A River Phoenix le gustaba escribir. Cada vez que un personaje llegaba a sus manos, el joven ponía en la página lo que ese rol le hacía sentir, e incluso iba un paso más allá: esbozaba una biografía de ese chico, sea quien fuere.
"Necesito ponerle mi impronta, algo de idiosincrasia, mis propias referencias. Para Mi mundo privado escribí mucho, y después lo quemé", contó en una entrevista a sus 23 años, nada menos que unos días antes de su muerte. River, el actor que no se consideraba un actor. Para él, se trataba de vivir experiencias, vivir diferentes vidas, en definitiva, de vivir. "Cuando miro una película que hice, me cuesta juzgarla, quedó en el pasado y ya no siento conexión con ella, ya estoy inmerso en otro mundo", manifestó.
Basta leer algunas de sus declaraciones para llegar una conclusión unívoca: Phoenix poseía una sensibilidad que inspiró a las generaciones posteriores, una sensibilidad que traspasaba la pantalla, como cuando Mikey Waters declaraba su amor en la película de Gus Van Sant. Sus ojos, su boca, sus movimientos, lo decían todo. Había algo en él imposible de replicar, una vulnerabilidad conmovedora que, al combinarse con talento, gestaba algo explosivo. No habrá otro como River, no dejará de haber películas coming of age en las que no se sienta su presencia, un tributo latente. "No me siento carismático, soy una persona bastante ordinaria", añadió en esa última entrevista en 1993. Cuántos somos los que hoy disentimos.
Una infancia poco convencional
John Lee Bottom y Arlyn Dunetz (o Heart Phoenix, como se pasó a llamar luego) se conocieron haciendo dedo y se casaron un año después. Por un tiempo, disfrutaron de la vida itinerante, aprovecharon los 60 viajando ocasionalmente por California entregándose al flower power, para luego, ya siendo padres, integrar en 1973 un culto conocido como Children of God ("Los niños de Dios"). River Jude Phoenix fue su primer hijo (nació el 23 de agosto de 1970), nombrado así por el subtexto de la novela de Hermann Hesse, Siddhartha, y por la famosa canción de los Beatles, "Hey Jude". Sus hermanos, Rain, Joaquin, Liberty y Summer llegaron poco después (y en distintos países), y así la familia se empezó a mover en contextos, a veces, poco agradables. De todas formas, cada uno forjó un recuerdo diferente.
Mientras que River recordaba lo que era vivir de ciudad en ciudad en plena pobreza, y cantar junto a sus hermanas por dinero, Joaquin declaró en 2014 que los relatos sobre sus padres no eran del todo correctos. "Los cultos no se venden como tales. Mis padres encontraron una comunidad con la que compartían ideas, hasta que se dieron cuenta que había cosas que no les gustaban y se fueron", subrayó.
"Las cosas se le fueron de las manos al líder, David Berg, quien atraía a sus discípulos por sexo, y nosotros no íbamos a aceptar eso", declaró Arlyn. A fines de los 70, la familia cambió su apellido a Phoenix, nuevamente con una connotación simbólica. El clan buscaba empezar de cero, renaciendo de las cenizas, y River fue el primero en conocer la popularidad a muy temprana edad, más precisamente a los 10 años, cuando la representante Iris Burton lo vio junto a sus hermanas Summer y Rain cantando en Los Ángeles. Tras algunas apariciones en comerciales, Phoenix saltó a la fama en 1985 con el film de ciencia ficción Explorers, donde compartió pantalla junto a otro joven talento de la época: Ethan Hawke.
Desde ese momento, su presencia no pasó inadvertida, y los 80 y comienzos de los 90 llevaron su rostro gracias a films como Cuenta conmigo, La costa mosquito, Running on Empty (papel por el que recibió una nominación al Oscar en la categoría secundaria), Indiana Jones y la última cruzada, y Mi mundo privado, donde formó una bellísima dupla con Keanu Reeves. "Lo que me mantiene motivado es vivir, es estar en movimiento", le contó Phoenix al director, Gus Van Sant, en una entrevista que le realizó para la revista Interview. En varios tramos, ambos hablan de "esa chispa" que une al cineasta con su musa inspiradora, y es una buena palabra -entre tantas otras- para describirlo a Phoenix. Chispa.
