Gran Hermano: Romina Uhrig se enteró en vivo que está en riesgo su adopción de Caramelo y su reacción llamó la atención
La exparticipante salió de la casa con la mascota creyendo que ya podría ser parte de su familia pero la realidad la golpeó
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LA NACION
El domingo 19 de marzo, Romina Uhrig fue la última eliminada de la casa de Gran Hermano (Telefe). La mujer de 35 años quedó fuera del podio del reality en vísperas de la definición del juego, que mantiene en vilo al país desde hace cinco meses. Su despedida fue muy emotiva e incluyó la salida de Caramelo, una de las mascotas del juego, que - hasta el momento- se creía que iba a ser adoptado por la jugadora. Sin embargo, con el transcurrir de los días se informó que la acción está en riesgo.
Caramelo y Mora ingresaron a la casa de GH el 14 de febrero. Desde aquel momento, los ánimos en la convivencia cambiaron completamente al crearse un gran amor por las nuevas mascotas, a quienes cuidaron y cobijaron con mucho cariño. Los dos cachorritos ingresaron para ser compañía de los jugadores como también para la promoción de la adopción responsable de mascotas. Ambos se encontraban disponibles para ser parte de alguna familia y rápidamente, Romina y Marcos expresaron su intención de ser sus “dueños”.
Por esta razón, tras la salida del juego de la exdiputada, Caramelo se fue con ella. Sin embargo, fueron separados al momento que la mujer fue alojada en un hotel como parte del proceso estipulado al momento que se rompe el aislamiento del juego. Mientras, que el cachorrito volvió al refugio donde vivía antes de ingresar a la casa más famosa.
En la espera de un reencuentro entre Caramelo y Romina, la participante fue sorprendida en vivo en A la Barbarossa (Telefe) con un móvil en vivo desde el refugio, donde pudo ver al cachorro jugar en el lugar. Sin embargo, el momento se tornó tenso cuando Robertito Funes Ugarte dialogó con Gustavo, el veterinario a cargo del lugar, y se mencionó el proceso de adopción que debería atravesar la mujer. “Se verá si están dadas las condiciones para los dos, no solamente para el perro, sino para Romi también, porque es un amor para toda la vida. Es una relación muy intensa que habrán vivido, eso está buenísimo”, anticipó el profesional.
Ante la aclaración, la exdiputada indicó que desde la producción le aseguraron que el día sábado ya podía llevarse a Caramelo a su casa. Esto generó una inesperada reacción por parte de Gustavo: “Yo lo único que puedo decirte es que, con todo el amor del mundo, hay algunos factores de riesgo en la tenencia para vos porque hay preguntas como si tenés la pileta cercada o si hay niños en la casa. La pregunta más importante es si considerás que poder llevar una historia de amor con el perrito”. Sus palabras causaron sorpresa en la mujer, que no pudo disimular la cara de indignación.
La tensa situación requirió la intervención de Georgina Barborossa. “Esto lo vamos a hablar en privado porque ella tiene todas las condiciones”, expresó la conductora, lo que llevó al veterinario a estar de acuerdo con ello y se dio por finalizado el tema. Lo cierto es que el cuidado de Caramelo por parte de Romina fue puesto en duda en las redes sociales cuando - aún alojada en la casa- recibió la visita de sus tres hijas y la más pequeña, de un año, intentó golpear al cachorro. Desde entonces, en Twitter se pidió que se analizara si el cuidado de Caramelo sería el adecuado en la casa de Romina.
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