Con espíritu navideño y sustentable
Cuidado con los árboles, los adornos, los envoltorios de los regalos, la vajilla descartable... Cada año se transforman en toneladas y toneladas de basura. Mejor que estas Fiestas sean una buena oportunidad para ejercitar el ánimo ecologista
Para época de máximo consumo y producción de basura, ninguna como la navideña. Según un informe sobre Navidad 2010 de la consultora Deloitte Argentina, el consumo navideño en el país creció muchísimo en los últimos años, y se trata de la festividad que más volumen de ventas genera.
Infinidad de cosas que se compran para las Fiestas (de papel y plástico, la mayoría), al día siguiente se tiran a la basura.
Los árboles de plástico, que tienen la aparente ventaja de ser reutilizables de año en año, en realidad contaminan muchísimo. Mejor, decorar árboles vivos, pero sólo si después de Navidad se pueden plantar en espacios donde puedan seguir viviendo. Según una investigación sobre árboles de Navidad de la federación agrícola italiana Coldiretti, "para producir árboles de plástico, que en su mayoría están hechos en China, se usan materiales como el PVC, que implican un enorme gasto de energía y contaminación durante el proceso de producción, transporte y eliminación. Para producir un árbol de plástico se necesitan 23 kilos de dióxido de carbono, y se estima que la compra de medio millón de arboles de plástico por año provoca la emisión de 11,5 millones de kilogramos de CO2".
Al no ser biodegradable el plástico, sólo habría que usar el árbol plástico si ya se lo tiene. Y, obviamente, habría que volver a usarlo todos los años. Lo mismo vale por los adornos que muchos emplean sólo para un festejo. Según la estadounidense Elizabeth Rogers, autora de The Green Book , una completa guía para salvar el planeta con acciones diarias, se calcula que la mayoría de las familias compra adornos navideños todos los años. Esto produce un costo económico de 7500 millones de dólares. Si cada familia gastara seis de estos dólares en objetos reciclables, la plata ahorrada serviría para calentar ¡casi seis millones de hogares de todo el mundo desde Navidad hasta Año Nuevo!
Las luces navideñas también son un riesgo ecológico, porque gastan muchísima energía, tanto en los arbolitos hogareños como en las calles y los espacios públicos. Si se usaran las luces LED, el gasto sería un 60 por ciento menos que el de las lámparas tradicionales.
En tanto, papel y moños constituyen el 40% de la basura producida durante Navidad. Si la mitad de las familias reemplazara los envoltorios de dos regalos por simples sobres, bolsas de papel reciclado o tal vez canastas de mimbre, se ahorrarían más de 25.000.000 de kilos de basura.
¡Y cuidado con las tarjetas navideñas! Solamente en Estados Unidos, cada año se envían 2000 millones de cartas para esta fecha. Se calcula que una reducción del 1 por ciento podría salvar 15.000 árboles.
Deloitte www.deloitte.com Coldiretti www.coldiretti.it Green X-mas Tree www.burotree.com Reno de Medici www.renodemedici.it The Green Book www.readthegreenbook.com Comercio justo www.fundacionsilataj.org.ar y www.equitativo.com.ar
Más datos
Pero existen otras alternativas al árbol vivo: el diseñador gráfico australiano Büro North creó un árbol navideño 80% ecológico para reemplazar al tradicional. Se consigue en tres tamaños, es muy fácil de instalar y recibe el nombre de Green X-mas Tree. Y no sólo está realizado con materiales reciclados, sino que, a la hora de fabricarlo, se usa poca cantidad de energía.
También la empresa italiana Reno De Medici fabrica un árbol sustentable hecho en su totalidad con fibras de cartón reciclado, que se vende con o sin decoración.
Y no hace falta ser un diseñador consagrado para armar y decorar un árbol de forma ecológica. Con botellas de plástico, cartón reciclado, viejas lamparitas y un poco de fantasía es fácil armar uno. "Primero, hacemos el tronco del árbol pegando muchos rollos de papel de baño (sin papel) y lo pintamos de marrón. Después pintamos unas cuantas botellas de verde, las cortamos en tiritas para usarlas como hojas del árbol y las pegamos a los rollos", cuenta Aisha, de 11 años, mientras sus amigos Otti y Leo, de 11 y 7, respectivamente, recortan un cartón con forma de estrella y lo pintan de amarillo, y pintan de rojo viejas lamparitas que sirven para reemplazar las bolitas del árbol.
Iluminar la Navidad con energía solar también es una buena forma de reducir el gasto energético y la factura de la luz. Si se dispone de paneles solares se puede obtener energía suficiente para iluminar el árbol y el exterior de balcones y terrazas durante la noche, minimizando también los efectos nocivos de emisiones de CO2 a la atmósfera. Las tiras de LED se consiguen en casas de iluminación, y las luces navideñas pensadas para energía solar en Mercado Libre, por ejemplo.
Por supuesto, los regalos también pueden ser sustentables: entradas, certificados, bonos o cupones es una buena alternativa. Comprando vía Internet, además, se ahorran kilos y kilos de basura generada por los papeles de regalo, y además reduce el estrés, el ajetreo y la contaminación producidos por el tránsito y las colas.
En sintonía con el comercio justo, además, se pueden conseguir regalos sustentables muy originales, desde artesanías de pueblos originarios hasta alimentos orgánicos que dan gusto, todos productos que promueven el consumo responsable con las personas y el medio ambiente.
AGENDA DE BOLSILLO
- No decorar los árboles naturales con objetos pesados para no romper sus ramas, y no usar nieve sintética ni spray de color. Recordar que el árbol está vivo y respira.
- Antes de tirar cosas a la basura, revisar qué podría servir para, con imaginación, terminar sus días decorando el árbol.
Sí a los regalos eco-friendly que creen conciencia verde.
- Si se hace un regalo que lleve pilas, agregar un paquete de las recargables.
- Mejor, tarjetas de Navidad de papel reciclado.
- La basura aumenta en Navidad: separarla sería una gran ayuda para el medio ambiente.
- Evitar manteles, platos, vasos y cubiertos descartables.
- Al hacer las compras, ir con bolsa o changuito propios, como para evitar el uso de bolsas de plástico o papel.
- Siempre es mejor consumir productos locales, que causan menos impacto en el ambiente, porque no atraviesan grandes distancias, como sí lo hace todo lo importado.