La escalofriante experiencia paranormal de Mercedes Morán el día que debutó en teatro

Mercedes Morán está consagrada como una de las actrices más legendarias a nivel nacional. Teatro, cine y televisión, no dejó escenario sin pisar o papel sin interpretar. Su exitosa carrera se debe a su amplio talento, carisma y esa habilidad artística de despojarse de todo para darle vida a una idea. Pero, según compartió con Jey Mammon, al comienzo del camino recibió una pequeña y especial ayuda.

Era su primera vez presentándose frente a una audiencia en vivo y, pasado el gran estreno de Los efectos de los rayos gamma en las caléndulas de Paul Zindel, todos sus seres queridos corrieron al camarín a felicitarla. Ese pequeño espacio en donde se cambiaba antes y después de cada escena era compartido por todas las actrices del elenco. Por este motivo, estaba atiborrado de gente tras el espectacular final de obra.

Mercedes seguía vestida con el traje de su personaje así que, en un intento de finalizar su noche más rápido, agarró su ropa y se dirigió al baño que estaba ubicado por encima del escenario. En medio de la oscuridad, subió la escalera, entró al espacio y, mientras tanteaba la pared en búsqueda de la llave de luz, la mano se chocó con otra mano. “Yo pensé, en ese momento, que estaba también intentando encontrar la perilla”, explicó frente a la mirada atenta de Jey Mammon.

Creyendo que era el asistente, Morán le habló pero al no recibir respuesta, bajó corriendo al escenario buscando a quien contarle su experiencia. Al encontrarse con uno de sus compañeros, le rogó que fuera a revisar y el miedo aumentó cuando le confirmaron que no había nadie: el baño estaba completamente vacío.

Desesperada, intentó compartir su vivencia con el resto del elenco pero sin éxito. “Estaban en otra”, aseguró durante el relato. Cuando ya estaba por dejar el tema de lado, lista para archivarlo en su memoria como algo que “seguro tiene explicación lógica”, el director del teatro la llamó.

Tras permitirle que detallara todo lo que había vivido, le contestó: “Quedate tranquila, fuiste bendecida. La historia cuenta que aquí hay un fantasma, una vieja actriz que murió en escena pero cuando sucede este tipo de cosas es una buena señal”. Conmovida, la protagonista de El Reino (Netflix) acotó: “Era mi estreno, lo tomé como una bendición”.

El conductor tomó el final de la anécdota como una oportunidad para resaltar que, en efecto, había funcionado. Mercedes, reconociendo el largo camino que dejó atrás, expresó: “Fue una bendición para mí porque este trabajo me da mucha felicidad. Era una época en la que yo tenía el temor de si iba a poder vivir de este trabajo. Era lo único a lo que aspiraba”.

Ya llegando al final del programa, reflexionó: “Es en el único lugar en donde he mantenido vivo siempre mi deseo y mi imaginación. Fui bendecida”.

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