso al frente de una versión casi hard-core de "Tan celosa".

Sabiéndose partícipe de una fiesta ajena, Gustavo Cerati ni se acercó al micrófono, e intentó pasar lo más desapercibido posible, tarea nada fácil para el ex Soda Stereo. Luego de acompañar a la banda en "Ni una vez más", agradeció al público con sus manos y huyó hacia los camarines. Cuando los protagonistas exclusivos volvieron a ser Los 7 Delfines, derrocharon electricidad en excelentes temas como "Travesía", "Nada memorable", "Cenizasay" y la poderosa versión en castellano de "Héroes" de David Bowie, que levantó de sus asientos al público presente.

Al final, Cerati

Después del primer cierre con "Sirena", los bises llegaron con el ya histórico baterista Braulio Aguirre en los teclados y un Coleman al mejor estilo Sandro cantando "Sin motivos".

Las últimas imágenes del concierto fueron para Cerati que volvió a escena para una suave versión de "Angela", Coleman sosteniendo que "después del momento emotivo, ahora vamos a tocar el tema que pasan en la televisión", como preámbulo de "Sádica", y el final, luego de dos horas de show, con "Medallón" y la furia de "A-Marte".

Sin dudas, Los 7 Delfines concretaron un recital con todas las atracciones posibles, que se plasmará en su primer disco en vivo. Por eso, mientras el grupo se retiraba, el grito de uno de los seguidores de la banda le hizo justicia al cierre y definió el sentimiento de los presentes: "Gracias totales Richard". Risas, muchas risas, y final.

Un regio ciclo musical

El ciclo de recitales "Nuevo Regio", organizado por el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, sigue a paso firme. Luego de las presentaciones en el mes último de Los Visitantes, Juana la loca, Fats Fernández, Gabriela Torres, Turf, Malosetti Trío y Los Cafres, y los del último fin de semana de Illya Kuryaki & The Valderramas y Los Siete Delfines, este mes continúa con las actuaciones de excelentes artistas.

El fin de semana que viene se subirán al escenario Liliana Herrero, el viernes, y los platenses Peligrosos Gorriones junto a Suarez, el sábado. Para el resto de octubre, en el remodelado y coqueto teatro están programados los shows de Fontova, Virus, Bel.Mondo, Luis Salinas, Cienfuegos, Miguel Botafogo y un tributo a Gershwin con la participación de Gerardo Gandini, Hugo Pierre, Mojarra Fernández y Jorge Padin.

El ciclo de conciertos que se llevan a cabo en el teatro de casi setenta años de historia, ubicado en Córdoba al 6000, resultó una buena alternativa para la falta de espacios con la que luchan constantemente las bandas de rock vernáculo.

Además, se convirtió en una buena opción para muchos adolescentes que recién se inician como público rockero. Porque más allá del precio accesible de las entradas -que cuestan seis pesos-, los shows comienzan a las 21, un horario apto para todo público.