El grosero error de producción de Britain’s Got Talent que indignó a los fanáticos y causó revuelo en redes

Los fanáticos volvieron a sonreír. Y es que Britain’s Got Talent regresó a la pantalla del Reino Unido tras varias interrupciones debido a la pandemia de Covid-19. Al mismo tiempo que Simon Cowell, Alesha Dixon, Amanda Holden y David Walliams ocuparon sus puestos como jurado, millones de personas hicieron lo propio tanto de manera presencial como a través de sus televisores. Pero hubo una historia en el gran regreso que causó emoción, aplausos y lágrimas pero también controversia y enojo por parte de muchos espectadores.

Todo comenzó cuando Tracey apareció en el escenario con sus dos nietas: Savannah y Cali. Los jurados creyeron que se trataba de una tierna performance en familia, pero se sorprendieron cuando la señora tomó la palabra. “Nick no sabe nada sobre esto, estamos acá para sorprenderlo porque queremos que suba y cante. Él canta una hermosa canción para sus hijas”, narró la abuela. Sentado en medio del público estaba él, que no podía contener la emoción de ver a su familia en el escenario.

La gente no paraba de aplaudir e insistir. Sus pequeñas hijas lo miraban con ilusión y su madre esperaba que acatara el pedido y cantara en el reality. Finalmente, Nick Edwards dejó su lugar como espectador y subió al escenario. “Esto es muy movilizante para mí”, señaló. “Él dijo que nunca lo haría así que tuvimos que hacerlo por él”, explicó su madre. Genuinamente estaba sorprendido y la gente que presenciaba el momento no podía controlar la euforia de lo que se vivía en el estudio.

El programa continuó, mientras que él se preparaba tras bambalinas para su inesperada presentación. Algunos artistas pasaron en el medio hasta que Edwards pudo presentarse, cantar una tierna versión de “Daddy’s Little Girl” de Ernie Halter y emocionar hasta las lágrimas a todos y cada uno de los presentes. Su voz y performance le valieron los cuatro “sí” del jurado y un lugar en la próxima etapa. Aunque su sorpresiva aparición no estuvo lejos de la polémica.

Cuando Nick fue enfocado por la cámara por primera vez, habló con su esposa y lanzó un comentario que fue captado a la perfección por los micrófonos del estudio. Por eso, en redes la gente empezó a trabajar la idea de que todo estaba armado dado que él tenía un micrófono corbatero mucho tiempo antes de que la “sorpresa” se diera en el escenario. Rápidamente trasladaron los comentarios a las redes y hubo polémica.

La respuesta de la producción de Britain’s Got Talent

Con todo el escándalo que había en redes en torno al tierno y tímido padre, la productora tuvo que salir a aclarar qué era lo que ocurrió realmente. Al igual que en todas las presentaciones de este estilo, Britain’s Got Talent tiene algunos espectadores en el teatro que se llaman Gogglebox. Es decir, que se les pone un micrófono antes de comenzar para tener grabada su reacción para la posterior emisión en televisión.

“Cuando Nick ingresó al auditorio de Palladium durante las audiciones, se le acercó [un micrófono] para ser parte de nuestra audiencia Gogglebox. Estaba totalmente desprevenido, hicimos esto para poder microfonearlo sin que él sospechara nada”, señaló un portavoz de la empresa en diálogo con Daily Mail.

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