Hay una secuencia en Cuenta conmigo donde Chris prácticamente está de rodillas pidiendo que un amigo lo entienda, lo acompañe, se quede a su lado. La escena parece ser una viñeta especular de la de Mi mundo privado, por la que el joven ganó el premio al mejor actor en Venecia. En ambas, dos hombres vulnerables que se sienten solos y no les da miedo gritárselo al mundo, se confiesan, se exponen. Cómo olvidarlos. En ese punto tan álgido de su carrera fue cuando Phoenix comenzó a consumir cocaína y heroína, mezcladas con alcohol. Sus adicciones lo avergonzaban al punto tal de que muy pocos sabían lo que pasaba tras bambalinas, como Van Sant y su novia de entonces, su colega Martha Plimpton, con quien estuvo en pareja antes de conocer a Samantha Mathis en The Thing Called Love.
Una muerte repentina y un cimbronazo para la familia
Samantha Mathis notó que algo raro sucedía esa fatídica noche del 31 de octubre de 1993. River, Joaquin (quien entonces era llamado Leaf, "hoja") y Rain fueron a un club muy famoso de Los Ángeles llamado The Viper Room, y cuyo dueño era otro actor que estaba en la cresta de la ola: Johnny Depp. Mathis creyó que solo Joaquin y Rain se quedarían allí, pero River escuchó la música, y su deseo de tocar con la banda pudo más. "Sabía que estaba por pasar algo, River estaba drogado de una manera en la que me ponía incómoda, pero suponía que no se iba a quedar mucho", recordó. Una hora más tarde, River moría por una sobredosis.
El recuerdo de la actriz es nítido y desgarrador. Mientras Phoenix discutía con un hombre y era echado del club, ella estaba en el baño. Al salir, lo vio caer al pavimento, convulsionando incesantemente. Desesperada por la situación, entró al lugar a buscar a Rain y a Joaquin, quien se comunicó con el 911 fuera de sí, en un llamado que luego se filtraría, y en el que se escuchaba al entonces joven de 19 años desconsolado ante la inminente muerte de su hermano, que se produjo a los pocos minutos en el hospital Cedars-Sinai.
River era un hombre de una gran sensibilidad
El impacto de su partida fue inconmensurable. Sus exparejas, Plimpton y Mathis, lo describieron como un muchacho "sensible y obsesivo", un chico "de gran corazón pero que estaba muy mal y que no sabía cómo canalizar sus buenas intenciones".
Ese microcosmos que es Hollywood, sobre todo el de esa época donde abundaban los jóvenes intérpretes que querían ofrecerle algo real a la audiencia, hizo que Leonardo DiCaprio se cruzara esa noche con Phoenix, antes de que éste fuera al Viper Room. "Creo que lo que sucedió horas más tarde marcó a Leo, quien nunca había consumido nada", contó Rob Reiner, realizador de Cuenta conmigo. El destino quiso que los dos roles que iba a interpretar Phoenix -The Basketball Diaries y Eclipse Total- fueran eventualmente para DiCaprio.
La familia sufrió la pérdida sin poder poner el dolor en palabras. Esos hermanos y padres tan unidos, que viajaban a Florida y a Costa Rica para tocar música y comer hasta largas horas rodeados de sus afectos, ahora tenían un vacío imposible de llenar. Para Joaquin, el consuelo fue rodearse de figuras paternas, de amigos como el actor Dermot Mulroney y el músico Michael Stipe. "River era como mi hermano pequeño, y cuando lo perdí sentí que realmente había perdido a un hermanito", declaró el frontman de R.E.M. sobre ese vínculo. Recordemos que Phoenix estaba muy inmerso en el mundo de la música: tenía una banda llamada Aleka's Attic, componía y tocaba muy bien la guitarra. De hecho, cantó su tema "Lone Star State of Mine" en el film The Thing Called Love. Al año siguiente, también se iba un referente del grunge y el movimiento nunca volvió a ser el mismo: Kurt Cobain se suicidaba y otro artista enorme se volvía irreemplazable.
