Fue a Los 8 escalones del millón y sorprendió al revelar por qué se anotó: “Tiré el aguinaldo a la basura”
Ezequiel estuvo a punto de quedar afuera de la competencia, pero sus compañeros se apiadaron de su insólita historia y lo dejaron avanzar, lo que lo llevó hasta la final
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Son muchos los motivos que pueden impulsar a una persona a anotarse en Los 8 escalones del millón (eltrece), pero quizás el principal es el deseo de poder alcanzar el tan ansiado premio de 2 millones de pesos. Están quienes lo quieren para poder realizar arreglos en sus casas, para poder pagar algún tratamiento médico o con el fin de realizar un viaje que, de otra manera, sería inalcanzable. En el caso de Ezequiel, deseaba el abultado pozo para poder concretar un emprendimiento que no logró alcanzar debido a un insólito percance que tuvo con sus ahorros.
Las historias que se escuchan en el estudio de Lo 8 escalones del millón son tan variadas como las decenas personas que desfilan frente a las cámaras día tras día, no obstante, siempre hay alguna que logra captar la atención no solo de los presentes sino también del público que sigue el concurso desde la comodidad de sus casas.
En esta ocasión, quien se transformó en el protagonista de la noche fue Ezequiel, un empleado administrativo de 30 años que se destacó por el extraño incidente que impulsó a una compañera de trabajo a que lo inscribiera en el programa.
Llegada la instancia en la que los jugadores que habían avanzado debían elegir quién seguía adelante, si él o Petra -la ganadora de la edición anterior-, Guido Kaczka contó la historia que los ayudó a tomar la compleja decisión.
“Lo anotó su amiga del trabajo porque le contó que un día cobró dinero, lo guardó en una bolsa para esconderlo y cuando hizo la limpieza tiró la bolsa a la basura”, reveló el conductor, con más incredulidad a medida que avanzaba el relato. En respuesta, Ezequiel explicó: “Lo guardé en una bolsa de basura que dejé escondida, un día la saqué para buscar efectivo, la dejé afuera y cuando le hice el nudo pensé que era de basura”.
Sin poder creer lo que escuchaba, Kaczka le preguntó a dónde la había tirado. “La tiré al incinerador, cuando la fui a buscar ya no estaban. Tiré un aguinaldo entero”, detalló, mientras quienes estaban en el estudio sufrían por él. Finalmente, sus compañeros lo eligieron para que subiera al próximo escalón y pudiera seguir en la competencia.
Así, avanzó lentamente hasta que logró ubicarse en la final, en donde se enfrentó con Gabriela, quien deseaba los 2 millones de pesos para invertir en su carrera en la fotografía. Uno a uno, respondieron las preguntas de la última ronda, pero fue ella quien logró sacarle ventaja a su contrincante.
Ya ante la última consigna, cuando Ezequiel se veía a solo una respuesta correcta de la posibilidad de ganar el dinero que le permitiría comprar lo necesario para crear su emprendimiento de ploteo y personalización de skates, les tocó poner a prueba sus conocimientos sobre videojuegos.
“¿A qué marca de consola de videojuegos perteneció el modelo llamado ‘gamecube?”, preguntó Santiago Dorrego. Ambos concursantes respondieron Nintendo, que era la correcta. Sin embargo, debido al conteo de luces verdes, Ezequiel perdió contra Gabriela y no pudo recuperar ese dinero que, sin querer, perdió en la basura.
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