Conocé a Amel

No puedo fingir que no soy quien soy, ¡mi mamá es Ana!" Desde la mismísima casa donde hace más de cuatro décadas su tío Luis Alberto Spinetta encendió la leyenda de Almendra, Gonzalo Pallas, cantante, guitarrista y compositor de Amel, asume con naturalidad su linaje spinettiano.

La historia de Amel soltó amarras en 2006, cuando Gonzalo empezó a darse unas vueltas después del colegio por la casa de los abuelos para zapar con su otro tío, Gustavo (55 años), que entre otras cosas tocó batería en Artaud (el clásico de 1973) y percusión con Illya Kuryaki. "El empezó a venir con una guitarra que le pasó Luis; la enchufaba y nos poníamos a delirar. La verdad, yo no tenía intención de armar una banda, pero se fue dando de una manera tan natural que me convenció", resume Gustavo. Al núcleo fundador se sumaron luego Francisco Zunana (guitarra) y Pablo Castagneris (bajo y coros), dos compañeros de colegio de Gonzalo, que promedian también los 20 años.

SONIDO Más allá de nombres propios, si hay algo que conecta a Amel con el ancho imaginario del Flaco y sus "bandas eternas", es un amor compartido por el rock de la vieja escuela, en especial, de la década del 70. "Lo que pasó en esa época es un buen referente de la música que nos gusta: el jazz-rock, el funk; bases power, otras más pop, mucha melodía. Pero cuando compongo un tema no pienso en los estilos. Lo primero que sale generalmente es lo mejor", remarca Gonzalo. Y el tío Gus completa: "De alguna manera estamos tratando de volver a las fuentes, encarar el rock a partir de ahí". Frente a las obvias comparaciones, el baterista se planta: "Todo lo que te gusta influencia lo que hacés; no se trata de copiar, se trata de ver cómo juega tu corazón con eso, porque si la música no sale del alma es una mierda.

Dante siempre trató de despegarse de la influencia de Luis, porque no quería que lo encasillaran, y se privó de hacer muchas cosas que le nacían del corazón por no quedar pegado. A nosotros eso no nos cabe". Con más de treinta temas ensayados al dedillo y un vivo que combina frescura y experiencia, lo pendiente para Amel es grabar su disco debut. "El plan es entrar a grabar en estos días, en el estudio El Pie, con producción de Tweety González. Depende un poco de sus tiempos, pero el disco lo vamos a grabar este año, con Tweety o solos", se mandan ellos.

Por Daniel Hofer

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