Star Wars y otros grandes regresos del cine

Esta es la semana del regreso de Star Wars, con El despertar de la fuerza, el Episodio VII. Star Wars supo volver no pocas veces. Cuando se estrenó El regreso del Jedi en la primera mitad de los ochenta también pudieron verse en Argentina La guerra de las Galaxias (que fue Episodio IV después, no en el origen) y El imperio contraataca. En Estados Unidos los reestrenos fueron muchos. Luego, en 1997, fue el reestreno en cines de la edición especial de la trilogía, la única que había en ese momento. En 1999 aparecería "la nueva", es decir la primera de las precuelas: Episodio I. Y ahora comienza una nueva era, con la esperanza de la vuelta al guión de Lawrence Kasdan y con la dirección de alguien que ha probado muchas veces su excelencia como J.J. Abrams.

Con dos películas en 1973 y 1978, Terrence Malick fue un director clave de los gloriosos 70. Las películas fueron Malas tierras, es decir Badlands, con Martin Sheen, Sissy Spacek y Warren Oates, una película que inspiró a Bruce Springsteen (y no sólo por la canción homónima, también y sobre todo para "Nebraska"). Y Días de gloria (Days of Heaven, no "Glory Days"), con Richard Gere, Brooke Adams y Sam Shepard. Luego, 20 años sin dirigir. Y el reclusivo y ermitaño Malick volvió en 1998 con La delgada línea roja:

Para un actor en plena carrera, una pausa bastante menor a la de Malick puede ser llamativa. Así, fue noticia fuerte cuando Al Pacino regresó al cine con Prohibida obsesión. Sí, ese título le pusieron acá. Se llamaba Sea of Love, como la canción, que estaba en la película en dos versiones, la de Phil Phillips & the Twilights y la de Tom Waits. La película, además, fue la que convirtió en estrella a Ellen Barkin. Pacino volvía después del mega fracaso de Revolución de 1985.

Otro caso de pausa gigante luego de los setenta fue el de Leonardo Favio , el gran director argentino. Favio había hecho tres películas en los sesenta: Crónica de un niño solo, Este es el Romance del Anicetoy la Francisca… y El dependiente. Luego tres en los setenta: Juan Moreira, Nazareno Cruz y el lobo y Soñar, soñar. Y desde 1976 hasta 1993 estuvimos sin cine de Favio. El regreso fue con todo: Gatica, el mono.

Y para terminar, el regreso del que hizo famosa la frase "I’ll be back". Arnold Schwarzenegger fue el protagonista de Terminator 3: la rebelión de las máquinas en 2003, luego estuvo casi ausente del cine (pero presente como gobernador de California). Tuvo un par de papeles mínimos. Y ni siquiera estuvo acreditado en la primera Los indestructibles (2010). En la segunda, en 2012, tuvo un papel secundario. Y recién 10 años después de Terminator 3 volvería a ser protagonista, en el excelente western contemporáneo El último desafío, del surcoreano Kim Jee-woon.

Por Javier Porta Fouz

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