Shakespeare, en clave contemporánea
Eugenio Zanetti rodó su ópera prima, Amapola, con un elenco de estrellas
En los pasillos del palacio Sans Souci, en Victoria, se escucha "¡Silencio, por favor!" Es que François Arnaud está a punto de filmar su última escena para Amapola , la ópera prima de Eugenio Zanetti. En el jardín hay camiones que contrastan con la arquitectura renacentista del lugar, extras con ruleros y a medio maquillar, técnicos enredados entre cables y claquetas, y asistentes que, lejos de prepararse para un baile de máscaras, corren y ultiman detalles por handy. "Tenemos nota, ¿no? Unos minutos y estamos", avisa Zanetti, prestigioso director argentino -cordobés- de ópera y teatro, ganador del Oscar por su dirección de arte del film Restauración , que reimagina aquí Sueño de una noche de verano, de William Shakespeare, en el marco del golpe de Estado de 1966 y la Guerra de Malvinas de 1982.
Dice Zanetti que lo interesante de la película es que la protagonista (la norteamericana Camilla Belle) es mágicamente transportada al futuro y vuelve al presente con la posibilidad de cambiarlo todo. Intentará mantener la unión de su familia, encontrar el verdadero amor y salvar su felicidad.
Arnaud, actor francocanadiense conocido por interpretar a Rimbaud en Maté a mi madre y a Cesare Borgia en la serie Los Borgia, se muestra entusiasmado frente a esa "oportunidad" de viajar en el tiempo. Habla español y se define como "curioso" cuando se trata de la cultura latinoamericana. Tal vez por eso, si bien no recuerda fechas exactas, "conozco bastante sobre la época militar aquí y me parece que el film muestra muy bien la esperanza de la juventud en 1966 y otra vez la desilusión en 1982. Hay momentos de la película que son superdramáticos y otros muy cómicos, como en la vida". Los entrevistados coinciden: Amapola no se ajusta a ningún género.
Historias y lenguas
Producción de Cinema 7 Films y de Fox International Production, es dramática, cómica, tremendamente romántica y desopilante; hay baile, hay canto y es visualmente muy atractiva. Nada casual: Zanetti se destaca como escenógrafo, pintor y diseñador. "Eugenio logró crear un mundo para cada uno de nosotros, tanto físico como psicológico. Para mí fue una aventura estar en la Argentina, actuar bajo su dirección y conocer a todos estos actores increíbles", se entusiasma Arnaud.
Amapola cuenta con la participación de grandes figuras internacionales como Geraldine Chaplin y con un excepcional elenco de actores argentinos: Leonor Benedetto, Lito Cruz (amigo del director hace 50 años), Nicolás Pauls, Luciano Cáceres, Nicolás Scarpino, Elena Roger, Esmeralda Mitre y Liz Solari, entre otros. El equipo técnico también es un poco de acá y un poco de allá, motivo por el que tanto delante como detrás de cámara se mezclan español, inglés y algo de francés. "La película funciona en español, pero trabajamos en varios idiomas. Tuve que traducir todo dos o tres veces, hablar de una manera con el primer asistente y de otra, por ejemplo, con Roland Emmerich [El día después de mañana], un gran amigo y director de fotografía del equipo. Es agotador, sí, pero en general me manejo así y seguramente François también", supone Zanetti. Arnaud, que durante las siete semanas de rodaje se puso en la piel de un norteamericano que llega a la Argentina escapando de la guerra de Vietnam, asiente, y agrega: "Mi personaje habla mayormente en inglés, pero demuestra que no es un yanqui tonto y que después de 15 años en el país aprendió la lengua, por eso en el segundo acto decidí sumar algo de español a mis diálogos".
Sea en el idioma que fuere, Zanetti asegura que dirigir actores para la pantalla grande no es cuestión, como en el teatro, de meses de ensayo y mucha conversación. "El cine es un momento, como el instante en que un capullo se abre. Y la ayuda del director no es desde una idea intelectual, porque el actor no funciona desde la cabeza sino desde acá", explica, tocándose el estómago.
Al momento de la entrevista faltan sólo dos días de trabajo para que, definitivamente, termine el rodaje de su ópera prima. "Sobreviví –dice–. No tengo ni miedo ni nostalgia, estoy feliz y ansioso por editar la película, armarla. Ahora es pedacitos, miles de pequeñas cosas que hay que unir para que, como lo pensé cuando escribí el guión, Amapola cuente una de las posibles versiones de mi vida."
El rodaje se reanuda: Lito Cruz y Luciano Cáceres son los primeros en llegar al set. Después Scarpino, que sonríe; Pauls, que juega con el sombrero de su vestuario; Elena Roger y Liz Solari, que, hasta hace un momento, desfilaba por el jardín de invierno hablando por celular. Zanetti controla la filmación desde un monitor en el cuarto vecino. Ordena, en inglés: "Let’s Shoot!" y, entonces vuelve a escucharse, en castellano, en los pasillos del palacio: "¡Silencio, por favor!".
lanacionarTemas
Más leídas de Espectáculos
"Contestó todo". Tras los rumores de separación, habló por primera vez Marynés Breña, la mujer de Guillermo Francella
Sin filtro. Yanina Latorre arremetió contra La China Suárez: “Si yo fuera la madre de Colapinto me asusto”
"¡No estoy preso!". El inesperado episodio que vivió Jony Viale en Miami tras asistir a los premios Martin Fierro Latino 2024