En viaje hacia la Tierra Media
El mundo fantástico de John R. R. Tolkien, en un bar temático
Inspirado en el mundo mágico de John Ronald Reuel Tolkien, la semana última abrió sus puertas al público Dragon & Sword, un bar y restaurante temático que invita a adentrarse en el universo fantástico de la Tierra Media -desde la creación misma hasta la finalización de la Tercera Edad del Sol-, que el escritor y filólogo inglés describió minuciosamente en El Silmarillion, El Hobbit y El señor de los anillos.
Es notable la colección de objetos en exposición, dispersos en tres salones y un vestíbulo: estandartes, pósters y merchandising oficial de las películas, vitrinas repletas de libros de y sobre Tolkien en distintos idiomas, un atlas de la Tierra Media, diarios, juegos de cartas, señaladores, colgantes, pipas talladas, tabaqueras, miniaturas, estatuillas, agendas, juegos de mesa, vestuarios y reproducciones de los mapas de aquel universo imaginario, entre tantos otros. Sin embargo, la principal atracción es Thelma Contino, creadora del local y presidenta de la Asociación Tolkien Argentina, una verdadera experta sobre la vida de Tolkien y su obra.
"Yo creo que Tolkien despierta tanta fascinación porque la realidad que nos rodea es sumamente hostil, repleta de edificios, de smog, de corrupción y noticias desagradables sobre el desempleo y mil cosas injustas de gente que hace mucho daño a otra. Entonces, esta realidad nos lleva a desear una transformación hacia alguna forma más honorable y más justa. Y en este sentido, Tolkien plantea una forma de vida que reivindica los valores de caballería, como el amor, la familia, la lealtad y el coraje. Es decir, no permitir que la vida nos pase por adelante de los ojos sin tomar un rol activo, y defender lo que consideramos justo para lograr un final, tal vez no feliz, pero sí honorable", señala Contino.
Idiomas, platos, tragos
Más allá de la ambientación y la gastronomía, elaborada sobre la base de una investigación sobre comida medieval y los platos que Tolkien menciona en sus libros -como el famoso guiso de conejo o el carnero asado-, el Tolkien Bar (Honduras 5514) funciona como un verdadero punto de encuentro y difusión de su obra. Todos los sábados por la tarde allí se reúne la Asociación Tolkien Argentina (filial de Capital Federal), se desarrollan talleres de lectura en inglés y en castellano, se organizan sesiones de juegos de rol y hasta se dicta un curso de quenya para principiantes.
"Tolkien era un filólogo, un estudioso de las lenguas antiguas como el griego, el latín, el anglosajón y el finlandés. El era profesor en la Universidad de Oxford, y allí enseñaba idiomas antiguos. El quenya es una de las lenguas inventadas por él. También inventó otras, como el sindarin, el idioma de los enanos o la lengua negra, que están completos hasta un punto. En cambio, el quenya tiene una estructura gramatical muy amplia, y se la considera la segunda más completa después del esperanto, en cuanto a las lenguas creadas", sigue Contino.
Eso sí, entrada la noche, para cruzar el umbral que separa esta realidad del universo de la Tierra Media, nada mejor que zambullirse en la carta de tragos, inspirada especialmente en distintos personajes y paisajes de El señor de los anillos. Por ejemplo, el Crema Hobbit es uno de los más famosos del lugar, mezcla de whisky, leche condensada, café y esencia de vainilla. La Pira de Denethorn II, en cambio, es un trago rojo bastante fuerte, que llega a la mesa encendido en llamas, y transporta sin escalas al centro de una hoguera demasiado caliente para ser ficticia.