Un pingüino que no canta pero baila de maravillas
Happy Feet: el pingüino (Happy Feet , EE.UU./2006). Dirección: George Miller. Dibujo animado con las voces de Elijah Wood, Robin Williams, Brittany Murphy, Nicole Kidman y otras. Guión: George Miller, John Collee, Judy Morris y Warren Coleman. Música: John Powell. Coreografía: Savian Glover y Kelley Abbey. Presentada por Warner Bros. Hablada en inglés. Duración: 107 minutos. Calificación: apta para todo público.
Nuestra opinión: muy buena
En las heladas planicies de la Antártida, los pingüinos son los reyes del lugar. Allí viven felices, hacen un culto de la amistad, se reproducen sin cesar y cantan con hermosas voces los temas más cálidos que hablan de la belleza que los rodea y del amor que los mantiene unidos en esa comunidad plena de orden, de respeto y de alegría. Pero como todo tiene su excepción, cuando nace Mumble, sus padres, Norman Jean y Memphis, se llevarán una ingrata sorpresa, ya que de la garganta del pequeño pingüino salen unas desafinadas notas que se convierten en la burla de sus congéneres.
Mumble, sin embargo, posee una cualidad inusitada para los de su raza: baila como el más hábil de los danzarines, aunque ello no deja satisfechos a sus padres, que piensan que nunca hallarán una pareja para su hijo y que éste quedará de lado el resto de su vida. Noah el Anciano, severo líder de la Tierra de los Pingüinos, apartará a Mumble de su comunidad, y éste, en su solitario peregrinaje, halla a cuatro pequeños de su misma raza que aceptan al bailarín y lo invitan a divertirse con ellos. Este grupo unido por la calidez de la amistad cruza vastos territorios y vive alocadas aventuras que les hacen darse cuenta de que cuando uno es fiel a sí mismo, puede transformar el mundo.
Entre enfrentamientos con salvajes ballenas y decididos a salvar a los peces que un buque había recogido en el mar, el grupo comienza a conocer la felicidad y a acercarse a los seres humanos en un arrebato final que apunta a detenerse en la necesidad de cerrar la travesía de los protagonistas en una simpática moraleja.
Sin duda, tanto el director George Miller como los responsables del cálido y entretenido guión supieron manejar con enorme sentido de la belleza visual y de los rubros técnicos estos dibujos animados que hablan de la necesidad de hallar en cada ser humano las virtudes más amplias para transitar, como en el caso de esta historia, todos y cada uno de los elementos que hablan de la felicidad a pesar de los contratiempos que pone por delante la existencia. "Happy Feet: el pingüino" es, pues, una muestra mágica y sorprendente que une el humor con la necesidad de internarse en una trama dedicada a los adolescentes, sin que por ello los mayores dejen de gozarla también con enorme intensidad.
Canto a la fortaleza
Una pegadiza música y alegres canciones se insertan en esta fábula que, en las voces de Nicole Kidman, Hugh Jackman, Brittany Murphy, Robin Williams y una extensa lista de populares figuras, se transforma en una producción que logra, a cada paso, divertir y hacer de la existencias de esos miles de pingüinos un canto a la fortaleza de los humanos y de los animales. Lo que no es poco para que este film de animación logre su propósito de entretener en medio del blanco manto antártico, allí donde los pingüinos lucen sus pasos vacilantes y su sabio poder de transitar la existencia ante las adversidades y los deseos de mejorar su comunidad cada vez más poblada y plena de alegres situaciones y de deseos de luchar contra la naturaleza que los enfrenta a veces con peligrosas situaciones.
Cantando en inglés
Si bien Happy Feet, el pingüino se estrenará en nuestro país únicamente en copias dobladas al castellano, las canciones del film no serán traducidas y podrán disfrutarse en idioma original, con las voces de su elenco hollywoodense.
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