¿Cuál fue el personaje que descolló en 2011?

Cuando termina el año, y llega el balance del año en el mundo del espectáculo, uno se pregunta quién fue el personaje del año. Ya sea porque fueron la revelación, porque ratificaron su liderazgo o porque ocuparon gran parte de las portadas de los medios, estas son las figuras que estuvieron en boca de todos. ¿Quién fue el más destacado?

Se puede decir que fue un gran año para Griselda Siciliani. Sumado al éxito de su pareja, Adrián Suar, que mantuvo su prominente trabajo al frente de El Trece, la actriz termina un muy buen año en los planos laboral y personal. Mientras que protagonizó la comedia del prime time de El Trece, Los únicos, que fue muy bien acompañada por el rating, hizo su incursión en el cine y tuvo en sus manos el Martín Fierro de Oro por el unitario del que participó el año pasado, Para vestir santos. Todo esto, concluido con un broche de oro: el embarazo de su primera hija, Margarita Suar.

Mientras tanto, Julio Chávez y Rodrigo de la Serna interpretaron dos de los personajes más elogiados del año: la dupla Gitano-Lombardo, en el unitario El puntero. Con actuaciones sobresalientes, fueron una pata fundamental de los aplausos que despertó el unitario de Pol-ka. Por su parte, Pablo Echarri tuvo un prometedor comienzo como productor, junto a Martín Seefeld, con El elegido . Allí, además, Leticia Brédice se lució con su caracterización de Verónica San Martín, una mujer de la alta sociedad con un pasado turbio y un presente conflictuado.

Mario Pergolini también entra entre los candidatos. Su salida de la radio Rock & Pop después de trece años de liderazgo y el anuncio de un proyecto radial propio dio que hablar y fue uno de los pases del año. También entre los conductores, Nicolás Repetto finalmente volvió con el Sábado Bus que tantas alegrías le dio hace diez años... y no tantas en 2011. Críticas al programa, discusiones en vivo y un rating que no convención a Telefe no alcanzó para opacar la alegría del conductor por el regreso de su creación favorita. El infaltable entre los animadores es, como viene siendo en los últimos años, Marcelo Tinelli. A pesar de lo que digan los detractores, de que sus programas se basen cada vez más en los escándalos, nadie puede negar que sabe cómo llegar al público y crear estrellas. Entre tantos personajes, se abre paso Mariana Fabbiani, que fue destacada nuevamente como mejor conductora en los Martín Fierro y cerró el año con la noticia de que dejaría el programa que ya lleva siete temporadas, aunque advirtió que no dejará la pantalla chica.

Si se habla de la maquinaria de mediáticos del mundo ShowMatch , hay tres personajes que no pueden quedar afuera: Hernán Piquín, el reconocido bailarín que decidió incorporarse al mundo de la farándula y terminó consagrándose campeón del "Bailando" junto a Noelia Pompa, demostrando que el talento y la popularidad pueden ir de la mano. Tito Speranza, el otro finalista, es un caso aparte. El año pasado iba al programa de Tinelli como guardaespaldas de Fort y este año, así de rápido, se convirtió en una estrella con una amplia lista de seguidores. De parte del jurado, Graciela Alfano dio la nota. O las notas. Primero, con sus clásicas peleas con sus colegas, que llegó a la violencia cuando arremetió contra Aníbal Pachano con una cachetada en vivo. Después, cruces con el propio Tinelli, una suspensión de El Trece, un fanatismo por Twitter, acusaciones varias sobre su pasado y un final anunciado: cruzada contra el canal de Suar.

En lo que a escándalos se refiere, 2011 deja dos nombres: Juanita Viale y Zaira Nara. La nieta de Mirtha no tuvo paz este año. Comenzó con la noticia de su embarazo, siguió con la foto que la mostraba junto a Martín Lousteau, después perdió el embarazo , se reconcilió con Gonzalo Valenzuela y quedó embarazada nuevamente de él. Zaira, por su parte, anunció con bombos y platillos que se casaría con Diego Forlán, quien finalmente la dejó al pie del altar. Pero la modelo no puede quejarse, tiene un muy buen fin de año, luego de volver al Bailando, confirmó su nueva relación. El privilegiado esta vez es el tenista Pico Mónaco y la estrategia de Zaira es diferente: prefiere el perfil bajo y habla bien poquito sobre lo que hace feliz a su corazón.

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