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Como sucedió con Cobain, Phoenix también generó en sus pares la necesidad de rendir homenajes perpetuos. Los Red Hot Chili Peppers escribieron "Trascending" del álbum One Hot Minute en tributo a River, quien había hecho un cameo en el video de "Breaking the Girl", y a quien se le dedicó "Give It Away", ambos himnos de Blood Sugar Sex Magik. Por otro lado, Phoenix tenía un vínculo muy estrecho con John Frusciante, quien habría compuesto "Smile From The Streets You Hold" para su amigo, algo que nunca se terminó de confirmar. Lo propio hizo Stipe con "E-Bow the Letter", una carta de amor a River que se editó en el enorme disco New Adventures in Hi-Fi. Su hermana, Rain, vive recordándolo en las redes, donde destaca el compromiso que tenía su hermano con proyectos "en los que realmente creía".
El legado que River le dejó a Joaquin
Recientemente, en un homenaje que le hicieron a Joaquin Phoenix en el Festival Internacional de Cine de Toronto con motivo de su actuación en Guasón, el actor recordó cómo su hermano lo ayudó a no bajar los brazos ante los vaivenes de la actuación. Gracias a sus consejos, Joaquin retomó su vocación tras un impasse de seis años luego del film Parenthood, y lo hizo por la puerta grande: como partenaire de Nicole Kidman en Todo por un sueño, precisamente dirigida por Gus Van Sant.
"Cuando tenía 15 o 16, mi hermano River vino a casa después de trabajar con una copia en VHS de una película llamada Toro Salvaje. Me sentó y me hizo verla. Al día siguiente, me despertó y me hizo verla de nuevo, y luego me dijo: 'Vas a volver a actuar, eso es lo que vas a hacer'", rememoró Joaquin, quien suele ser extremadamente reservado. "No me lo pidió, me lo dijo, y por eso le debo todo, porque la actuación me ha dado una vida increíble", añadió. El relato es emocionante, sobre todo si tenemos en cuenta que Guasón fue producida inicialmente por el propio Martin Scorsese, y tiene mucho -por no decir bastante- de Taxi Driver, otra gran película sobre un hombre que desciende al infierno, un poco a la manera de Jake LaMotta.
River me pidió que actúe, por eso le debo todo, porque la actuación me ha dado una vida increíble
Una tarde, en 1987, Joaquin le contó a un medio que visitó a la familia Phoenix en Florida que añoraba tener una vida normal, porque sus hermanos extrañaban a sus amigos, ya que al mudarse tanto siempre terminaban despidiéndose de personas con quienes se habían encariñado. En esa época, cuando River era la estrella del clan, separaba dinero para que sus hermanas pudieran ir a la universidad, porque su padre estaba batallando con el alcohol. Al morir River, Joaquin tomó ese rol, fortaleciendo aún más el lazo que tenía con su hermano.
Un fotograma puede resumirlo todo. La caminata final de Chris en Cuenta conmigo, quien desaparece entre los árboles, simboliza la partida de River: es triste, y al mismo tiempo nos recuerda lo que es la sensibilidad. La sensibilidad de un gesto que habla de esas figuras que, como "esos amigos que se tienen a los 12", no se olvidan nunca más. El río es la eternidad. Así lo comprendemos en Siddhartha, la novela que inspiró el nombre de un joven que se hizo eco de ese simbolismo, y cuyo legado persiste, trasciende épocas, nombres, films. El río sigue fluyendo.
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