Por 007 se mezclan la realidad y la ficción

LONDRES ( Corriere della Sera ).- Los británicos se toman muy en serio a James Bond. El Museo Imperial de la Guerra, verdadero templo de la memoria para el Reino Unido, le dedica actualmente una muestra como si se tratara de un personaje de la vida real, no de ficción, cuando su nuevo film está a punto de estrenarse.

Pero no sólo allí 007 despierta emociones de tipo político. Algo parecido ocurre en Rusia, donde el otrora poderoso Partido Comunista de San Petersburgo acaba de acusar a la actriz ucraniana Olga Kurylenko, chica Bond en la última película de la serie, Quantum of Solace , de alta traición "por haber ayudado al asesino de centenares de valientes soviéticos y de sus aliados. Mezclando realidad y ficción, la agrupación sostuvo que Bond "es un espía que trabajó bajo las órdenes de Ronald Reagan y Margaret Thatcher para destruir a la Unión Soviética y separar a Ucrania de Rusia".

El ataque contra la actriz, publicado en el sitio de Internet del Partido Comunista de San Petersburgo, fue calificado de una parodia por varios medios locales. Pero el líder de la agrupación, Sergei Malinkovich, dejó en claro que la acusación es muy seria. "Todos saben que la CIA y el MI6 financian las películas de James Bond como parte de una operación especial de guerra psicológica contra nosotros. Esta chica ucraniana se acuesta con Bond y esto significa que Ucrania se acuesta con Occidente", señaló al corresponsal de The Times, en Moscú.

Kurylenko es una bella ucraniana de 28 años que se crió en Berdyansk, puerto ubicado sobre el Mar Negro, y se mudó a París a los 16 años con la idea de convertirse en modelo. En Quantum of Solace interpreta a una agente ruso-boliviana que cae inexorablemente entre los brazos de James Bond. No es la primer ni será la última: en su larga carrera cinematográfica, el agente secreto al servicio de Su Majestad sedujo en total a 44 mujeres, de las cuales las tres cuartas partes en algún momento trataron de asesinarlo.

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